Los rayos solares ayudan a activar la vitamina D en la piel, necesaria para la absorción de calcio, entre otros beneficios. La exposición prolongada resulta sumamente peligrosa y, según José Arias Paz, docente de Dermatología de la Universidad Privada San Juan Bautista, podría generar quemaduras agudas, envejecimiento prematuro y cáncer a la piel, entre otros males.
El especialista refirió además que el tiempo permitido de exposición sin que este nos perjudique es solo entre 10 a 30 minutos por día. Asimismo, en la medida que la piel es más clara, el tiempo debe estar más cerca a los 10 minutos y no más. Hay que tener en cuenta que la ropa, las carpas y las sombrillas solo brindan protección en un 30%, por lo que no se debe exagerar cuando usamos ese tipo de prevención.
RECOMENDACIONES
• Usa la cantidad adecuada de protector solar, una persona adulta debe usar en promedio 4 cucharadas grandes de sopa en las partes del cuerpo expuestas al sol. Evita exponerte al sol entre las 10 a.m. a 4 p.m.
• Re-aplica el protector si has sudado o si te has mojado, como por ejemplo luego de entrar al mar o a la piscina.
• Usa ropa ni tan oscura ni tan clara. Los ideales son los tonos beige o plomo.
• Sé consciente de que puedes protegerte también de manera interna, consumiendo antioxidantes contenidos en la Vitamina E y en el Betacaroteno.
• Cuida tus ojos, ya que la córnea también se daña, se quema y podrías perder la vista. Usar gafas no es una moda sino una necesidad pero no cualquier lente, sino los que tienen protección UV.
• Los bloqueadores que verdaderamente nos protegen son todos aquellos que contienen Óxido de Zinc y Óxido de Titanio, pues son aquellos que proporcionan una foto protección reconocida por la Academia Americana de Dermatología.
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