Susan León es la invitada de la semana en ‘Café con la Chevez’. La ‘bomba sexy’ de los 90 se confiesa y abre su corazón en una íntima entevista en la que hace un repaso completo a su carrera que inició cuando fue modelo de pasarela.
En la charla, Susan León también responde fuerte y claro sobre dos polémicos episodios de su vida: El caso Vaticano y su relación con Alberto Venero. El café está servido.
¿Cuántos años nos conocemos?
Creo que 30. La edad es un número, mientras te sientas vital, fuerte, radiante, yo creo que es secundario. Yo me siento mejor que antes, yo creo que uno tendrá más juventud, pero eres más tontita, ahora lo que tienes es sabiduría, experiencia, ahora puedes decir que no, decidir qué hacer.
Tú empezaste modelando y luego fuiste Miss Perú...
Yo he caminado por casi todos los rubros. De modelo a Miss, de Miss a animadora, de animadora a entrevistadora, de actriz a empresaria, de empresaria a productora. Luego a magister, de todo un poco pero eso es lo lindo, experimentar varias áreas haciendo lo que te gusta. Soy coach también.
¿Siempre quisiste ser figura de la televisión?
No, las cosas se fueron dando. Yo comencé viendo mis fotos y que me veía bien, creí que podía ser un negocio. Luego comencé a mirar y nunca pensé ser más Miss fotogénica de Miss Perú. Luego dije ‘oh, algo está pasando’. Nunca pensé irme a Tokio y quedar finalista ahí. Luego fui a otros concursos internacionales, luego modelé en EE.UU. Cuando regresé, nunca pensé que me iban a llamar para hacer Fantástico.
¿Qué edad tenías cuando fuiste Miss?
19 años y cuando comencé ‘Fantástico’, como 22 o 23. Luego me llamaron para hacer una ‘Noche con Susan’, tenía 26 años. Fue todo como muy rápido, fue muy rápido para mí. Me faltaba la mañosería para llevar un programa en una cama. Creo que ya no hay una sola mujer más sexy, en cambio en mi caso no había internet, habían calendarios, televisión. Había mucho peso atrás mío como figura pública, la gente me conocía mucho y no había mayor competencia. También trabajé mucho el personaje porque yo soy actriz. En el 2000, yo me aburrí y dije no, hay que destruir esto y hay que ser muy valiente para destruir lo que tú misma has construido. Es que cuando me llamaban a actuar, me llamaban para ser puta o amante y no. Te encasillan en un personaje y eso es un horror, los actores podemos hacer otras cosas, por eso siempre escojo el teatro, ahí me siento segura.
¿Eras muy ingenua?
Hasta hace poco. Cuando comencé a estudiar Kung fu y Tai-chi, aprendí a que parte de la vida es defenderse, yo no tenía eso claro.
¿La fama te trajo problemas en tu vida? ¿Qué pasó con Vaticano en Campanilla?
Nadie me dijo nada, no podía googlear. Me contrataron, pero la gente que había ido no me dijo nada, quizá no me quisieron decir. Yo fui porque había un contrato y había que cumplirlo.
¿Fuiste sola?
No, con un grupo, con las cuatro personas que también tuvieron problemas. No les gusta que los mencionen, algunos hasta se han cambiado el nombre. Fue una experiencia muy dura pero pasó algo maravilloso.
¿Qué pasó?
Me robaron una llanta de mi carro, me tocaron la puerta y me dijeron que tenían mi llanta, que habían atrapado al ladrón. Yo nunca había vuelto a ir a ningún lugar ni hacer ninguna declaración, después de ese episodio nunca más. Yo llego y sentí angustia porque esa parte de mi vida no la había sanado, mi relación con la dependencia policial. Entré y cómo es la vida, me encuentro a una chica y me dice ‘Hola Susan, yo he sido tu alumna’. La abracé y le pregunté que hacía ahí a las 11 de la noche. Era la hija del que me iba tomar la manifestación. La misma entidad que me llevó a esos lugares es la misma que me devolvió la llanta.
¿Cómo fueron esos cinco días?
Es duro, yo estaba muy chica. Cuando pasa eso, lo primero que pensé fue en el programa de TV, pensaba en que me lo iban a quitar y efectivamente pasó. Eso fue lo más duro porque lo demás va pasando con el tiempo.
Mucho se especulaba de lo que había pasado adentro, que te toquetearon, que te vejaron
Eso sí pasó. No fue que me toquetearon, me miraron, se aprovecharon, pero a esa gente la destituyeron. La gente se olvidó que yo soy un ser humano.
Cuando estuviste ahí ¿alguien te dio la mano?
Todos se portaron muy bien, tenía a la prensa ahí, pero me acuerdo que algunos periódicos o revistas me mandaban canastas, libros, siempre estuve acompañada, entonces descubrí que era una cortina de humo para desviar otras cosas. Fue injusto porque los artistas podemos ir a trabajar a lugares porque nos contratan y no necesariamente había un vínculo. En el libro de Renato Cisneros, donde hay un capítulo dedicado a mí, y decía que él se deslumbró conmigo, que era una mujer interesante, pero no es que me haya enamorado.
Hubo otra versión que te decía ‘Monita’
No. Sí hubieron llamadas telefónicas porque estaba medio enganchado, pero de ahí a que yo haya continuado esa relación... hubiera sido terrible para mí. Si yo hubiera continuado, hubiera quizá terminado presa. Pero en mi caso revisaron todo y se dieron cuenta que todo lo que tengo es de mi sudor. Yo nunca acepté que me den nada, soy una mujer muy trabajadora.
¿Cuando te enteras de quién era y cuál era su nombre?
Con el titular del periódico ‘Reina de belleza, estilista, cómico, vedette y animadora’. Yo no sabía que me iba generar lo que me generó. Yo fui a declarar en short, con mis lentes, no tenía nada que perder, ni siquiera tenía abogado, es que no había ningún problema, yo fui a trabajar y cobré por eso. Que me llamaron, tenía 5000 llamadas de personas que me querían enamorar, no había delito. La segunda vez que fui a declarar me puse un poco nerviosa. Las manifestaciones no coincidían y pasó lo que pasó, injustamente, pero ya lo perdoné.
Luego de eso ¿ya no hubo contacto?
No, para qué. Por ahí escuché que me pidió disculpas, mandó un emisario, creo que fue el mismo del libro que me dijo que él estaba muy apenado por todo lo que me pasó por haberlo conocido. Es una disculpa para nadie borra lo que pasó.
¿En Fantástico qué aprendiste?
La envidia. Aprendí que los 40 puntos de rating son muy fuertes, duelen en el alma y te sacan lágrimas. Estoy hablando de la primera etapa.
En esa etapa donde estabas sola, que eras la envidia ¿no había cariño y solidaridad de tus compañeros?
No, te decían ‘ojalá que se te caiga el moño, las pestañas, que te orines acá’. Es un decir, pero en todo se fijaban... era muy complicado. Pero pasó porque después nos hemos vuelto a encontrar y todo paz y amor porque ya no habían los 40 puntos.
¿Con Katia Balarín era la rivalidad?
Sí, claro. No voy a hablar más.
¿Era verdad de los 400 ternos de Rocky?
Sí, porque le regalaban un terno al día.
¿Y tu famosa foto de la rosita?
Fue una foto de amigos. Ahora es una foto tranquila, en IG o en Onlyfans ves cosas más fuertes. Para mí es una foto con arte. La revista se vendió en un día y medio. Yo la compré. Cuando la vi me asusté porque pensé que mi mamá me iba matar. Mi mamá ya la había comprado. Me dijo de todo, hasta me botó pero yo estaba más o menos preparada, ya tenía un departamento pero no me había atrevido a mudarme, además, estaba esperando amoblarla. Mi mamá me dijo ‘¡qué van a decir en la iglesia!’ y le dije ‘no importa, me voy’ y se molestó más cuando se enteró que tenía un departamento.
¿Ahora ya no la harías?
No sé, no me he puesto a pensar en repetir las estampitas que tengo de cada etapa de mi vida. Pero de esa foto salió el tema de los calendarios.
¿Cuántos hiciste?
Siete calendarios, que fueron en diferentes espacios, turístico, ecológico. A mi calendario la auspició el Instituto Nacional de Cultura y cerraron Machu Picchu para que yo haga las fotos. Pasaron cosas maravillosas. En este reloj de Machu Picchu, yo tenía el símbolo de la cruz y del sol en dorado, representaba como una diosa incaica. No quisieron que haga la foto porque el viento huracanado pasó y nunca salió la foto. La quisimos volver a hacer en otro espacio y no se podía por el clima. Luego investigué y descubrí que ese símbolo no quería ser fotografiado que fue por la religión, el sol de los incas y los españoles.
¿Y en el amor cómo te va?
Mis padres nunca estuvieron juntos, no tengo muy clara la imagen de pareja. Siempre he estado sola, feliz y tranquila, supe encaminar mi vida para enamorarme de mí. Todo el mundo me enamoraban, he tenido personas en mi vida, relaciones, he convivido, me han sacado la vuelta, quien no ha tenido cachos no ha vivido en esta vida. Es un dolor... pero nadie muere por amor, aunque está bastante cerca, el dolor es bien fuerte, sobre todo de la deslealtad, la traición. Pero luego que pasó lo de la muerte de mi mamá, dije que ningún dolor se compara.
¿Lo de la deslealtad lo dices por lo de Venero?
Es un tema que nosotros mantuvimos en secreto y deseo mantenerlo igual. Hubo traición, nada termina bien. No lo saludaría. El final no fue muy bueno, pero siempre recuerdo lo bueno, pero a las mujeres no se les hace lo que él me hizo.
¿Verte en ese video íntimo te hizo llorar?
Claro, si tú tienes un video y eres dueña de ese video y él también y si me copia no salió, tiene que salir la tuya. Es porque no la cuidaste, no la valoraste, para mí eso fue una sentencia de muerte, no tiene nombre, es una bajeza. Pero luego, entendí que fue ‘si no te puedo matar físicamente, te mato moralmente’. Yo he hecho todo lo posible para que la gente no lo recuerde, soy una magister, soy empresaria, soy una mujer completa. La vida tiene un montón de episodios y esos pocos feos son un pedacito nada más. Muchas mujeres se quedan en ese pedacito, se deprimen y crean enfermedades. Esos pedacitos chiquitos de tu vida tienes que tomarlos como aprendizaje, ver en qué te equivocaste.
Algunas mujeres perdonan, no sé si porque piensan que la otra persona va cambiar o por los hijos.
No, la gente no cambia si no quiere. La palabra es mejorar, pero mejorar es como el perdón, el perdón viene con el tiempo, con los años. Muchas mujeres usan de pretexto a los hijos, y dirán que qué puedo hablar si no soy madre, pero los hijos pueden vivir sin padre porque yo soy la que soy sin padre. Yo me amisté con mi papá y nos amistamos y nos adoramos. Si tus hijos vienen de un papá sacavueltero, qué educación le das. Siempre digo, pobres hijos, ellos pagan por los errores de los padres.
¿Tú eres súper amiga de Patricio? ¿nunca hubo nada?
No. Patricio me acompañaba a los eventos. Lo conozco desde Arena Hash, es que él es un gran conversador y yo también. Nosotros cuando nos juntamos, se nos va el mundo conversando. En el velorio de Pedro, no me dejaron entrar y me metí. Lo primero que hice fue agarrar a Patricio y le dije ‘qué bueno que (Pedro) ya no está’ y me dijo ‘Yo pienso igual’. También se lo dije a Cinthya, ‘Pedro se fue cuando tú te fuiste porque no te quería dejar con ese dolor’. Cinthya comenzaba a dar entrevistas, ya le estaba dejando su legado. Ya podía descansar porque ya había hecho su trabajo. Era un genio que también sufrió y creo que sufrió mucho más de lo que debía.
¿Fuiste a visitarlo en esta última etapa?
Quería quedarme con la imagen que yo tenía de Pedro pero sí escribía. Él quería ser perfeccionista pero no existe.
¿Es cierto ese mito de que escribió la canción Los globos del cielo inspirada en ti?
Por supuesto, no es un mito. Patricio es mi hermano pero Pedro es mi amigo y amigo de infancia. Estábamos en un avión para una gira, estábamos cansados, sentado lado a lado, conversando. Empieza a haber turbulencia, él tenía pánico a los aviones. No sé cómo voltea y me dice ‘oye, y a ti cómo te crecieron ¿no?, ¿cómo se siente tener todo eso ahí? Comenzamos a hablar del tema de las ‘boobies’, pero a profundidad. Él era muy creativo e hizo esa canción. No solo Pedro, Aldo Miyashiro también escribió una obra de teatro para mí... he sido musa inspiradora.
¿Tú conociste a los Arena Hash desde adolescentes?
Claro, cuando estábamos en el colegio, porque ellos tocaban en el María Reina y yo estaba en el Recoleta.
¿Con Christian no hubo feeling?
Era acomplejado por su tamaño, no se paraba derecho, era muy alto. Se jorobaba cuando tocaba el teclado. El sexy era Patricio, Pedro era tímido. Christian no sabía explotar su físico. Era guapo, peor no despertaba las pasiones en ese momento.
Cuando hacías ‘Una noche con Susan’... ¿alguno quiso sobrepasarse?
Sí. Lo que pasa es que en la cama les daban un traguito para que no estén nerviosos. Estar con una mujer en la cama y que la mujer esté en babydoll... ellos se olvidaban que había una cámara y se olvidaban que no era en serio. Era televisión y te permitía jugar.
¿Pensaban que era en serio?
Varios, un par de veces tuve que parar la grabación y mandarlos a tomar un café porque había sentido una cosa medio abultada, acalorados. Era incómodo porque las mujeres vamos a lo que vamos, yo tenía claro que estaba haciendo televisión, era un programa, pero los hombres pues...se olvidan que era un programa y bueno... se veían con ‘paraguay’. Yo pedía ‘corten’, me preguntaban si estaba todo bien. Les decía ‘ya vengo, denle un café a este hombre’. Me retiraba y luego regresaba y ya sentía que estaba más tranquilo.
¿Por qué no salió el programa de Chirinos (Soto)?
Por su hija, su hija no quiso. Fueron al canal y armaron el verdadero bochinche. Fue duro porque yo ya tenía el programa, había salido lindo, hasta romántico, es que era poeta. El programa estaba redondo y yo quise oponerme a que lo dejaran. Me llamó el gerente general a decirme que el programa no salía. A mí me costó y me dio cólera porque era un programa lindo, todo estaba perfecto y por una decisión de alguien, no quisieron. La hija nunca habló conmigo, solo con los gerentes y nadie quería tener problemas con el Estado, menos un canal. El programa funcionó
Era divertido...
Tenía 26 puntos de rating, fue concebido con ‘La cama de Moria’ y un programa español con una tina, fue una fusión de esos dos.
¿Entrevistaste a presidentes?
A alcaldes, a Andrade, congresistas, artistas y Pedro (Suárez Vértiz). Todos muy divertidos.
¿A ti alguna vez te relacionaron con un expresidente?
No, con presidentes no. La política me interesa, pero hay precios bien duro que hay que pagar. La presión e intereses son tan fuertes, que solo te quedas con las ganas de hacer. El sistema es corrupto. La ambición es un precio duro que pagar. La gente que hace política debería ser gente con mucho dinero, que quiera ayudar y no enriquecerse. Para que tener tanta plata si no te la puedes gastar en una vida.
¿Hay amigos en el mundo de la TV?
Sí, tal vez es difíciles hacerlos en el momento, peor si los conociste en otro espacio y han coincidido, sí. Patricio, Nina Mutal, Arturo Pomar y Ernesto Pimentel.
¿Con quien no trabajarías?
No existe nadie con quien no trabajaría.
¿Alguna locura de amor que hayas hecho?
He cocinado, con mis propias manos.
¿Con quien harías una escena de amor?
Ricardo Arjona.
¿De qué te arrepientes?
De nada. Viviría frustrada y eso no puede ser.
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