Las infecciones de transmisión sexuales son infecciones que se contagian de una persona a otra usualmente durante el sexo vaginal, anal u oral. Son muy comunes y algunas de ellas son silenciosas, por ello, es importante acudir a su médico para hacerse los chequeos correspondientes para evitar problemas mayores.

La ginecóloga Giannina Arana de la Clínica San Juan Bautista nos explica sobre las enfermedades más comunes de transmisión sexual y las medidas de prevención que se debe tener en cuenta.

1. ¿Cuáles son las enfermedades de transmisión sexual más comunes?

Las enfermedades de transmisión sexual más comunes en nuestra población son clamidia, tricomona, sífilis, herpes, el papiloma virus humano y el VIH que se ha convertido en una nueva pandemia entre ambos sexos.

Debemos tener en cuenta que todas presentan diferentes síntomas y también pueden tener diferentes complicaciones, podría ir desde una infección vaginal hasta una inflamación pélvica severa que cause infertilidad a largo plazo. En el caso del VIH se convierte en una enfermedad sistémica, la cual puede ser transmitida a la pareja; mientras que el herpes es una enfermedad silenciosa y solo se agudiza cuando el estado inmunológico del paciente es deficiente.

2. ¿Cómo prevenir las enfermedades de transmisión sexual?

Para prevenir una enfermedad de transmisión sexual, lo más importante es el cuidado personal, evitar las parejas sexuales no conocidas, no estables o múltiples parejas sexuales.

Por otro lado, es importante el uso del preservativo al 100% en todas las actividades sexuales. Recordemos que el herpes también se puede trasmitir por el sexo oral, por ello siempre debe ser con protección y tener cuidados propios como la disciplina en la higiene y los controles ginecológicos por lo menos una vez al año.

3. ¿Cuáles son los síntomas de una enfermedad de transmisión sexual?

La sintomatología de las enfermedades de transmisión sexual es bastante variable, lo que es común entre todas las mencionadas es el flujo vaginal que se pueda tener, algunos pueden ser abundantes, otros pueden ser con muy mal olor, otros pueden causar dolor al miccionar o durante las relaciones sexuales, e incluso algunas pueden causar sangrado vaginal o simplemente no dar síntomas.

En el caso de la tricomona, el flujo es bastante peculiar porque el olor lleva a la paciente a buscar tratamiento y en el herpes en fase aguda, va a producir heridas úlceras en la parte de la vulva o en la misma vagina.

Por otro lado, en el papiloma virus humano o VPH, es más frecuente la presencia de un poco de flujo y verrugas externas que son de características benignas. Lo más grave que puede producir el VPH (tipo 16 y 18) es el cáncer de cuello uterino.

4. ¿Sirven las vacunas para el VPH?

Para el virus del papiloma humano ya existe una vacuna que se puede utilizar en niñas desde los 12 a 15 años que no hayan iniciado actividad sexual. En mujeres adultas que ya hayan iniciado la vida sexual, se pueden vacunar haciendo antes una prueba de detección de este virus.

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