En la Primera Guerra Mundial, en 1914, se dio la tregua navideña más famosa. A lo largo del Frente Occidental, tras cinco meses de combate, horas antes del 25 de diciembre, soldados franceses, alemanes y británicos cruzaron las trincheras para saludarse y, en tierra de nadie (que separa a rivales) se dieron regalos, comieron, jugaron fútbol, bailaron y cantaron villancicos. La Primera Guerra Mundial (1914-1918) acabó con la derrota de Alemania y el triunfo de Francia y Reino Unido.
Pero no solo se dio una tregua en la Gran Guerra, también ocurrió en otros conflictos. Por ejemplo, en la Guerra de los Cien Años, en 1418. Al pelear Inglaterra y Francia (1337-1453), dejaron las armas durante el sitio a Ruán, cuando el rey británico Enrique V llevó por Navidad alimentos a los defensores de la ciudad francesa. En 1553 Francia ganó la guerra.
En 1573, durante la Guerra de los Ochenta años, en el asedio de Haarlem (Países Bajos) por el rey de España Felipe II, soldados hispanos católicos y holandeses protestantes depusieron sus armas dos días por Navidad con comida y regalos. Tras la guerra (1568-1648), los Países Bajos ganaron su independencia.
En la Guerra de Secesión en Estados Unidos (1861-1865), conflicto civil entre unionistas del norte y confederados del sur, el 25 de diciembre de 1863 patrullas intercambiaron comida y tabaco en Rappahannock. En 1865, el norte ganó la guerra y evitó la independencia del sur.
La noche del 24 de diciembre, durante la guerra Franco-Prusiana, entre Prusia (hoy Alemania) y Francia (1870), soldados franceses y prusianos dejaron trincheras y entonaron villancicos. En 1871, el triunfo prusiano unificó a Alemania y cayó el imperio francés de Napoleón III.
DATITO
Aunque los soldados intentaron desde 1915 nuevas treguas por Navidad en la Primera Guerra Mundial, ellas no se concretaron al ser terminantemente prohibidas por los mandos de los ejércitos de ambos bandos. Existía el temor de que los soldados dejen de luchar a tono de las consignas de quienes planteaban el fin de la conflagración sin un triunfo de ningún lado.