Los minerales son esenciales para conservar la buena salud del organismo y para una gran cantidad de funciones del cuerpo como mantener los huesos, corazón y cerebro funcionando correctamente. Por eso, Sylvia Rodríguez, nutricionista del equipo Magnesol, explica a continuación cuáles son algunos de los principales minerales y sus beneficios para el buen funcionamiento del organismo:
Interviene en el funcionamiento muscular y nervioso, brinda soporte a un sistema inmunitario saludable y está relacionado con el ritmo cardiaco, beneficiando la salud ósea y colaborando en la obtención de energía. Los alimentos ricos en magnesio son las verduras de hoja verde oscura, bananas, damascos, palta, nueces, arvejas, semillas, tofu y granos integrales. Si no se obtiene la dosis requerida de este mineral a través de la ingesta de estos alimentos, se puede recurrir al consumo de algún suplemento.
Es un mineral fundamental para el funcionamiento normal de las defensas e interviene en la división y el crecimiento celular, además de la cicatrización de heridas. Ayuda al sistema inmunitario a combatir bacterias y virus que invaden al cuerpo y también está involucrado en la obtención de energía a partir de los carbohidratos. Se puede obtener a través de los alimentos como frejoles, frutos secos, cereales integrales o a través de un suplemento que contenga zinc dentro de sus componentes.
Colabora en la formación de dientes y huesos sanos. Niveles adecuados de calcio en el cuerpo durante el curso de la vida podrían ayudar a prevenir la osteoporosis. El calcio también interviene en la coagulación sanguínea, el mecanismo de contracción y relajación muscular y el mantenimiento de un ritmo del corazón. Se obtiene a través de alimentos como el edamame, col rizada, col china, ajonjolí, entre otros.
Este mineral trabaja dentro del organismo en forma conjunta con el hierro, ayudando al cuerpo en la formación de glóbulos rojos. También colabora en el desarrollo saludable de los vasos sanguíneos, los nervios, el sistema inmune y los huesos. Se obtiene a través de alimentos como granos enteros, legumbres, nueces, hojas verdes y frutas deshidratadas.
Ayuda a que los músculos y nervios funcionen correctamente, reduce el riesgo de problemas cardiovasculares y presión arterial alta, alivia la fatiga, la irritabilidad y la confusión. Las personas mayores pueden sufrir del exceso de este mineral, pues sus riñones pierden la capacidad de eliminarlo. Se obtiene a través de alimentos como el plátano, melón, kiwi, guayaba, entre otros.
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