La salud bucal es vital para nuestro organismo, ya que el estado de nuestra cavidad oral y las enfermedades del corazón están conectadas con la propagación de las bacterias y otros gérmenes, que van desde su boca a otras partes del cuerpo por el torrente sanguíneo. Y cuando estas llegan al corazón, se adhieren a cualquiera de sus áreas causando una inflamación severa.
Mañana se conmemora el Día Mundial del Corazón y los pacientes con hipertensión, con insuficiencia o arritmias cardiacas, endocarditis bacteriana, con marcapasos, que siguen tratamiento con medicamentos anticoagulantes, que presentan isquemia cardiaca o que hayan sufrido accidentes cerebrovascular deben tener especial cuidado con su salud oral, pues estas enfermedades son causa de muerte.
Jesús Ochoa, director de Multident indica que los microorganismos que habitan en la boca, que en muchos casos están presentes en la enfermedad periodontal, pasan a la sangre y la respuesta inflamatoria que se produce en el periodonto se extiende por todo el organismo provocando que se empeore la enfermedad cardiovascular.
Al respecto, estudios han demostrado que pacientes con periodontitis tienen un exceso de riesgo cardiovascular aterosclerótico, porque acumulan grasas, colesterol y otras sustancias en las paredes de las arterias.
En ese sentido, el especialista recomienda estar alertas con estas señales de advertencia en sus encías: por ejemplo, si están rojas, inflamadas y duelen al tacto, si sangran al comer, cepillarse o al usar hilo dental.
Asimismo, si hay mal aliento o mal sabor de boca frecuente, dientes flojos o sensación de separación entre ellos, si parecen estar retirándose de los dientes o si en signos de pus u otra infección o en sus dientes.
Existen algunas medidas para prevenir que nuestra salud dental perjudique nuestro corazón: cepillarse los dientes después de cada comida, o como mínimo dos veces al día, use hilo dental, un colutorio para eliminar bacterias que puedan producir placa, mantener una dieta equilibrada, no fumar, realizar de manera regular limpiezas dentales completas y visitar al dentista al menos una vez al año.
Seguir estas recomendaciones permitirán controlar algunos factores de riesgo que se relacionan directamente, por ejemplo, abandonar el tabaco, controlar la glucemia, mantener una dieta adecuada para un mejor control de la diabetes, estos aspectos también repercuten en una mejor salud bucal y cardiovascular.
Es importante conseguir eliminar la inflamación de las encías para proteger así la salud cardiaca. Entonces, cuidar de nuestra salud bucodental tendrá un efecto muy beneficioso a nivel cardiovascular.
“Si mantenemos nuestra higiene bucodental reducimos, la placa bacteriana en la cavidad oral, y eso implica reducir la inflamación de nuestras encías, y favorecerá a que haya una menor inflamación a nivel sistémico” indica el experto.
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