
A esta entrevista vamos a ponerle una canción de fondo. Será el ‘Triste’, el emblemático tema del maestro José José, aunque Gonzalo Torres, el personaje con el que conversamos, la haga entretenida, divertida y reflexiva. ‘Gonzalete’, como está instalado en el imaginario popular, pese a los miles de personajes que ha representado y los trabajos realizados, ha llegado con puntualidad inglesa a la cita y con un polo contestatario está frente a nosotros con buen humor y buena disposición.
Gonzalo, empecemos por esa identificación con el Callao...
No soy chalaco, mi familia sí.
¿De dónde son ellos?
Mi madre de La Punta y mi padre del centro del puerto.
¿Naciste frente al mar?
Mis hermanos, soy el menor y nací cuando nos habíamos mudado.
¿Has vivido de la cultura porteña?
Sí, pero no tanto como quisiera.
¿Y el hinchaje por Sport Boys?
Estudié en el colegio Markham, de clase alta, y donde todos eran de la ‘U’ o Alianza, y yo, por dar la contra y por el cariño que mi familia le tenía al club, dije que soy ‘rosado’.
¿Te daba ‘achoramiento’?
Sí, aunque con esta carita, no creo que funcionara tanto.
¿Qué tanto quieres a tu equipo?
Después de frecuentar el estadio, ir a varios partidos, fortalecí mi espíritu de hincha.

¿Entonces?
Pertenezco a un grupo que aportamos con entradas a quienes desean ir y no pueden por el tema económico.
¿Qué te dio la rosada?
Me enseñó la resiliencia.
¿Juegas?
Sí, en las casas de apuesta.
¿Tan malo?
Era el último que escogían cuando íbamos a jugar fulbito.
¿Salsa que no puedes dejar de bailar?
‘Idilio’ de Willy Colón o ‘Catalina del mar’ de Joe Arroyo.
¿Un tema rockero?
‘Ace of Spades’ de Motörhead.
¿Balada?
‘El triste’ de José José.

Gonzalo Torres y el teatro
Vamos a tu arte, ¿una cábala antes de iniciar función en el teatro?
Siempre voy al baño, así solo bote una gotita.
¿Y desde cuándo esa costumbre?
No lo sé, seguro tiene que ver con el nerviosismo que se siente antes de entrar.
¿Te gusta mirar si hay buena cantidad de público?
Sí, pero hay compañeros que no.
¿Se suspendió algún espectáculo por falta de espectadores?
Cuando la gente es menos de la mitad de los actores de la obra, no se hace y eso ha ocurrido algunas veces.
¿Qué se piensa?
¡En qué maldito momento me volví actor!
Pero también ser exitoso como tú, te puede llenar de vanidad.
Mira mi ‘caramelo’, ¿crees que pueda ser vanidoso?
¿Es bueno leer para ser artista?
Hay algunos que no leen mi mier... Y son muy buenos.
¿Todos son extrovertidos?
No, la actuación los hace dejar de lado esa timidez.
¿Cultivas la humildad?
Te hace pisar tierra y ese es el lugar más fijo, por más que se mueva.
Pero hablo del ego al mirarte al espejo y sentirte ganador.
Si fuera así, hace tiempo me hubiera operado la ‘ñanga’, ja, ja.
¿Lo has evaluado?
No, porque es mi gancho.
Tu peinado es de un digno exponente del rock...
Cuando empecé a enamorar a mi esposa, hace más de 30 años, ella le decía a su amiga: ‘Estoy saliendo con un chico igualito a John Lennon’.

La relación con su esposa
Tres décadas junto a una misma mujer es un acto de resistencia y amor...
La vida va a tanta velocidad que estamos acostumbrados a tirar la toalla muy rápido.
Creo que amas al Boys como a tu señora.
Quieres poner ese titular y mañana me matan, ja, ja.
Una frase final para definir tu relación...
Es una bendición estar con quien somos uno.
¿Te molesta que te sigan llamando ‘Gonzalete’?
Antes, porque quería desprenderme del personaje.
¿Ahora?
No puedo dejar de serlo, ‘él’ tiene los mismos gestos y movimientos que yo.
¿Conclusión?
Que hicimos cosas buenas y por eso me recuerdan de esa manera, a mí me llena de orgullo.
¿Qué significó llevar la nariz roja por tantos años?
Es un elemento físico que nos permitió tocar asuntos que nos parecían criticables. Como hablar de Alberto Fujimori o Vladimiro Montesinos.
Un gran abrazo.
Gracias a ustedes por esta buena conversación.
Caminamos por los pasillos de la casa donde nos recibió, posó sin apuros. Cuando se sacó la chompa y quedó en un polo negro, leí una frase estampada a la altura del pecho y que me sirve para despedir esta entrevista: ‘Soy de PM’, decía el escrito y este periodista lo certifica. Este señor y gran actor es un buen tipo.
Con una sonrisa se puede cambiar nubarrones por cielo despejado y por el arte puedes ver el mundo diferente. Gonzalo Torres ha hecho de su vocación y conocimiento su mejor vehículo para ir por la vida haciendo lo que más le gusta entre la actuación, el aprendizaje y algún gol.












