Tras dos años estudiando en casa, miles de niños ya regresaron a las aulas para poder recibir educación de manera presencial. Sin embargo, con el regreso a clases también vuelven los problemas como el tan temido bullying.
Es importante identificar a todos los actores y reconocer los diferentes comportamientos que pueden ser considerados como bullying, que en casos muy extremos puede llevar hasta la muerte. Mararena Arribas, especialista en liderazgo de la educación e inteligencia emocional de la asociación MAB Perú, explicó, en una entrevista para el grupo El Comercio todos los detalles al respecto.
La especialista señaló que toda la comunidad escolar debe estar involucrada en resolver los problemas de bullying que se susciten. Por ejemplo, el docente tiene que estar presente para que intervenga y pare el acoso en clase o la institución educativa con el fin de que tenga una política de cómo actuar.
“El bullying también puede ser silencio y puede llegar a matar. No es ninguna broma, es muy serio. La persona que ha sufrido de bullying crece sin creer en sí misma, su seguridad está en el piso, su autoestima estará completamente golpeada. Esa persona se convertirá en un adulto inseguro, que no será feliz nunca”, explicó la especialista.
Mararena Arribas asegura que la resocialización está conectada con el bullying debido a que al volver a socializar esto trae consigo los problemas sociales.
Alertó a los profesores y padres de familia que una víctima de bullying puede ser cualquier tipo de niño un adolescente porque muchas veces la víctima no calza con las características de la persona sometida a este tipo de cruel castigo social.
“La víctima puede ser cualquier como el primer puesto del salón, la más bonita porque creen que estará con todos, la más gordita porque les parece fea. Los valores están tan patas arriba que cualquier persona puede ser víctima de bullying”, advirtió la especialista y puntualizó que esto sucede en lugares que no son suficientemente seguros.
“Esto pasa en colegios donde el enfoque está en el tema académico y el lado emocional no se cuida, donde los chicos y chicas no aprendieron a respetar. Yo puedo definir este problema por el entorno donde se desenvuelven los niños y adolescentes”, agregó.
La neuroeducadora aseguró que el agresor es una persona que no es muy segura de sí misma y saca todas sus inseguridades a través de la coraza de la “fuerza” y por eso ataca.
“El que ataca tiene un problema interno, hay algo no resuelto en su interior para atacar a otros y probablemente aprendió a actuar así. De repente viene de una cultura donde en la casa hay violencia, de alguna manera ha tenido que verlo en algún lugar”, señaló.
Mararena Arribas solicitó involucrar a los padres de familia para resolver este problema. “Es un trabajo integral entre los estudiantes, la escuela y los padres. Es importante hablarles a los papás para que identifiquen qué es bullying, fomenten el diálogo con sus hijos y estén atentos a los comportamientos de los chicos y enfrentar el tema”.
La especialista aconsejó que aun si tu hijo no es parte del problema igual debes poner tu grano de arena para solucionar el caso de bullying en el salón. “Desde tu sitio puedes generar un ambiente mucho más saludable en el salón, inculcar una cultura de comunidad”, mencionó.
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