En estos más de tres meses de confinamiento, muchos hemos mudado el trabajo a la casa y, seguramente, ya estás presentando algunos dolores en la columna, codos y rodillas… pensarás que es estrés y tienes razón. Pero otro de los factores que desencadena todos estos males es la silla que estás usando para trabajar.
Doris Reymer, médico rehabilitador de la Clínica Internacional, explica que una silla con una altura inadecuada y sin descansabrazos es perjudicial para tu columna, cervical, rodillas, articulaciones, músculos y nervios.
“Es fundamental que cuando te sientes en la silla tus pies toquen el piso y tus rodillas formen un ángulo de 90°. También tus piernas deben estar paralelas al piso, de esta forma evitarás dañar tu zona lumbar, dorsal y extremidades. Además, es sumamente importante realizar pausas activas de 10 minutos cada dos horas”, enfatiza la experta.
Asimismo, Reymer brinda una serie de recomendaciones para poder adaptar nuestra silla del comedor, si es que no tenemos una especial para trabajar, a fin de cuidar nuestro cuerpo.
IMPORTANTE
“Sentarse a trabajar en la cama y con las piernas dobladas en ‘mariposa’ es lo peor que le puedes hacer a tu espalda, columna y articulaciones”, advierte Reymer.
+ Coloca una tarima, si cuando te sientas no llegas al suelo, para que tus pies estén en descanso
+ Puedes poner un cojín en el espaldar de la silla para que tu columna esté descansada.
+ Siéntate correctamente, olvídate de doblar las piernas o colocar el trasero en la punta de la silla. Es muy importante tu postura.