La vida es una sorpresa cada día. Este hombre estuvo cerca de la farándula peruana, de los más pintados del humor, se instaló entre ellos, pero no se quedó. Cuenta la historia que Manolo Mostaceros trabajó al lado de Román Gámez, el tío ‘Ronco’, caminaron juntos, lo acompañó en los programas que la televisión peruana y la radio, fue su mano derecha, pero un día se fue, de la manera menos esperada y se reinventó. Hoy lo recuerda con cariño.
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Manolo, ¿Cómo llegas a trabajar con Román Gámez?
Antes de empezar con el tío ‘Ronco’, trabajé en el Congreso.
¿Qué hacías allí?
Era arquero y jugaba en la Liga mayor. El equipo de la entidad del estado necesitaba uno que se cuadre bajo los tres palos y me presenté.
¿Te contrataron al toque?
El entrenador era don Cornelio Heredia, legendario jugador peruano. Me aceptó y nos fuimos a jugar a Cañete.
¿Cómo te fue?
Me lucí y cuando regresamos a Lima, nos llamaron para premiarnos y pidieron que me quede y por eso me contrataron como conserje.
¿Luego qué siguió?
Trabajé en la oficina de Luis Alberto Sánchez, también con Enrique Bernales, pero…
¿Pasó algo?
Alberto Fujimori cerró todo y me quedé sin trabajo. Un amigo me consiguió para ser guardaespaldas de un candidato a la Municipalidad de Chorrillos, que finalmente ganó.
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Me hice su relacionista público y fuimos a Radiomar, que está en el distrito, para que nos apoyen con un evento que organizaba el burgomaestre y conocí al ‘Tío Ronco’.
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¿Qué te dijo?
En ese momento nada, pero cuando llegó el día del espectáculo, me puse a animar con él y me invitó a que vaya al programa que se iba a relanzar.
¿Ya tenías experiencia?
Es que hacía periodismo en el programa ‘Impacto deportivo’ y tenía cierta experiencia.
¿Cómo sigue todo?
Me propone participar en sus famosas radionovelas.
¿Aceptaste?
Claro y tenía que hacer tres personajes a la vez.
¿Cuáles?
Así me convertí en el ‘Negrito Betún’, el abuelito ‘Cornelio’ y un chico gay que lo ‘bauticé’ como ‘Delio’, en homenaje a mi mamita que se llamó Delia.
¿Preparaban los guiones?
Para nada, el ‘Tío’ llegaba, empezaba a hablar y decía: De pronto apareció ‘Betún’ y tenía que improvisar.
Eso era propio de un genio
Era un gran imitador, cantaba muy bien. Era increíble.
Esa fue una gran época de Radiomar AM
Nos hicimos famosos, fue un boom. Regalábamos todos los días canastas, barrilazos y siempre eran víveres.
¿Ganabas buen billete?
Me pagaban con esos premios que le daban a la gente.
¿Siempre fue así?
Después cambió todo. Me acerqué más al ‘Tío’ y caminaba con él. Desde ese momento yo veía sus contratos y ganaba el diez por ciento de lo que ingresaba.
¿Tan fuerte fue su relación?
Él subía a animar y luego seguía yo. Me presentaba diciendo: ‘Es mi sucesor’.
¿Y entonces?
Fuimos a Panamericana televisión a presentar el programa ‘Ronco de noche’ y todo lo que decía frente a cámara era lo que yo escribía.
Eran grandes amigos
Caminábamos juntos, conocía a su familia. Conseguí el contrato para que trabajé en el programa ‘Risas y Salsa’ y le dieron un auto nuevo y diez mil soles mensuales. Es decir, como dos mil quinientos por programa.
¿Y dejaste la animación?
Empecé a organizar eventos y sentí que eso le incomodó a Román Gámez.
¿Te dijo algo?
Jamás.
¿Cómo se rompió todo?
Él siempre maltrataba a la gente que estaba cerca, les mentaba la madre, pero conmigo siempre era respetuoso, pero una noche lo encontré ‘cruzado’.
¿Qué te dijo?
Estaba escribiendo lo que debía decir y me gritó: ‘¿Hasta qué hora te voy a esperar c.. de tu madre’?
¿Respondiste?
Le aclaré que conmigo no puede hablar así y lo mandé bien lejos. Tiré todo y me fui.
¿Te buscó?
Después de tiempo, pero yo quedé desocupado y olvidé la farándula y tuve que reinventarme.
¿Qué hiciste?
Primero sabía que tenía manejo de escenario, vocalización porque había seguido talleres de actuación.
¿En qué empleaste todo eso?
Asumí vender motos y como tenía capacidad de actuar, rápidamente me hice de clientes. Me hice jefe de grupo, luego dirigí una tienda y luego gerente.
¿Algo más?
Soy coach y hasta he inventado una clase de media hora: ‘Sabor’
¿Eso qué significa?
Es lo que busca toda persona cuando ingresa a un local comercial.
Explica por favor
Cada palabra tiene un significado: S de seguridad, A de amabilidad, B de beneficio, O de orientación y R de recordación.
Entonces, estás encaminado y en otra ruta
Pero siempre seré agradecido a quien me ayudó y me dio la mano.
