Sales de la ducha y te das cuenta de que tienes el cabello lleno de nudos y enredado. Si crees que la única solución es tirar de él con el peine, bajo el riesgo de quebrarlo o cortarlo, te equivocas. Existen otros métodos para que desenredes tu pelo sin maltratarlo y, sobre todo, sin dolor.
El peine ideal. Usa uno con dientes muy espaciados y resistentes, porque los cepillos y peines delgados dañarán tu cabello y lo arrancarán por mechones.
Ayuda extra. Aplica una gota de acondicionador o de aceite de coco a un nudo difícil y frótalo con tu dedo. Esto ayudará a lubricar más esas hebras de cabello.
Las puntas primero. Para peinar el cabello enredado siempre comienza cerca de las puntas y cepilla hacia abajo. Repite hasta que esa sección no tenga enredos, luego mueve el peine un poco más arriba y repite hacia todo el largo de tu pelo.
Evita el dolor. Si tienes un cuero cabelludo sensible, sujeta una sección de tu cabello mientras lo cepillas, para evitar jalonearlo y causarte dolor. Además, tendrás mayor control.
Antes de terminar. Cambia a un peine o un cepillo de dientes finos para eliminar todos los nudos pequeños que puedan quedar.