
Xoana González calentó el podcast ‘Café con la Chévez’ y confesó que se considera una mujer tóxica con su esposo Javier y calificó como ‘muerto’ a su expareja Rodrigo Valle. Además, que el haber perdido el juicio con Melissa Loza la dejó misia.

¿Eres tóxica?, ¿celosa?
Yo quisiera no ser tóxica, pero no lo puedo evitar. No sé, Javier me cuenta algo de una chica y me pongo como una loca. Pero me encantaría poder extirpar eso de mi personalidad, pero soy celosa.
¿Qué ha sido lo más tóxico que le has hecho a Javier?
Lo he correteado por una playa con tabla de surf... ¿Qué más? ¿Qué cosa más tóxica he hecho? Imagínate que yo por seguir peleando me meto al mar y no sé nadar. Y total, estaba enganchada a la tabla. La toxicidad me dio fuerza para cruzarme todo el mar y seguir peleando. Ven acá, ven acá. Pero sí, eso me gusta como que discutir en el momento y cuando siento que tengo razón me gusta discutirlo muchas horas. Pero cuando no, le escapo a la pelea.
¿Pero le das la razón o no le das la razón?
Odio darle la razón, pero ¿qué voy a hacer, si siempre tiene razón? O sea, la verdad es que odio decir esto, pero siempre tiene razón. Y ya está. Se la va a tatuar. Sí, mi amor, siempre tienes razón…

¿Cuál fue el juicio por el que tuviste que indemnizar?
El de Melissa Loza. Ese lo pagué y aun así igual estuve un año y medio con lucro cesante, exiliada de mi trabajo, de mi vida acá. Pero traté de sacar lo bueno y estuve mucho tiempo con mi papá, le enseñé a manejar, le ayudé a que compre su auto, que ahora es mío, porque no le gustó nunca manejar, porque le enseñé yo. Pobre, lo traumé.
¿Cuánto tiempo estuviste?
Un año y medio estuve allá. A veces, la vida te pone en situaciones donde tienes que alejarte y te acomoda personas, situaciones y bienvenido sea. Gracias, Melissa…
¿Te afectó los bolsillos?
Sí, sí. Eso me dejó en cero. Aprendí, pero bueno…
¿Con quién no te tomarías un café?
Con gente de mi pasado, me parece. Creo que tampoco quisieran ellos tomarse un café conmigo. Creo que es mutuo, mira. Dejémoslo así…
Me acabo de acordar, hace poco tu exesposo salió a hablar…
Sí, qué estrés. Siempre se quiere colgar. Señor, está muerto, quédese en el piso. No se desentierre, señor. Él quiere opinar de algo. Y estaba enterrado.
Xoana, recuerdo que tú estabas con tus zapatillas en tu boda...
Sí, éramos dos niños. Creo que debería estar prohibido casarse antes de los treinta años para ahorrarte un divorcio.












