Preocupación constante. Foto: ¡Stock.
Preocupación constante. Foto: ¡Stock.

Sabes muy bien que la vida es hoy, tu presente, pero no puedes dejar ir tu pasado, ¿por qué? ¿Fuiste muy feliz y ahora ya no lo eres? ¿Sufriste maltrato, una pérdida, una dolorosa ruptura? ¿O cometiste muchos errores que hoy lamentas?

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Déjame decirte que todos en algún momento de nuestras vidas pasamos por situaciones que nos marcan, que se quedan ancladas en nuestra y en ocasiones (si no hacemos algo por liberarnos) se vuelven un obstáculo para continuar nuestro avance y desarrollo personal.

DÉJALO IR Y VIVE TU PRESENTE

No podemos cambiar el pasado, lo que sí podemos hacer y recomiendan expertos es reconciliarse con él. ¿Cómo? Aceptándolo.

Eso implica hacer las paces con lo que sucedió y dejar de batallar e intentar cambiarlo.

Quizá lo rescatable de todo esto sea el aprendizaje, recuerda que tu pasado te ha formado. Si hoy eres una mujer más madura, segura, fuerte y luchadora, es gracias a él.

Aprende a soltar. Foto: ¡Stock.
Aprende a soltar. Foto: ¡Stock.

Acepta tus emociones para sanar, si te dañaron, perdona y si hiciste daño, pide perdón.

Una estrategia para mirar el pasado, no con ojos de dolor y sufrimiento, es hablarlo con personas amigas. Eso resulta muy liberador.

En conclusión, mirar atrás no es malo, es saber que tenemos un camino recorrido y darnos cuenta de aquellas cosas negativas que debemos evitar, y las positivas que tenemos que valorar.

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