De niños nos enseñan a lavarnos todos los días los dientes para evitar que se nos caigan, pero ¿acaso hacemos lo mismo con nuestras mascotas? La limpieza bucal de nuestros engreídos es muy importante para prevenir enfermedades.
“Limpiarles los dientes es necesario para evitar que la placa bacteriana se adhiera a la superficie de los dientes y se convierta en sarro… ambos son los causantes de diversas enfermedades como: halitosis, gingivitis, periodontitis y males gastrointestinales (vómitos y diarreas)”, explica la adiestradora canina Mercé García.
Por esa razón es fundamental hacer un cepillado diario o, en caso de no ser posible, hasta tres veces a la semana. Usa un cepillo especial o tu dedo índice cubierto con una tela de nylon (pregúntale al veterinario) y una pasta dentrífica para perros.
IMPORTANTE
Existe en el mercado una pasta dental específica para perros, que es comestible y no necesita enjuagarse. Nunca le realices la limpieza con la tuya porque puede causarle problemas gástricos y, además, contiene flúor, que es tóxico si se ingiere.
TEN EN CUENTA LO SIGUIENTE
- En los colmillos y muelas traseras se acumula más sarro. Límpialos por ambos lados.
- Necesitas tiempo y paciencia para que tu perro se acostumbre. No lo fuerces.
- Debes intentar que asocie la limpieza bucal con algo positivo, como un premio.