Los niños ya tienen un mes de haber entrado a clases, y ¿todavía te cuesta levantarlo por la mañana? Según el psicoterapeuta Hans Gutiérrez, la clave está en darle una motivación para que salga de la cama con entusiasmo.
“No se trata de premiarlo, sino de ayudarlo a crear un hábito con los horarios hasta que se haga una costumbre”, explica el especialista.
El desayuno siempre es un buen motivo para abrir los ojos de inmediato. Pregúntale a tu hijo qué le gustaría desayunar y recuérdale que ese alimento lo está esperando en la mesa cuando vayas a llamarlo a su cuarto.
Esto ayudará a que, con el tiempo, se acostumbre a despertar a la hora. También puedes ponerte de acuerdo con los padres de sus compañeros para que pueden ir juntos al colegio. La compañía lo animará.
RESPETA SUS HORARIOS
Si el niño permanece hasta altas horas de la noche viendo televisión o cena muy tarde, es lógico que le cueste salir de la cama. Acostumbra a tu hijo a acostarse temprano para que así no le falte el sueño.