Un perro que se muestra obediente y sumiso solo contigo, mientras que a otras personas les gruñe y ladra, no es un can protector. Para el entrenador de perros, Ronald Custodio, esa conducta revela un comportamiento antisocial.
“Es el típico caso del perro que es mimado y tratado como ser humano por su dueño. El animal, entonces, percibe debilidad (no autoridad) en esa persona y asume que debe defenderla de extraños”, explica.
PAUTAS
Para que el animalito no convierta su conducta antisocial en agresiva, Custodio recomienda:
* Disminuir los engreimientos. No lo veas como un ser indefenso ni permitas que te vea como tal. Reserva las muestras de cariño cuando responda a tu llamado.
* Sacarlo a pasear sin postergaciones. Se acostumbrará a ver y oír a otros animales. Y llegará con menos energía a casa.
* Que camine a tu lado. No delante de ti porque si desea enfrentarse a otro can, él asumirá más valentía al saber que tú estás detrás.
* Darle de comer adecuadamente. Sírvele, haz que vea su plato y permite que se acerque cuando lo llames, no antes. Solo así te verá como el líder que cubre sus necesidades.
SABÍAS QUE: Los canes de raza pequeña (Chihuahuas y Schnauzers) adoptan conductas antisociales al tener dueños que los cargan como a bebés.