El verano es cada vez más intenso y sus altas temperaturas afectan no solo a la piel, sino también a todo nuestro organismo. Augusto Saldarriaga, médico internista de Clínica La Luz, advierte que estar expuestos a altas temperaturas puede ocasionar el llamado golpe de calor.
“Cuando una persona está sometida a un ambiente muy caluroso, que puede ser en la playa, caminando en la calle, dentro de la casa o en un sauna, y se deshidrata puede sufrir una pérdida de conciencia, ya que el cerebro no tiene la facultad de regular la temperatura corporal”, explica el médico.
Los principales grupos de riesgo para sufrir un golpe de calor son:
- Los niños y los lactantes.
- Adultos mayores.
- Personas con afecciones crónicas, como diabetes y enfermedad cardiovascular, cerebrovascular, respiratoria, renal o neurológica.
- Personas con sobrepeso u obesidad.
- Individuos convalecientes en cama.
Los síntomas generalmente son sensación de debilidad, dolor de cabeza y mareos, pérdida de conciencia, palpitaciones, sequedad y enrojecimiento de la piel, así como ausencia de sudor e hiperventilación.
SABÍAS QUE...
Si una persona sufre un golpe de calor, se recomienda mantener a la persona afectada tumbada en un cuarto oscuro y aplicarle paños húmedos sobre la piel.
+DATOS:
Como prevención es importante mantener hidratados a los ancianos y niños (darles de dos a dos litros y medio de agua).
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