¿Puede influir el sexo en una infidelidad? Un tema muy importante para la salud mental en pareja y sobre todo, en lo personal, porque no podemos ocultar que una parte esencial de tu vida es el sexo en pareja, que tiene como finalidad mantener una relación fuerte con tu ser amado, y que en algunos casos puede verse afectada por la infidelidad.
La terapeuta sexual y psicoemocional Chris Kadesh comenta que cuando uno se enfoca en una sola persona y tiene una relación seria a largo plazo, tu principal propósito es que tú y tu pareja esten realmente comprometidos con lo que empiezan a construir, tanto en la parte sentimental, emocional en la parte sexual.
Pero, ¿Qué puedes hacer cuando el sexo falla o cuando no sientes deseo de estar con tu pareja? ¿Cómo puedes manejar una infidelidad? ¿En qué momento podrías dar el paso y terminar? ¿Cuándo puedes dar una nueva oportunidad y continuar con la relación en la que has invertido tanto tiempo y amor?
La especialista señala que el sexo en pareja es muy importante. Si ambos no son una pareja sexual, podrían entrar a un categoría de pareja que conviven, cuya definición más acertada podría ser compartir el mismo espacio con alguien sin ningún tipo de intimidad. Esta situación influye en la infidelidad, pues cuando la pareja no está satisfecha, se abre la posibilidad de nuevos encuentros donde se busque llenar los vacíos que tiene su relación.
¿Qué necesita una relación estable para ser sólida?
Una relación estable necesita la solidez de tres elementos: intimidad, compromiso y pasión. Por eso, cuando en la pareja ya no tiene nada qué decirse y la relación es fría, distante, sin emociones ni caricias, el sexo encuentra acomodo en cualquier otro lugar ajeno.
¿Qué pasa cuando no hay sexo en la pareja?
La falta de sexo comúnmente es lo que incita al flirteo (mantener una relación amorosa superficial) y a la infidelidad. La insatisfacción sexual en la pareja desencadena frustración, rabia, baja autoestima y una necesidad creciente de cariño, de sentirse deseada (o) y de saber cómo te perciben los demás. Para muchas personas, lo que las arroja a otros brazos es la infidelidad que genera en una pareja no gozar de una vida sexual satisfactoria.
Si ponemos como ejemplo a una pareja que lleva mucho tiempo juntos, es normal que el deseo disminuya, al igual que la intensidad con la que tienen sexo. Sin embargo, es responsabilidad de ambos encontar la forma de devolverle la chispa al sexo en la pareja y agotar todas las posibilidades con el fin de prevenir una posible infidelidad.
Si a pesar de varios intentos, la sexualidad no mejora; entonces tal vez haya que dar por terminada la relación y dejar de hacerse daño mutuamente. En definitiva, cuando uno es infiel debe preguntarse a qué o a quién.
Te puede interesar:
La intimidad más allá del sexo
Lo que debes saber del punto G de la mujer
¿Por qué es importante hablar de sexo con nuestra pareja?