Dilbert Aguilar y Claudia Portocarrero se encontraron cara a cara en una entrevista para el canal de YouTube de Fabián Tejada. Ambos se sinceraron sobre el largo romance que vivieron y contaron su experiencia sobre cómo afrontar la ruptura, pese a que se seguían amando. El cantante señaló que todo fue producto de la monotonía que cayeron por el trabajo.
“Tantos años y nunca habíamos hablado de esto. Es una gran persona, una gran madre, mi amiga, mi familia, no solo ella, sino su familia entera, tenemos un gran cariño”, inició diciendo Dilbert, quien no dudó en llenar de elogios a su expareja.
Por su lado, Claudia reconoció que después de la separación fortaleció el vínculo con Dilbert Aguilar. Según explicó, ahora su hija tiene una bonita amistad con la pequeña del cumbiambero. Incluso, reveló que está a punto de casarse.
“Soy mamá de una niña de 7 años, es pinky de la hija de Dilbert. Compartimos en lo que se puede, el papá de mi hija es de Holanda, me voy a casar pronto. Nos casamos en diciembre, estoy muy feliz de vivir y disfrutar al máximo (...) Nuestro rompimiento en lugar de separarnos nos ha unido más como familia”, contó.
¿CÓMO FUE LA RUPTURA ENTRE DILBERT Y CLAUDIA?
Al ser consultado por las razones de su ruptura y cómo superaron su separación, Dilbert Aguilar y Claudia Portocarrero coincidieron que el trabajo acabó con ellos, a tal punto de cansarlos y aburrirlos, pese al amor que tenían.
“Para mí fue difícil. La convivencia es la costumbre, es fuerte. Hemos luchado por volver muchas veces. Los primeros años, volvíamos un mes, dos meses. Decíamos: ‘¿Qué nos pasó si nos amábamos?’ (...) Fuimos decayendo, era una relación de trabajo que de pareja, estábamos desgastados. Era aburrido verla todos los días, más parecía jefe/empleado o viceversa. Quizás por eso terminamos bonito, no peleando, la ruptura fue el desgaste”, admitió Dilbert.
“Llorábamos juntos, era fuerte, superfuerte. Dos años que eran seguidos, de ‘Dilbert, no me siento a gusto, ¿qué hago?’; y Dilbert: ‘Negra, podemos intentarlo’; y después: ‘Debemos separarnos’. Viene la familia y decían deben estar juntos. Eran dos años duros que nuestra preocupación eran nuestras familias”, contó Claudia.