La batalla de Huamachuco fue un enfrentamiento decisivo en la Guerra del Pacífico entre los ejércitos de Perú y Chile. Se libró en la pampa de Purrubamba, cerca del pueblo de Huamachuco, en el departamento de La Libertad, el 10 de julio de 1883, un día del que mañana se cumplen 142 años, y se caracterizó por una sangrienta lucha cuerpo a cuerpo a falta de municiones.
En esta batalla, 1600 soldados peruanos, comandados por el general Andrés Avelino Cáceres, se enfrentaron a 2000 hombres del ejército chileno dirigidos por el coronel Alejandro Gorostiaga. Fue un ataque sorpresa de las huestes peruanas, que al inicio fueron ganando terreno.
La victoria se decidía ya en favor de los patriotas, pese a la superioridad numérica del ejército enemigo, pero al quedarse sin municiones, la suerte se inclinó a favor de los invasores, que lograron reorganizarse y emprender el contraataque.
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Sin poder usar sus armas, los soldados peruanos se vieron obligados a combatir cuerpo a cuerpo y fue entonces cuando la lucha se tornó encarnizada.
Sin municiones y carentes de bayonetas, cuesta abajo, las heroicas tropas de Cáceres combatieron a culatazos y fueron aniquiladas.
Enemigos rematan a heridos en batalla de Huamachuco. Foto: archivo
Los chilenos triunfaron y mataron a heridos y prisioneros peruanos.
Así, Chile colocó en Lima a Miguel Iglesias como el presidente que el 20 de octubre de 1883 firmó el Tratado de Ancón, que cedió la provincia de Tarapacá a perpetuidad, y transitoriamente a Tacna y Arica.
DATITO:
El coronel Leoncio Prado quedó herido. El historiador Abelardo Gamarra confirmó que los chilenos hallaron a Prado el 14 de julio y lo asesinaron de un balazo en la mejilla a boca de jarro (‘La batalla de Huamachuco y sus desastres’). Los chilenos divulgaron la hoy desmentida versión de que fusilaron al héroe peruano en su cama cuando tomaba café y el comandante invasor Patricio Lynch reportó que se ‘suicidó’.
