Habrás observado que, en castellano, nunca aparecen las sílabas ‘ze’ y ‘zi’. Es que estas combinaciones no son correctas. Por eso los plurales de palabras que terminan con ‘z’ se construyen agregando la sílaba ‘ces’, con ‘c’ al final. Por ejemplo: pez, peces.
Otra regla importante señala que se escribe con c delante de las vocales e, i. Por ejemplo: encima, cena, centrífuga, cine, cítrico, civil, cincuenta, ceja, cerrojo.
A excepción de las palabras zeta, zigzag, zipizape, hertziano, Ezequiel, enzima (cuando se refiere a un fermento o catalizador), nazi, Zenón, Zeus, zepelín.
Se utiliza la letra z delante de las vocales a, o, u. (Si se usa c tendríamos un sonido parecido al de la letra k: casa, come, cuello). Por ejemplo: zapato, zaperoco, zorro, zoológico, zurdo, zumbido.
Los verbos que terminan en zar cambian la letra z por la c antes de la letra e. Por ejemplo: cazar–cacé, organizar–organicemos, abrazar–abrácelo, empezar–empiece.
DATO
Hay palabras que se pueden escribir con ambas letras. Por ejemplo: cigoto o zigoto, zinc o cinc, zenit o cenit, eccema o eczema.