La noche del 31 de octubre, es mágica y los niños la esperan con ansias. Es así que el Halloween es una de las fechas más esperadas por los pequeños del hogar para disfrazarse y celebrar entre amigos y familia de esta fiesta especial. Previa la celebración, son muchos los padres quienes se plantean interrogantes cómo ¿qué podemos hacer?, ¿a dónde podemos ir? O la más frecuente, ¿cómo celebrarlo de manera diferente? En esa línea, una escapada en familia, representa una buena oportunidad para disfrutar de este día especial.
“Los planes más comunes para estas fiestas se desarrollan en casa o con una salida cerca al hogar, sin embargo, una escapada en familia a un destino no antes visitado podría convertirse en una experiencia inolvidable”, comenta Zorka Aguilar, director de Operaciones & Servicios al huésped & de Experiencia de Luxevaca, comparte cinco destinos para viajar y de disfrutar del Halloween en familia.
Yanahuara en Arequipa
Este distrito posee una gran infinidad de lugares turísticos por explorar, sin embargo, existe una leyenda que forma parte de la cultura popular arequipeña. Estamos hablando de la Casa Encantada, una historia que remonta en el siglo XVII cuando un noble español asesinó a dos personas en dicho establecimiento para después vender el inmueble. Desde aquel crimen, se escucha lamentos, cadenas arrastrándose y otros sucesos paranormales lo que lo convierte en un excelente destino para la noche del Halloween.
Yungay en Huaraz
El Cementerio General Presbítero Villón, es una de los destinos imperdibles para esta noche de Halloween. Este lugar alberga los cuerpos de las víctimas del terremoto de Huaraz en 1970. Además, se podrá visitar lo que aún queda de Yungay, pues, este fue sepultado debido a la magnitud del evento telúrico como, por ejemplo, restos de techos de casas o un autobús que emerge de la tierra.
Cerro el encanto en el Ñuro
Los pobladores de la zona afirman que este cerro es místico pues, a lo largo de los años se ha visto envuelto en diversos sucesos inexplicables. La leyenda revela que los incas hacían uso de este monte para guardar sus riquezas como el oro entre otros objetos y así evitar que los españoles no les quiten sus más preciadas posesiones. Es así que, la gente comenta que está encantado y evitan a toda costa de explorarlo pues, podría pasar desgracias como, un derrumbe o peor aún, no salir nunca.
Pampachari en Apurímac
En la provincia de Andahuaylas, al sur del Perú se puede encontrar la reconocida “La aldea de los pitufos”. El paisaje que trae son formaciones rocosas de alrededor de 10 metros de altura, las casas son en forma de hongo, muy parecidas a la del dibujo animado de los 90′s. Los lugareños cuentan que los Ayas o Gentiles fueron la población que vivió en esta localidad gracias a su conexión con la naturaleza, sin embargo, estos desaparecieron cuando un día aparecieron dos soles en el cielo, lo que conllevó que todo ser vivo fue quemando.
Cachiche en Ica
Según los más antiguos pobladores de Ica, en esta localidad existieron mujeres con poderes sobrenaturales los cuales eran usados para preparar diversos brebajes a fin de “embrujar” a las personas. La historia cuenta que la bruja más famosa fue Julia Hernández Pecho, quien gracias a sus brebajes espaciales curó del tartamudeo a un niño llamado Fernando León de Vivero, quien posteriormente fue congresista.