Si tu hijo está enfermo y va a comenzar un tratamiento, evita que consuma medicinas que dejaste de usar meses atrás. Javier Jugo Rebaza, neumólogo pediatra del Centro Pediátrico Sunrise, afirma que, por ejemplo, los antibióticos deben tener como vida de uso no más de siete días porque pierden su efectividad e, incluso, pueden convertirse en un elemento tóxico, al igual que los jarabes. Por ello, el médico aconseja:
No le des a tu pequeño jarabes que hayan sido abiertos hace más de dos semanas, pues sus propiedades y acción farmacológica ya se habrán perdido e, incluso, pueden estar descompuestos. El producto suele cambiar de aroma y sabor.
Procura no dejar abiertos los medicamentos, porque se pierde la esterilidad del contenido y quedan expuestos a la contaminación. Esto es de mucho riesgo, sobre todo, con las gotas oftálmicas.
Ten claro que la fecha de caducidad de las medicinas es válida mientras estas se conserven cerradas. Si ya las has abierto, debes terminarlas y no guardarlas, creyendo que como no llega su fecha de expiración, puedes usarlas en cualquier otro momento.
Bota los frascos de antibióticos que tengan aún un poco del producto. No debes usarlos. El contenido sobrante no lo viertas por el desagüe porque contamina el ambiente y se convierte en un elemento tóxico.
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