Es verdad que la menstruación llega todos los meses en mujeres de edad fértil, pero no siempre se presenta de la misma manera. Puede ocurrir que la regla aparezca con coágulos y aunque es extraño ver esas bolitas de color oscuro en la toalla higiénica, resulta inofensivo cuando esto se da de forma esporádica. Según la médico ginecóloga Gabriela Silva la menstruación no es más que la expulsión del endometrio, es decir, la mucosa que recubre el útero. Cuando el flujo es excesivo (metrorragia), entonces se forman esos grumos de sangre.
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Suele ocurrir, circunstancialmente, en mujeres a las que se les está retirando la menstruación a causa de la menopausia y en las niñas que recién están teniendo su periodo debido a un desequilibrio hormonal pasajero.
¿CUÁNDO PREOCUPARSE?
Sí hay que poner atención cuando la formación de coágulos ocurre todos los meses, ya que significa que la paciente elimina un volumen de sangre mayor y es posible que sufra anemia o deficiencia de hierro. En este caso, hay que realizarse un examen de sangre y permitir que el médico evalúe los niveles de hemoglobina.
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“También puede ser el síntoma de un problema anatómico, llámese miomas o tumor benigno, o pólipos, que es el crecimiento anormal de tejido. Ambas alteraciones pueden originar coágulos en la menstruación sin dolor. Es importante practicarse una ecografía ginecológica para diagnosticar esas afecciones o descartarlas”, precisa.
CHEQUEO PERIÓDICO
Es importante no saltarse los controles ginecológicos y si hay sangrados atípicos acudir al ginecólogo para determinar la causa. Ni los miomas ni los pólipos son enfermedades alarmantes, pero requieren un diagnóstico oportuno, control y tratamiento si es necesario.
CUANDO HAY DOLOR
Si además de coágulos hay dolor, esto podría ser una señal de endometriosis. Se trata de una enfermedad benigna que se produce cuando pequeñas partes del tejido que recubren el útero (endometrio) crecen en otros órganos pélvicos, como en los ovarios o las trompas de Falopio.
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