El ovario poliquístico (SOP) es una enfermedad ginecológica, pero también metabólica donde se puede presentar resistencia a la insulina y problemas en nuestro colesterol y triglicerios; por ello, es importante cuidar nuestra alimentación.
La nutrióloga de Laviafit, Mauret Rojas comenta que si bien no debemos eliminar los carbohidratos por completo, hay que saber aquellos que tengan más fibra, menor índice glicémico y que contenga más nutrientes para que no sean calorías vacías.
¿Qué metas deben tener las mujeres con SOP en su alimentación?
- Mejorar la respuesta de insulina.
-Mejorar el perfil de lípidos.
-Prevenir síntomas específicos como el acné o la microbiota del abdomen.
-Mejorar la microbiota intestinal para la correcta excreción de toxinas y absorción de nutrientes.
-Proporcionar los nutrientes comúnmente deficientes en mujeres con SOP.
¿Y cómo se puede revertir la resistencia a la insulina?
El cambio en tu alimentación es la primera línea de tratamiento para revertir la resistencia a la insulina y mejorar los síntomas del SOP.
¿Cuáles son los alimentos que debo evitar si tengo ovario poliquístico?
1.- Refrescos y bebidas con jarabe:
Hay hasta 35 gramos de azúcar en una soda de 330ml.
El consumo excesivo de azúcar empeora la resistencia a la insulina y estimula el almacenamiento de grasa en el cuerpo.
Además, por elevar la glucosa de forma abrupta, estimula el hambre durante el resto del día.
2.- Harinas:
La resistencia a la insulina, presente en muchas mujeres con SOP, hace que se generen feroces antojos por los dulces y las harinas. Esto es debido a los desbalances de la glucosa sanguínea por el exceso de insulina circulante.
Si los consumimos de manera habitual nuestro cuerpo entra en un ciclo donde cada vez nos pedirá más.
Asegúrate de estar consumiendo una dieta adecuada para que no te quedes con hambre ni antojos.
3.- Lácteos
Muchas mujeres con SOP experimentan acné.
Los lácteos estimulan la producción de sebo en las glándulas sebáceas, ya que estimulan el factor de crecimiento similar a la insulina IGF-1.
Debes limitar su consumo si tu sufres este problema.
4.- Endulzantes artificiales:
No tienen calorías, pero estimulan tu antojo por los dulces, inflaman tu intestino, alteran la microbiota intestinal y la homeostasis de la glucosa.
Recuerda que una microbiota intestinal afectada hará que no se absorban bien los nutrientes y que no se puedan excretar las toxinas.
5.- Grasas hidrogenadas:
Son las que permanecen sólidas o semi sólidas en la temperatura ambiente.
Estas contienen grasas trans y mucha grasa saturada. Recordemos que el SOP es un problema que puede generar disturbios en nuestro perfil metabólico.
Un ejemplo de grasa hidrogenada es la margarina.
6.- Cafeína en exceso:
La taza de cada mañana está bien. Sin embargo, consumirlo repetidas veces durante el día puede afectar nuestro balance hormonal alterando los niveles de estrógeno, cortisol y la sensibilidad a la insulina.
7.- Comida rápida:
Suele estar preparada con mucha sal, azúcar, conservadores, grasas trans y grasas saturadas.
El consumo frecuente de comida como: pizza, hamburguesas, papas a la francesa, hot dog y pollo frito pueden no solo afectar tu peso sino también tu perfil lipídico.
Consumirlos seguido puede afectar también nuestra sensibilidad a la insulina y puede predisponer a la diabetes tipo 2.
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