La leche materna es un alimento valioso para el bebé. Combina la mejor nutrición con anticuerpos, células vivas y otras sustancias que protegen a los bebés de las infecciones y les ayudan a crecer y desarrollarse. Por tal motivo, Yda Gamarra, ginecóloga y consultora de Lansinoh Perú, expertos en lactancia materna, nos explica 4 claves para la buena conservación del alimento:
Tipo de Envase: Una vez que te has extraído la leche, es importante determinar en qué envase se almacenará, usa envases estériles y que sean aptos para conservar productos alimenticios, ya sean de cristal o de plástico.
Tiempo de Almacenamiento: La leche materna fresca puede durar en el congelador (-18°C) aproximadamente 3 semanas y en el refrigerador unas 24 horas. Cuando la leche se descongela puede durar en el refrigerador un aproximado de 24 horas.
No calientes la leche en microondas: Nunca descongeles o calientes la leche materna en microondas ni tampoco en agua hirviendo, de este modo evitas la pérdida de vitaminas y minerales. Para conservar los componentes de la leche materna es recomendable colocar la bolsita de almacenamiento en agua templada (37°C como máximo).
Etiqueta tu envase: Ya sea si usas envases de cristal, plástico o bolsas de almacenamiento, asegúrate de etiquetar y anotar la fecha de almacenaje, para que recuerdes usar la leche con un mayor periodo de almacenamiento primero y usar las recientes para después.
Extracción: La extracción debe ser un proceso similar al de la lactancia. Puedes hacerlo con la mano o utilizar un extractor. Recuerda que la extracción repetida de leche materna ayuda en su producción, alivia la inflamación de las mamas y el bloqueo de conductos.
Si te interesó lo que acabas de leer, puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter y puedes suscribirte a nuestro newsletter.