'El niño descalzo' es un cuento relata la historia de Pierre, un niño huérfano que vivía con su tía, una mujer muy egoísta y avara. Ella nunca le demostraba cariño. Ni siquiera lo felicitaba por su cumpleaños. El pequeño, sin embargo, tenía un corazón bondadoso. Su tía era tan tacaña, que desde hacía tiempo no le compraba zapatos. Pierre se hacía él mismo unos zuecos con un poco de madera.
El 24 de diciembre, el pequeño estaba muy nervioso, ya que sabía que esa noche vendría Papá Noel. Deseaba llegar rápido a su casa para dejar sus zuecos junto a la ventana. Sin embargo, al salir de la ‘Misa de Gallo’, Pierre vio a un niño muy pobre que tiritaba de frío en la vereda. No tenía zapatos y vestía de blanco. A Pierre le dio tanta pena que se quitó uno de sus zuecos y se lo ofreció.
Al regresar a casa, la tía de Pierre se enfureció al verle.
- ¡Ya has perdido uno de tus zuecos!- le gritó.
- Ahora querrás tallar otro con uno de mis troncos para la chimenea. ¡Me lo tendrás que pagar! Por malo, esta noche en lugar de Papá Noel, vendrá el ángel perverso y te traerá carbón.
Pierre se fue muy triste a su cama. Pero antes dejó el zueco que le quedaba junto a la chimenea.
Al día siguiente, Pierre se llevó una gran sorpresa. Se levantó muy temprano, porque apenas podía dormir, y junto a la chimenea descubrió todos los regalos que deseaba recibir: abrigos, ropa nueva, zapatos, cuadernos para el colegio y un juguete. Pierre fue corriendo a la ventana y al mirar al cielo, descubrió el trineo de Papá Noel que se alejaba. A su lado, viajaba un niño vestido de blanco. El niño al que le regaló su zueco. ¡Era el Niño Jesús!