Mantener el cortisol elevado por mucho tiempo favorece los antojos repetitivos. Foto: Freepik.
Mantener el cortisol elevado por mucho tiempo favorece los antojos repetitivos. Foto: Freepik.

Sentir un deseo desesperado por un caramelo o una gaseosa cuando estás con la soga al cuello no es debilidad, es una reacción biológica que te está jugando en contra. El estrés dispara una hormona que le pide a gritos a tu cuerpo energía rápida, y el azúcar es el atajo más tentador.

Mira también:

La Mg. Sarah Torres Obregón, docente de la carrera de Nutrición y Dietética de la USIL, explica que los productos azucarados activan el sistema de recompensa del cerebro, liberan dopamina y producen un bienestar momentáneo. Sin embargo, este efecto dura muy poco. Tras la subida abrupta de glucosa, el cuerpo libera insulina y se produce una caída brusca que genera mayor ansiedad, cansancio y el deseo de seguir consumiendo dulce.

Tres cosas que empeoran tus antojos y no lo sabes

La especialista comenta que hay factores diarios que hacen que tu necesidad de azúcar se dispare.

  • Dormir poco: No descansar bien sube la hormona del hambre (ghrelina) y el cortisol, haciendo que tu cerebro solo busque la energía más rápida: el azúcar.
  • Cansancio mental: Un cerebro agotado no tiene fuerza para elegir lo saludable. Solo busca placer inmediato, no soluciones a largo plazo.
  • Estrés por meses: Si el cortisol se mantiene alto por mucho tiempo, provoca antojos repetitivos y, de paso, te ayuda a acumular grasa en la barriga.

“Todo esto genera un círculo vicioso: más estrés, más antojos, más azúcar, más fatiga y más antojos”, señala Torres.

6 Trucos para calmar el antojo y el estrés

La clave está en darle a tu cuerpo lo que necesita de otra manera. La nutricionista Sarah Torres nos da estos tips fáciles de aplicar:

1. Que no falte tu proteína y fibra

Combina tus comidas para sentirte lleno por más tiempo. Esto estabiliza el azúcar en tu sangre.

  • Ejemplos: Fruta con yogurt descremado o ensalada de verduras con huevo sancochado.
El yogurt griego es una muy buena opción entre tus snacks.
El yogurt griego es una muy buena opción entre tus snacks.

2. Usa grasas inteligentes

Las grasas saludables te mantienen lleno y feliz. ¡No les tengas miedo!

  • Ejemplos: Palta, un puñado de frutos secos (nueces, pecanas) o aceite de oliva.

3. El poder del magnesio

El magnesio ayuda a mantener tu energía y a calmar ese estado de ánimo inestable.

  • Ejemplos: Cacao bitter, espinaca o pecanas.

4. Come cada 3 o 4 horas

Programa tus comidas. Elegir snacks saludables (frutas, nueces, yogurt) entre comidas evita que llegues a la siguiente comida con un hambre voraz.

5. Saca el dulce de tu vista

Lo que no se ve, no se antoja. Si no tienes caramelos ni galletas a la mano, es más difícil que caigas en el pico del antojo.

Nuestra mente siempre necesita un momento de silencio, respira profundo, tómate tu tiempo y empieza de nuevo. Foto: Freepik.
Nuestra mente siempre necesita un momento de silencio, respira profundo, tómate tu tiempo y empieza de nuevo. Foto: Freepik.

6. Respira o escribe

El estrés se maneja de forma activa, no escondiéndote en el dulce. Cuando sientas que te desesperas, haz una pausa: respira, estira tus músculos o escribe en un papel lo que te preocupa. Esto rompe el ciclo.

TAMBIÉN PUEDES LEER:

SOBRE EL AUTOR

Licenciada en Periodismo. Encargada de la página de Emprende Trome. Contenido de actualidad, salud y otros en Trome.com. Curso de herramientas digitales en el periodismo (U. Piura) Curso de Actualización de Gestión de Contenidos en la UCAL. Programa de Gestión para la Transformación (U. Pacífico)

Contenido sugerido

Contenido GEC