Una casa de grabación es como un mundo paralelo al que vivimos. Solo los actores, en plena filmación, pueden hablar. Todos los visitantes deben guardar silencio. Es mediodía en uno de los hogares donde se escenifica la telenovela ‘Perdóname’ y los pasillos están llenos, el comedor también. Una chica sexi e interesada llamada ‘Leslie’ nos mira. A los minutos sale, se cambia de ropa y se convierte en Raysa Ortiz, una actriz con mucho talento que no necesita de un libreto para responder nuestro cuestionario.
Raysa, ¿definición de una infiel?
Una descarada.
¿Quién es una ‘interesada’?
Alguien que piensa que el dinero es lo más importante.
¿No es así?
Tener plata no te hace feliz.
¿Un ejemplo?
Si hubiera pensado primero en saber cuánto voy a ganar, de pronto hubiera elegido otra carrera.
¿Cuál es el poder de una mujer?
Hacerse respetar.
¿Un ejemplo?
Jamás estar con alguien que no quieres.
¿Qué es ser feliz?
Tener salud y compartir con la persona que amas.
Para algunos es comer bien, ¿cocinas?
Tengo buena sazón.
¿Platos que mejor preparas?
Tallarines, estofado y seco.
¿Secretito para el primer platillo?
Nunca debe faltar el hongo y laurel, el tuco es indispensable.
¿Para el segundo?
El aderezo y luego el pollo. Una vez que está bien cocido, meto la papa, porque me gusta jugosita a la hora de comer.
Tu hermana gemela Sirena estuvo en el ‘El gran chef: famosos’, ¿la ayudaste?
Claro que sí y algunos creen que yo me hice pasar por ella, no podía porque ya estaba grabando la telenovela.
¿La suplantaste en el colegio?
Ella dio una prueba por mí. Si no aprobaba repetía de año y menos mal lo hizo muy bien. Así pude estudiar en el siguiente grado.
Otro hecho singular en tu vida es que tu pareja también es actor...
Es una hermosa locura.
¿Te ayuda?
Repasamos los textos juntos, ensayamos escenas.
¿La más grande anécdota trabajando?
Una mañana discutimos en casa y fuimos a grabar casi sin hablarnos.
Qué pasó después...
Llegamos al estudio y teníamos que hacer una escena linda, romántica, con besos y todo salió muy bien, fluyó y nos reconciliamos.
¿Te ha tocado golpearlo en alguna película?
Sí, se me fue la mano y le solté una cachetada que le dejé la cara roja je, je.
¿Te cuesta llorar en la ficción?
Necesitas mucha concentración.
¿Alguna técnica?
Uno debe meterse en el personaje y su historia, pero corres el riesgo de cargarte siempre esos problemas.
¿Y pensar en algún momento duro que viviste y así generar lágrimas?
Sirve, porque lloras un montón, aunque después puedes olvidarte la letra.
¿La actuación es una carrera inestable?
Uno nunca sabe qué va a pasar después.
¿Por qué?
Hoy te contratan y no sabes cuántos meses más van a pasar para que vuelvas a tener trabajo.
La solución es...
Ser organizado y ahorrativo.
¿Qué es ser actriz?
Meterme en varios personajes y cargar la historia de otros.
¿Lo haces de lleno?
He llevado un curso que no solo es representar a una persona, sino meterme en su vida, seguirlo, ver lo que hace y le gusta. Eso lo hacen actores destacados del extranjero.
También cantas...
Sí, he estrenado mi video ‘Mi pendiente’.
¿A lo ‘Bichota’?
Lo mío es medio pop, pero ya que la nombras te puedo decir que Karol G es una mujer muy sabia.
¿Lo sientes así?
Sí, además transmite mucha buena vibra.
Ves al novio de tu amiga con otra chica, ¿le llamas la atención o lo grabas y le mandas a tu amiga?
Me la pones difícil, creo que me pasaría de frente.
¿Cómo se delata un infiel?
Su comportamiento cambia. Eso es lo más notorio.
¿Vives pegada al celular?
No lo tengo todo el tiempo, solo por temas de trabajo o leer mis textos.
¿Se gana más como influencer o actriz?
Se puede ganar bien de ambas formas.
Gracias a nombre de los lectores de ‘Trome’...
Creo que ustedes tienen un diario directo, de lenguaje sencillo y entretenido. Cuando estás desayunando o cenando, tienes el periódico y es súper divertido. A ustedes un fuerte abrazo.
La chica de las mil facetas disfruta este momento trabajando, haciendo lo que más le gusta. Asume que al talento se le suma muchas más cosas, si no se condenaría a quedar en una promesa y nunca en realidad. Como diría el gran Mahatma Gandhi: ‘La satisfacción radica en el esfuerzo, no en el logro. El esfuerzo total es una victoria completa’.
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