Los sinónimos son palabras diferentes pero que tienen el mismo significado o uno muy parecido. Se utilizan para no repetir las palabras. Por ejemplo, si redactamos un texto con una misma palabra una y otra vez, su lectura será aburrida y redundante. Por suerte tenemos la opción de sustituir esas palabras por otras sinónimas, de manera que le aporten dinamismo y agilidad.
Las palabras que expresan ideas, sentimientos o conceptos abstractos suelen tener una gran cantidad de sinónimos. Es el caso del adjetivo bonito, que podemos sustituirlo por una larga lista de palabras con significado igual o parecido, como: Bello, precioso, hermoso, guapo, lindo...
Ejemplo: Tengo una joya muy bonita / Tengo una joya muy linda.
El término valiente se puede sustituir por: Valeroso, osado, audaz, atrevido, bravo, intrépido, aguerrido, decidido.
Ejemplo: Es tan valiente que no tiene miedo de los leones / Es tan audaz que no tiene miedo de los leones.
Existen diferentes clases de sinonimia:
Total:
Cuando dos términos son totalmente intercambiables en un mismo contexto. Por ejemplo: Marido y esposo.
Parcial:
Cuando dos términos se pueden intercambiar en determinados contextos, pero no en otros. Por ejemplo, pesado puede ser sinónimo de indigesto (Los pimientos son pesados) y de arduo (Es un trabajo pesado). Es decir, indigesto y pesado son sinónimos, pero no en todos los contextos (no podemos afirmar ‘es un trabajo indigesto’).