
El tiempo también pasa para nuestras mascotas y, aunque quisiéramos que siempre fueran cachorros, en un abrir y cerrar de ojos empezarán a mostrar señales de vejez que requieren atención.
El veterinario Carlos Becerra explica que el proceso de envejecimiento varía según el tamaño y la raza, pero hay signos comunes que no deben pasarse por alto. “Si notas que duerme mucho más, pierde apetito, camina más lento o evita jugar, es momento de llevarlo al médico”, señala.
Otros síntomas que pueden indicar vejez son la pérdida de visión, cambios en el pelaje, dificultades para subir escaleras y alteraciones en el comportamiento. “Muchos dueños piensan que es normal que el perro esté más cansado, pero detrás puede haber dolor articular o enfermedades crónicas”, advierte Becerra.

Para ayudar a tu compañero en esta etapa es clave mantener revisiones médicas frecuentes, ajustar la dieta a sus nuevas necesidades y proporcionarle ejercicio moderado. La idea no es exigirlo como antes, sino estimularlo de manera que conserve movilidad y buen ánimo.
Cuidar de un perro mayor implica observar con paciencia y adaptar sus rutinas. Al darle comodidad, atención y controles veterinarios, tu mascota podrá disfrutar una vejez más saludable y feliz.










