
¿Eres joven, pero ya notas arrugas, manchas o pérdida de elasticidad en tu piel? Esto puede deberse al envejecimiento prematuro, un proceso acelerado por el entorno o el estilo de vida.
La buena noticia es que la mayoría de los factores son controlables y prevenibles, por lo que identificarlos a tiempo es clave para dar un giro en tus hábitos.
Las principales causas son:
FUMAR
Las toxinas del tabaco dañan el colágeno y la elastina, provocando arrugas y un aspecto apagado.
ALIMENTACIÓN POCO BALANCEADA Y EXCESO DE ALCOHOL
El azúcar, los ultraprocesados y las bebidas alcohólicas afectan la firmeza y vitalidad de la piel.
DORMIR MAL
No descansar lo suficiente acelera el desgaste celular.
ESTRÉS CONSTANTE
Eleva el cortisol, una hormona que disminuye la producción de colágeno y apaga la luminosidad natural.
RADIACIÓN UV Y EL SOL
Responsables de hasta el 90% de los signos visibles de envejecimiento.
La prevención es tu mejor aliada. Cuidar tu piel no depende de fórmulas mágicas, sino de hábitos saludables: una alimentación equilibrada, buena hidratación, descanso reparador, control del estrés, protección solar constante y dejar de lado el tabaco y el exceso de alcohol.
Con pequeños cambios, tu piel puede recuperar vitalidad, firmeza y luminosidad.
DATITO
El envejecimiento prematuro puede prevenirse porque depende de hábitos y entorno. El intrínseco, en cambio, es genético y natural con los años, y no se puede detener.
TE VA A INTERESAR:
- Descansar el páncreas: la clave para bajar de peso y cuidar la salud
- El pastor chiribaya: el mejor amigo de los antiguos peruanos
- Inspiración sin límites: Conoce a Cecilia, la ‘Señora Fit’ que a sus 77 años transforma su vida con pesas y baile
- ¿Es bueno dormir con tu mascota en la misma cama? Esto dice Pancho Cavero









