Son muchas las ocasiones en que vemos a mujeres jalándose de los cabellos y hasta agarrándose a las patadas por el amor de un hombre. En internet las imágenes son numerosas y realmente espantosas. Esta actitud nos lleva a preguntarnos ¿por qué estas mujeres actúan de esa forma?, ¿qué buscan?
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La psicoterapeuta Juliana Sequera explica que las personas con este tipo de conductas tienen una idea equivocada del amor, pues creen que es necesario competir por él.
“Las mujeres que pelean por cariño carecen de amor propio y son inestables emocionalmente. Y esto sucede porque en la infancia les enseñaron, sin querer, a competir por el cariño del padre o de la madre”, agrega.
Antes de pelearte por un hombre, pregúntate ¿qué es lo que lograrás?, ¿buscas que te ame solo a ti? Recuerda que quien te quiere te dará tu lugar y no será necesario que estés ‘marcando tu territorio’ a toda mujer que se le acerque.
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“Lo que debe primar en la vida de cualquier persona es el amor hacia nosotros mismos y valorarnos. Cuando tengamos esto claro no pelearemos por ninguna otra persona porque jamás expondremos nuestra tranquilidad e integridad”, añade.
Si sabes cuánto vales, no pelearás por una persona, sino que lucharás por tu bienestar. Si tienes que hacer de todo para que él se dé cuenta es porque no vale la pena.
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Hace días escuchamos a una conductora de televisión preguntarse alegremente por qué los hombres no pueden perdonar ‘los cachos’. Más allá de lo gracioso que puede sonar, esta es una situación muy seria. De por sí para todos es extremadamente difícil perdonar una infidelidad, pero para los hombres lo es aún más.
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Mary Castro, psicóloga de la Clínica Ricardo Palma, señala que la diferencia es que los hombres tienen demasiada presión social en su entorno y no saben manejar ese tipo de situaciones.
“El hombre que es víctima de una infidelidad presenta ira, frustración, le dañan su orgullo y su ego queda golpeado. Para ellos es difícil recuperarse y no piensan en dar una nueva oportunidad porque no quieren ser el hazmerreír de sus amigos”, explica.
Incluso, si su círculo cercano no ejerce ningún ‘comentario burlón’, él se imaginará que sí lo hacen porque él en su momento también lo hizo con alguna otra persona, y esos pensamientos no le permiten perdonar.
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Sin embargo, hay algunas excepciones donde los varones perdonan y retoman la relación después de una infidelidad.
“Esto ocurre porque ellos también engañaron en un momento y asumen su responsabilidad o se dan cuenta de que hubo problemas en la relación que desencadenaron el engaño”, agrega Castro.
