Carlos Vílchez: Sus ‘diabluras’ de niño, La Carlota, Jorge Benavides, el ampay de Magaly y más

‘Café con la Chevez’ está de aniversario. Para el festejar el primer año de nuestro podcast, invitamos a Carlos Vílchez, el popular humorista y conductor de ‘Mande quien mande’, para que nos cuente sus más divertidas anécdotas.

En la charla, Vílchez recuerda cómo fue su traviesa infancia en el jirón Ica y cómo fueron sus inicios en la TV. Además, habla de su amistad con Jorge y Alfredo Benavides.

finalmente, recuerda cómo fue que nació su popular personaje de la Carlota y menciona sus experiencias trabajando al lado de María Pía Copello y Laura Huarcayo. ¡El café está servido!

Cuéntame de tu nuevo programa...

Tres generaciones, mi hijo Giancarlo, mi madre y quien te habla. Acá es más que un podcast es en realidad parece un reality, no hay filtro, son nuestras vidas. Yo he sido la verdadera rata, muca.

Tu mamá te cuadra...

Sí, qué le puedes decir a tu mamá, acaba de cumplir 83 años, es una bendición. Uno siempre dice, ‘quiero que mi madre sea eterna’, pero la eternidad no existe, además tiene que descansar, mi mamá se ha sacada la mugre

Tú eres el cuarto de siete

Sí, ahora somos seis. Mi hermano el mayor falleció y yo quedé como el único varón de la familia, con cinco hermanas mujeres. Nunca aprendí a cocinar. Eran otras épocas donde había que atender al hombre, al hermano. Me hicieron daño porque nunca aprendí a cocinar. Sé freír un huevo, un pedazo de carne, pero no sé hacer arroz, no tengo ni la menor idea, sé que se echa ajo, cebolla... No sé hacer nada, pero sé lavar.

¿Qué sabes hacer?

Sé planchar espectacular, me fascina planchar. Plancho a la antigua, sé lavar platos, sé ayudar en los quehaceres del hogar pero no sé cocinar, eso me faltó. Es delivery o Melba (su novia) cocina pero yo le doy de comer a mi perro, mi perhijo, un pastor alemán inmenso, tiene 9 años. Sé hacer todas las cosas de la casa, pero no cocinar, me hicieron ese daño, siempre se lo dije a mi mamá. Mi hermano el mayor sí cocinaba pero como yo era el del medio, era el más engreído.

Has sido bravo en tu niñez...

Sí. Una vez me fueron a buscar hasta la morgue prácticamente, me tiré una desaparecida de día y medio. Ya no vivía con mi mamá, tenía 18 años, yo me fui de la casa a los 17, había nacido mi Carla, mi hija. Hice la del cojudo, que como crees que ya tienes un hijo tienes que irte a vivir con la persona, no es así, ya después me di cuenta de grande. En el momento, sientes que es tu mujer y tu esposa sin haberte casado, tienes una responsabilidad, siempre he sido responsable, eso sí me enseñaron en mi casa, la responsabilidad y la disciplina. Me fui a unos tragos con unos amigos y me perdí. Yo he chupado dos días sin parar y después me iba a chambear enterito. A los 22 o 23 fui administrador de un nigth club, no tenía ni tufo ni resaca, ahora me tomo media chela y me muero. Mi mamá me buscó y no me encontró nunca, se desesperó y fue a las comisarías, yo estaba en un chuculún más rico. Siempre he sido travieso. Mi primera enamorada la tuve a los 7 años, jugaba a la mamá y al papá o a la enfermera con el doctor, tenías que ponerle inyección a la enfermera, ahí aprendí a poner inyecciones.

¿Tenías varias enamoradas a la vez?

Unas cuatro al mismo tiempo. De chibolo te das tu tiempo, nunca fui vago, ya estaba en el teatro a los 16 años, era chambero. He hecho la del edificio. 2, 3, 4 y 5, no se conocían, era chibolo. Ya de grande no se puede, no es lo mismo, ya estás pidiendo descanso al primero. Yo jugaba fútbol todo el día, ahora juego los martes y los jueves, tengo el privilegio de jugar con mi hijo, desde que tenía 14 años y ahora tiene 24. Jugaba dos o tres partidos, me iban a buscar a las 2 de la mañana, yo soy de jirón Ica, salía calladito pero luego salía tu mamá a sacarte la mier... pero te dabas el lujo de jugar tu pelota.

¿Te daban con el san Martín?

Mi mamá me daba con San Martín, llegaba un momento en el que mi mamá se loqueaba conmigo y ya no me pegaba normal, me pegaba diferente, me decía ‘calatéate...’. Yo babeaba de los nervios, me metía a la ducha y ahí me daba, yo me sentía como un esclavo. Yo tengo que reconocer que sí jodía, yo paraba en la comisaría.

¿Te sacaban de la comisaría?

Mi mamá me ha ido a sacar varias veces, una vez me sacó con vergüenza. Yo, pechugón, estaba esperando a mi mamá porque no me podían meter preso porque era menor de edad, me había trompeado en el barrio. Yo de chibolo me había afeitado porque veía que mi papá se afeitaba, a los 15 ya tenía mi mostacho, pensaban que era enano porque era chato, no creían que era menor de edad. Yo andaba con mi partida de nacimiento porque era la época de la ‘leva’. Enseñaba y se daban cuenta que sí era menor de edad, yo esperaba a mi mamita.

¿Qué pasó?

Llegó mi mamá y preguntó qué había hecho y le dijeron ‘este chiquito ya es conocido, para rompiendo vidrios acá en el barrio, tiene que cuidarlo’ y mi mamá le dijo ‘yo cuido mucho a mi hijo, usted no se meta con mi vida, yo sé lo que hago con mis hijos’. Ya me acordé, le había roto los galones al policía, eso no se podía ni tocar. El policía mandó a mi mamá a que cociera la casaca. Mi mamá estaba cociendo y me dijo ‘ya no sé qué hacer contigo’. Por mi culpa un día lo metieron preso a mi hermano, él era tranquilazo, no tomaba, no fumaba, era sanazo. Yo era la oveja, así me decía mi mamá, me mentaba hasta la madre, me da pena acordarme, me da ganas de llorar. No puede ser que un día tu mamá te encuentre rompiendo la puerta de tu casa, yo tendría 10 años, mi hermana 13 y era la encargada de la casa. Me decían que no salga, que tenía que hacer la tarea, pero a veces no la hacía para salir a jugar. Le metí una mecida a mi hermana y se da cuenta que no había hecho la tarea, mi hermana viene y me jala de la patilla y yo con mis rulitos... la quise agarrar a patadas, se encerró en la casa y yo más picón, quise romper la puerta, pateando la puerta, esas puertas gruesotas, la rompí y mi mamá estaba atrás mío, vi al diablo calato, fue la vez que tuve más miedo en mi vida, ahí sí hice la de Rambo, me fui solito, me pegaron duro. Mi mamá me dijo que me iba quedar como wachimán porque había roto la puerta de tantos patadones.

¿Ahora ya estás más tranquilo?

Tengo 56, 57 cumplo en diciembre. Soy Sagitario, dicen que es peor signo de todos, yo no creo, pero así dicen. Dicen que los sagitarios son rebeldes y mujeriegos. A mí en mi barrio me decían Pioner, alta fidelidad. La gente dice que yo he sido mujeriego, la gente se confunde, mujeriego es el hombre que ha tenido muchas mujeres, no dice sacavueltero. Yo no he sido tramposo, he sido mujeriego, he tenido varias mujeres en mi vida, he salido con muchísimas personas, cada una en su época.

¿Has tenido tres canales al mismo tiempo ya maduro?

No, no me acuerdo. Yo no he sido discotequero, yo he sido dueño de un nigthclub, el Eros, y he sido administrador cuando tenía 17 hasta los 20. De grande ya he sido más pensante. He ido a la Máquina del Sabor en La Herradura, ahí en la misma playa, mi potito con arena, no molesta. En ese puente he hecho cochinadas. A mí esas épocas del terrorismo me convenía, cada apagón era un chuculún, un rapidín como cuy. No hay nada más chévere que un apuradito, ese me sale bien, lo entregas todo, es como una aventura, en la escalera de la unidad vecinal.

¿En un canal de TV lo has hecho?

Nunca diré en qué canal. En las butacas también y pelancho. Hacerlo en el cine es súper chévere, en el tren también es paja. No me hagas acordar esas cochinadas. Son vivencias, muchas personas dicen ‘habrá vida después de la muerte’, a mí ni me interesa porque yo ni creo, yo sé que tengo que vivir esta vida, es una sola, hay que gozarla sin hacerle daño a nadie, que yo sepa nunca le he hecho daño a nadie. Si algún día sale una chica a decir que yo le he hecho daño, sería una cosa rara, nunca he pasado por eso, siempre he sido un caballero siempre. Nunca he comentado con quién he salido. Yo sí me he sabido cuidar, es jodido pero tienes que saber hacerla. Tienes que hacerte amigo, pata, yunta, del administrador, es el primero que te caga, pero para eso hay que ir dos o tres veces solo, le das su chaufita, su lomo saltado, tienes que pensar. Si varías de lugar eso te caga, tienes que ir a un solo lugar.

Ahora hay Airbnb...

Esa vaina para mí no funciona ¿y el vecino? La gente por fregar y querer ver en la noche el ampay... Yo nunca me he jactado de que nunca me han visto, yo cerradito, hay que saber hacer las cosas bien, no te apures, lento, a paso firme, mira siempre tu retrovisor, tu espejito.

¿Y la sartén?

He tenido varias sartenes, yo le puse la sartén a un carro chiquito, un mercedes rojo que tenía, le puse la sartén porque la que subía ya estaba frita. Ahora ya tengo cacerola, sin aceite.

Melvita te jala la oreja

No me jala la oreja. Yo creo que no puedes faltarle el respeto a alguien que de verdad te ama, te adora, que administra tu vida... me da 500 soles mensuales... me da mi mesada. Es que yo soy gastador en las compras, en la casa de mi mamá. Yo babeo por mi mamá y ella me dice ‘ay hijito, he visto una chompa hermosa, me queda con pantalón negro, cuesta tanto’ y yo saco al toque, soltaba al toque, era muy gastador, veía plata en mi bolsillo e invitaba a comer, eso está mal a veces, hay que cuidar. Ahorita en mi billetera tengo 30 soles, sí llego a fin de mes. Mis 500 soles son para mis gustitos.

¿Cuántos años tienes con Melva?

Creo que seis, no me acuerdo, yo no soy loco fechas, deben ser cinco o seis años juntos, pero de conocernos son 13, en el 2011 la conocí. Ella trabajaba para producción, yo venía de América, de Lima Limón y regresé con Jorge y ella ya estaba ahí, tenía un mes, ahí nos conocimos. Creo que después de un año empezamos a salir un poco, primero en grupo y ya solos, nos fuimos pegando, se convirtió en mi representante y ya no se despegó nunca.

¿Fue fácil conquistarla? Ella ya sabía quién era Carlos Vílchez...

Sí, claro. Alguna vez me dijo, primero conozco toda tu historia de verdad, parece que indagó. Yo no tengo por qué mentir, quizá para muchos ser mujeriego puede ser ser bacán, pero a mí no me inflo el pecho. Le dije, sí, he salido con bastantes personas, quiero relajarme un poco y ya está. En Bienvenida la Tarde ya estábamos coqueteando, hartos cuchis... esto sí no lo he contado, fue muy divertido. Salíamos y coqueteábamos y nos dábamos nuestros chapes y de pronto me dijo ‘¿qué somos?’, como chibola, bueno ella es bastante más joven que yo, ella tiene 40, le llevo más de 16 años. Yo por joda, le dije ‘¿cómo que qué somos? somos una basura’, queriendo pegarme de gracioso y me dijo ‘conmigo no te me la pegues de gracioso, tu comedia para la televisión, quiero saber qué somos, estamos saliendo, somos pareja, ¿qué?’. Ahí me desinflé y le dije ‘estamos saliendo’ y ella me dijo, ‘pero qué vamos a terminar siendo... soy tu agarre’ y yo ‘no, no’. Ella me dijo ‘algo serio conmigo, si no, ahí nomás’, ya caballero nomás. Yo no me alucino pidiendo la mano, no es mi estilo, yo nunca le he caído a una flaca, nunca le he dicho ‘quiero ser tu enamorado’, como que coqueteas, vas avanzando, vas abrazando, vas metiendo chape, tocas el claxon y ya. Melva se puso firme, ya me quedó atracar nada más.

Es que estás enamorado...

Claro que sí, si no no estaría con ella. Es espectacular en el trabajo, fuera del trabajo, en la casa es extraordinaria, tiene sus momentos de joda. Ahora no estoy hablando mal de ninguna mujer pero la mujer tiene un carácter súper especial, cuando dice ‘este no sale, no hace nada, se porta bien ¿Cómo hago para joderlo? algo le voy a pedir que lo incomode’, pero nosotros nos tiramos siempre a la broma todo y ahí queda

¿Se lleva bien con tus hijos?

Claro, con mi Giancarlo, vivimos juntos. Mi hija ya vive separada, ya soy abuelo de dos nietos, un año y tres meses tiene mi último nieto. Melba se lleva bien con Carla, es pata de Giancarlo, con mi mamá se lleva muy bien, con toda mi familia.

¿Ya para cuando la roca?

No, no, no me hables de matrimonio, ya me cagaste... Todavía no. Tengo 56, a los 80 podría ser. Nunca hemos hablado de matrimonio. Creo saber o entender que para ella tampoco es algo apresurado, pero a mí no me carcome el cerebro.

¿Tu hijo no te sigue los pasos?

Está teniendo sus alegrías. Es soltero, pero tiene flaca hace como un año. Acaba de terminar periodismo deportivo, un chico bien aplicado. Giancarlo siempre ha sido juguetón, travieso, pero lo primero que le enseñé fue lo que me enseñaron en mi casa, es el respeto. Nunca lo has a escuchar entrando a un lugar y decir ‘hola’ o ‘holis’... Una vez sus amigos fueron a mi casa y me dijeron ‘hola’, dije ‘qué fue, ¿se me ve muy joven?’. A la siguiente vez que fueron y me dijeron lo mismo ya los cuadré, les dije que yo no soy su amigo, puedo ser su papá, que me llamen tío si quieren pero que no me digan ‘holi’, desde ahí me dicen ‘el tío Vílchez’. Eso también empezó cuando en la calle me pedían autógrafos o fotos siempre me decían ‘Carlitos’, ‘Vílchez’, ‘Carlota’, hasta que me dijeron ‘tío’ y seguían y dije, ‘antes que me caguen, ‘Mi tío Vílchez oficial’. Llega un momento en el que te das cuenta que ya creciste, los chibolos te dicen tío y las arrugas te van creciendo. A la gente le gusta porque es más fácil decir ‘Tío Vílchez’.

¿En un avión también lo has hecho?

Claro, pero joven. Es lo máximo, la turbulencia es bien paja. La idea es que no te vea la hostess. El único momento apropiado es cuando están acomodando las cosas para servir a la gente. No sé si se pueda hacer, a menos que te compres tu avión como Luis Miguel.

EL NACIMIENTO DE LA CARLOTA

Tu amado Luis Miguel...

El más grande del planeta tierra de Hispanoamérica. Yo le puse mi papi, mi churro, mi Micky, mi rey y quedó sellado.

¿Dónde nació eso? ¿Con Jorge?

No, con Jorge estábamos en el teatro, el Palas Atenea, ahí hicimos teatro. En el año 91, la Carlota ya tiene 33 años, ahorita muere clavada. Me acuerdo que estábamos trabajando en el teatro, JB el Show se llamaba, faltaban como 15 minutos para terminar los ensayos. Jorge hacía de Verónica Castro, Magneto, Juan Luis Guerra, Chayanne, Michael Jackson, yo era Eddie Murphy. Faltaba un tiempito y Jorge me dijo que me invente un personaje, me fui a mi casa y me acordé de un chico que era del barrio y se fue a vivir a Estados Unidos y venía de vacaciones al barrio, era gay. Nunca me voy a olvidar que vino en jean y una camisita linda de brillos. Pasó por el barrio, era carnavales, nos miraba como basura y me acordé de él y le puse ‘Carlota’ porque yo soy Carlos y luego me inventé el resto, yo soy admirador de Luis Miguel. El personaje fue creciendo, fue un boom en el teatro y ya Jorge lo lleva a la televisión. Nunca me voy a olvidar de un sketch, el del Chavo del 8, imagínate a Luis Miguel vestido del Chavo del 8 y yo tirado en el suelo. También la de Luis Miguel sin diente, Jorge reventado de risa, eso fue un escándalo. Para mí Jorge es el mejor imitador del país.

La Paisana Jacinta fue un gran personaje...

Yo nunca he sentido que ofenda, que molesta o que insulta. Es un personaje. Jorge inventó un personaje para que la gente se divierta, un personaje rico, dulce... Una vez le pregunté a Jorge cuántos personajes tenía, creo que tiene como 200, tiene cara de todo pues. Jorge se maquilla solo ah, él se hace todo solo.

¿Es cierto que como dice Alfredo, su camerino es un templo?

Es un templo para él, le gusta estar siempre solo para concentrarse en lo que va hacer. Él es tímido, no habla mucho.

¿Alfredo qué es para ti?

Yo lo admiro porque no entiendo cómo puede joder tanto. No entiendo qué me metió a mí en su conversación, cuando estaban acá hablando. Dice que me picaba, sí me picaba, yo sé que es parte de la comedia pero a veces me bloqueo y quiero ganar. No te ha contado lo que tragábamos por su culpa, me subí como 9 kilos, era rico, pedíamos minpao del Barrio Chino. Alfredo se comía como tres y yo uno, comíamos como chanchos, nunca en mi vida había pesado 86 kilos y pelao, sin ropa. Le dije ‘ya no voy a comer más’ y Alfredo me dice ‘no huevón, come, la vida es tragar cojudo’ y tiene los verdaderos huecos, conoce el huarique misio, el intermedio y el pituco, en los tres comes igual con diferencia de billete.

Con Alfredo también has trabajado bastante...

Sí, hemos hecho giras un montón con empresas cerveceras. Fuera del trago, era la juerga, el vacilón, pero también estábamos mucho más jóvenes. Alfredo es mi hermano

¿Ya te acostumbraste a las redes?

Yo sí bloqueo, los comentarios ofensivos que se meten con algo personal. Me ha escrito muchas personas para preguntarme por qué los había bloqueado, yo no me acuerdo de los nombres pero sí de las caras. Me piden disculpas y me dicen que me insultan porque quieren llamar la atención, igual los bloqueo. No me sigan si no les agrado, si me insultan, los tengo que bloquear porque me desagradan los insultos. Para que la gente sepa, yo soy el que contesta en redes, no tengo CM. Hay que modernizarse si no te quieres quedar en el olvido.

¿Laura Huarcayo también es tu hermana?

Sí, la quiero mucho, nos comunicamos, la amo, hicimos una gran amistad, es unja conductora excelente, aprendió mucho y con el tiempo fue conociendo un poco de la comicidad. Ella me pedía que le enseñe y yo le enseñaba en Lima Limón, no sé si te acuerdas que hacíamos sketch en un hotel, ella hacía de empleada. Aprendió y sabe, es guapa, es regia, grandota, imponente.

¿Y Pía Copello?

A mí me agradó toda la vida, a mí nunca me contaron que iba trabajar con ella y a ella tampoco le dijeron, fue una sorpresa para los dos. Unos meses antes ella estuvo en Noche de Patas y me dijo para hacer un TikTok. Pía conduce muy bien, se suelta, es rápida y con los niños es experta. Me encanta cómo trabaja, cómo conduce. Mario ha entrado, yo se lo he dicho en su cara pelada, yo lo veía de otra forma, más seco, pero es una buena persona, un gran chico, muy chambero, recontra papá, recontra marido, ama a su familia, a sus padres... y es pisado.

También trabajaste con Carlos Álvarez

Se comentó algo feo, que a mí no me daba la gana de trabajar con él. A mí no me gusta trabajar con él porque él hace política, a mí no me gusta hacer política, veo las noticias pero no sé los nombres de los políticos. Fue así de simple. Es un buen imitador, me gustan varios de sus personajes, varios que han calado hondo en el pueblo peruano. Bronca no puedes tener en este mundo y menos de gratis. Si me pagaran, hasta con el camarógrafo me trompeo, para seguir cobrando más.

¿Miras en la calle?

Jamás he sido de las personas que pasa una chica con una figura increíble y voltear a mirar, ni de chibolo, me parece recontra irrespetuoso, malazo, me imagino que la mujer se debe sentir remal. Frente a frente sí te miro y digo ‘qué rico’, con mirar no haces nada ni tampoco ofendes, con tal de que no hagas ningún gesto. En tele sí lo he hecho, siempre he hecho personajes de mujeriego, de palomilla... siempre he sido respetuoso, que la gente sepa que siempre he sido y seré respetuoso, soy de las personas que se paran en la luz roja, que da permiso en las personas. Está mal que yo lo cuente pero yo me he parado y me he bajado en muchas oportunidades para hacer pasar a una abuelita y hasta a un perrito, yo amo a los animales, a los seres humanos, no me interesa si me viste o no pero yo en mi consciencia sé que he ayudado a una persona.

Te gusta ayudar...

Me gusta ayudar a la gente, apoyar. En pandemia ayudé a mucha gente, tuve la suerte de no quedarme sin trabajo, yo mantengo a mi mamá y a otras personas más. Me escribían desesperadamente para que los ayude con sus emprendimientos. Un día, yo mismo puse ‘a todas las personas que necesiten de mi ayuda, todos los viernes voy a repostear de a ‘100 a 200 personas’. Me escribió a un chiquillo que desinfectaban carros en plena pandemia, bien insistente, yo tenía miedo a que viniera a mi casa, pero vino. A los meses me escribió a agradecerme, se había ido a Estados Unidos, se me cayeron dos lagrimitas.

Qué emotivo...

Soy recontra llorón pero con mi familia, si le pasa algo a mi mamá me voy a morir, mitad de mi cuerpo se me va si se me va mi vieja. Ya perdí a mi papá hace 31 años, mi hermano también se fue. Para mi mamá fue bien doloroso, para nosotros también pero más para mi mamá. Mi papá era el que me daba los consejos y me enseñó a tratar a las mujeres, anduve con él desde niño.

CAFÉS CON LA CHÉVEZ

¿Hay amigos en la tele?

Claro que sí. Jorge es mi hermano y mi amigo, Alfredo es mi hermano. Es difícil, en el medio artístico te encuentras con tus patas, que es diferente a los amigos, son los que trabajas pero no tienes tiempo para hablar con ellos. Jorge es mi compadre.

¿Te han caído puñales alguna vez?

Seguro que sí, no sé decirte quiénes pero quizá sí, es que no le puedes gustar a todo el mundo.

¿Has hecho o te han hecho alguna locura de amor?

No, nunca, no soy de dar regalos, no soy detallista. Soy malo para las fechas, no me acuerdo ni de mi cumpleaños, si mi familia no me manda un mensaje no me acuerdo, tengo la enfermedad del trabajo, soy muy chambero, me gusta generar para después disfrutar. Me gusta vacacionar pero solo 10 o 15 días, más no, algo me falta, quiero hablar, quiero hacer sketch, quiero trabajar en un programa cómico. Yo no creo en santos, pero sí creo mucho en las vibras.

¿Has guardado pan para mayo?

Siempre. Antes coleccionaba carros, pero no eran tan carros y estaba más joven, con más chamba. Tampoco nunca he tenido un carro del año, siempre de segunda. Tuve una Hammer que era de Farfán, he tenido muy bonitos carros pero pasaron de moda y los vendí y la vida continua. Ahora tengo mi Nissan.

¿Nunca has probado drogas?

Nunca, ni siquiera marihuana, odio las drogas, me parece malísimo, me desagrada totalmente, será que de chibolo lo he visto en mi barrio. Además, no necesito de eso, si ya estoy loco, imagínate con un troncho. No lo haría, menos de viejo

¿De qué te arrepientes en tu vida?

No me he arrepentido de nada de lo que he hecho en mi vida, he hecho cosas malas, sobre todo a mi mamá, pero le pedí disculpas, era un niño también. No tengo un arrepentimiento fuerte. He intentado hacer lo mejor posible en mi vida.

¿Si tuvieras la oportunidad de hacer una escena de amor, con quién te gustaría?

Con Demi Moore, la amo, es hermosa, ahorita está tía, debe llevarme 10 años pero la tía está parada. Con ella haría todas las escenas y gratis y sin poncho. Mi segundo amor el Sharon Stone.