El Mal de Parkinson no se origina en el cerebro, el corazón o la sangre. No, de acuerdo a científicos del Instituto de Tecnología de California, el Mal de Parkinson tendrá su origen en los intestinos. Sí, en las populares "tripas". Este anuncio no suena tan disparatado para aquellos que conocen más de este problema que tiene a más de 10 millones de diagnosticados en todo el mundo. Veamos.
Sostener que el Mal de Parkinson tiene su origen en los intestinos guardaría relación con los síntomas previos a la manifestación de la enfermedad. Son los problemas digestivos los anuncios previos a la llegada definitiva del Mal de Parkinson en una persona.
Habla Sarkis Mazmanian, uno de los autores de esta reciente investigación científica sobre el mal de Parkinson: “Por primera vez hemos descubierto un vínculo entre el microbioma intestinal y el Parkinson", sostiene. Pero esto no es una mala noticia, sino todo lo contrario. Sigue Mazmanina: "Creemos que las enfermedades neurodegenerativas podrían tener su origen en el intestino y no solo en el cerebro, lo que abre nuevas posibilidades de tratamiento”.
¿Y cuáles son estos síntomas digestivos del Mal de Parkinson? Apunta: flora intestinal alterada, problemas gastrointestinales, estreñimiento crónico. Todos estos problemas constantes tendrían como consecuencia que el cuerpo tiemble y otros efectos motores propios de quienes padecen del Mal de Parkinson.
Específicamente, la flora intestinal, según el estudio, condicionaría los problemas motores del Mal de Parkinson, su intensidad y otros efectos.