Andrea San Martín llega dispuesta a incendiar la pradera. La ojiverde es la invitada de la semana en ‘Café con la Chevez’ y se anima a contar detalles nunca antes revelados sobre su romance con Deyvis Orosco, su tormentosa relación con Sebastián Lizarzaburu y mucho más.
En la charla, Andrea San Martín hace un mea culpa sobre los escándalos que ha protagonizado a lo largo de su carrera y cuenta que actualmente se encuentra muy feliz y en equilibrio en su vida con su nuevo novio.
Finalmente, Andrea San Martín cuenta que perdió un bebé del popular ‘Hombre Roca’ y cómo fue que se esfumaron sus posibilidades de ser nuevamente madre. ¡El café está servido!
¿Siempre quisiste entrar a la televisión?
Sí, desde chiquita. Me costó, igual hice casting, me choteaban desde niña. En el colegio gané un concurso en Habacilar, ‘La chica Ponstan’. Mi mamá me llevaba, ahí concursé con Zully Sáenz, Rosángela, gané el concurso, estuve como tres meses en Habacilar, me llevé mi platita. Yo siempre he tocado puertas, he trabajado de anfitriona cuando me pagaban 20 dólares por 80 mil horas, me la he comido trabajando, he pasado mi derecho de piso. Me rechazaron de un casting de EEG, en el casting donde participó Zully, yo fui y no me aceptaron.
¿Cómo te enamoras de Deyvis?
Nosotros lo contamos en televisión abierta, nos entrevistó Johanna San Miguel y Magaly.
¿Te lo presenta tu mejor amiga?
Sí, yo estudiaba Ciencias de la Comunicación, mi mejor amiga también, pero estábamos en dos universidades distintas. Mi mejor amiga había sido parte de la grabación de ‘La Pre’ y se hizo amiga de Deyvis. Ella tenía un trabajo en la universidad y fue a hacerle una entrevista con sus amigos sobre todo lo que era la cumbia. Así se conocen ellos y cuando a mí me toca hacer un trabajo de entrevistar a un personaje público, yo no sabía quién era y mi amiga me dijo ‘Oye, Deyvis ya me hizo el favor, creo que sí te va ayudar’ y así, entre otras cosas que las voy a dejar guardadas porque favores uno no hace por la vida de la nada, siempre hay un interés de por medio. Hablamos por teléfono, esa noche nos quedamos hablando hasta las 6 de la mañana por teléfono y ese día él fue a mi casa, yo le hice la entrevista y desde ese día empezamos a salir.
¿Qué te llamó la atención de él?
La seguridad que tenía, yo era chibola y difícilmente a esa edad te encuentras con gente que proyecte esa seguridad, era un pata trabajador y eso fue algo que me llamó la atención. Además, su papá también había fallecido, éramos hermanos mayores, los dos teníamos responsabilidades, teníamos cosas en común.
¿Cómo eran esos trayectos de San Isidro hasta Collique?
Eran largos, como de tres horas dependiendo del tráfico. Me la fajaba porque cuando estás interesada haces que sea recíproco todo. En ese momento, así como él iba a visitarme, yo iba a visitarlo.
¿Tus amigos no te cuestionaban por estar con alguien de la cumbia?
Sí, podían cuestionar cosas pero yo lo veía de otra manera. A mí me vale tres pedazos de pepinos lo que me digan, yo voy hacer lo que yo quiera, no escucho a la gente, hago lo que quiero hacer y apechugo. Era difícil porque yo apenas conocía Lima, siempre fue una muy temerosa, mi mamá me tenía que acompañar a la universidad, por eso creo que me sirvió mucho, aprendí mucho, salí de mi entorno y conocer muchas cosas.
Estuvieron cuatro años
Sí, cuatro años y tres meses.
¿Era distinto al que es ahora?
Sí, totalmente, es otra persona. Yo conocí a Deyvis cuando comenzó y en lo que se transformó, ahora es otra persona totalmente diferente, no era la persona en la que yo me fijé, creo que tenía 23 años, era bastante joven, salía de todas sus cosas. Él era el soporte de toda su familia, hay cosas que uno tiene que reconocer.
¿El cambio fue para bien o mal?
Yo tengo mi propia opinión pero no sé, no quisiera responder esa pregunta. Yo siento que así como yo lo llegué a admirar al inicio, me decepcioné mucho de él, me hubiera gustado no terminar las cosas de esa manera.
¿Ustedes llegaron a terminar realmente?
No, nunca terminamos. Nunca tuvimos la conversación. Los últimos meses habían sido complicados, yo vivía con él, tenía todas mis cosas allá pero como habíamos tenido algunas complicaciones yo trabajaba en Miraflores y me mudé con mi tía los últimos meses de la relación, igual nos veíamos, igual estábamos juntos y llega el momento en el que él me pide para regresar a la casa pero yo ya no estaba tan segura,
¿Qué te creó la inseguridad?
Ya no estábamos tan bien y ya no estaba tan segura de lo que yo sentía por él, le tenía un respeto no solo como pareja sino por el respaldo que fue para mí en un momento, yo era muy chiquita y lo veía a él como muy adulto. Decidí no volver a la casa y es ahí donde perdemos comunicación. Me dio un beso de despedida ‘mi amor, nos vemos mañana’ y al día siguiente no me contestó más el celular.
¿Cómo va a ser? ¿No te respondió los mensajes?
Me dejó en la puerta de la casa de mi tía porque la idea no era terminar, solo era no regresar a la casa todavía, no era algo para tomar la ligera. No me contestó, llamaba al manager, no sabía qué pasaba, ya una semana era una falta de respeto.
Ahora que te dejen de seguir en redes, significa que terminaron...
Yo ya estaba en el programa y ya especulaban que no me hablaba y un día, debe estar grabado también, hay un capítulo, yo estaba nerviosaza, estaba trepada para tirarme a la piscina y Laura Huarcayo dice: ‘Andrea, me acabo de enterar que estás soltera’. Yo no sabía qué decir porque no había tenido una conversación final y me lo estaban preguntando a nivel nacional, me iba sentir estúpida de decir que sí estaba con él pero no hablaba con él, yo dije ‘sí, estoy soltera’.
Terminaron entre comillas...
Ya no volví a saber de él hasta cuando nos volvimos a encontrar en el pasadizo que hicieron el ampay, lo fui a buscar...
¿Por qué lo fuiste a buscar?
Yo lo fui a buscar al canal porque me fui de mi casa sin mis cosas. Yo le dije a Sebastián ‘acompáñame porque Deyvis está en el canal’. Él no me contestaba el celular y yo quería mis cosas. Mi amiga trabajaba en canal 2 y me dijo que Deyvis estaba ahí. Yo ya estaba con Sebastián y le pedí que me acompañe, Sebastián no me acompaña y fui a darle el encuentro para pedirle mis cosas. Al final por las puras porque no me regresó nada.
¿Qué hizo con tu ropa?
Tengo entendido que la regaló a una iglesia. Sé que hay una cosa mía que la tiene una amiga, que la usa todavía. Yo me quedé con tres trapos. En la casa de Sebastián su mamá me tuvo que comprar esas cajoneras de plástico de colores, ahí estaba todo lo que tenía, me quedé sin nada. Tuve que empezar a comprarme ropa. No sé qué es lo que pasó con él, quizá se molestó porque ya estaba con Sebastián, nunca me lo dijo tampoco.
¿Te decía ‘mi amor’?
Me decía ‘Negrita’, a todas les dice así, es una palabra que usa siempre.
¿Qué habían planificado con Deyvis?
Si a mí no me aceptaban en el casting de BLT, nosotros ya íbamos a empezar a planear tener hijos y tendría que haber renunciado a mi sueño de estar en TV. Recuerdo que antes de ir a esta última conversación con Deyvis, le dije a Sebastián que yo podía terminar con Deyvis, Sebastián lloraba y me decía ‘pero piénsalo’. Le dije que tenía una conversación pendiente con Deyvis y dependiendo de esa decisión conversamos, pero en principio mi idea era quedarme con Deyvis y le pedí que me dejara en paz. Pasó lo de la conversación, le dije que no quería regresar a la casa porque yo quería entrar bien a esa casa. Cuando digo que estoy soltera, Sebastián entra con todo y él que es una serpiente encantadora...
¿Con Sebas cómo empezaste?
Fue fuerte, imagínate si nos ha durado como 10 años. Él ha sido como mi evento karmático más largo. Yo lo conozco en Bienvenida la tarde pero él en ese entonces salía con Johanna Cubillas, todos éramos amigos pero él era coquetón. Un día llegó a los camerinos, yo estaba sentada peinándome y nos contó que había terminado con su flaca. Desde ahí sus intenciones eran claras conmigo, es ahí donde yo, que tenía una relación con Deyvis, fui a las oficinas de BLT y les dije a los productores que quería renunciar, ellos ya se habían dado cuenta y por eso no me dejaron ir, se necesitaba show. Yo me quería ir porque no quería involucrarme con él, yo sentía que tenía más de 4 años con Deyvis, ya habíamos hecho una planificación de vida y necesitaba respetar eso, pero como sabía que me jalaba el ojo quería irme.
¿Se van a vivir juntos?
Sí, a la casa de su mamá.
El programa eran ustedes
Sí, nosotros armábamos BLT. Nuestra historia ha sido densa.
¿Ahí sales embarazada?
Él se va a EEG, yo me quedo en BLT. Yo entro a EEG después y él no quería, me dijo que si yo entraba a EEG, él no volvía conmigo. Yo igual entré. Ha sido muy largo, imagínate que tenemos una hija de nueve años.
¿Cuándo te empiezan a decir ‘Soraya’?
Creo que ahí.
¿Te sacó la vuelta?
Millones de veces, muchas veces y yo lo perdoné muchas veces, fue mi error porque yo era consciente que me sacó la vuelta.
¿Tú no le fuiste infiel?
Nunca, creo que si yo me puedo jactar de lo íntegra que soy con él, es eso. Él nunca me ha podido sacar en cara eso en esa época relativamente larga.
¿Quién fue más infiel, Deyvis o Sebastián?
No sé, la verdad. Es que Sebastián era conchudo.
El chaplín de ‘Soraya’ te quedó como sello
Sí, yo me río porque de verdad, para empezar, yo gesticulo mucho, desde niña mis tíos me decían ‘tienes cara de loca’, soy muy intensa pero eso lo tengo desde niña, es mi personalidad y no la pienso cambiar. Cuando estoy muy feliz o muy molesta se me nota y siempre he sido la misma delante y detrás de cámaras.
Piensan que eres tóxica
Pero cómo no me voy a enfermar. Yo soy consciente que la he fregado, he aprendido también. Yo soy intensa y me gusta ser como soy, lo que no me gusta es que la gente me empiece a insultar. Puede que mi personalidad sea muy histriónica pero si conocieran al 100% de la gente del medio, probablemente sería la única persona transparente que hay. Yo no me voy a vender ni vivir esclava a un personaje solo para tener más vistas. Díganme Soraya pero no me insulten, está fuera de lugar, es irrespetuoso.
SU TORMENTOSA RELACIÓN CON JUAN VÍCTOR
¿Cómo fue el tema con Juan Víctor?
De él sí no hablo, yo solicité que no se hable y yo no hablo tampoco, sobre todo por un tema de tranquilidad mío. Eso me llevó a muchos temas, inclusive psiquiátricos. Yo cometí muchos errores con Sebastián con el tema de nuestra hija, seguimos teniendo problemas como padres, por algo no estamos juntos, pero creo que lo hemos sabido manejar. En algún momento yo me preguntaba, mi hija va ver estas cosas y los dos la cagamos, cometimos ese error, lo remediamos a lo largo de los años, pides disculpas y no lo vuelves a hacer. Yo he vivido todos los días y hasta ahora me causa tembladera con algo acá que no puedo hacerlo porque primero está mi amor de mamá, es un tema que me saca de mi tranquilidad pero pienso que primero está el hecho de poder tener la autoridad de yo decir ‘no volví a caer en esto’. Me dolió, me golpeó, me revolcaron, fue una etapa horrible, pero la verdad está en mi casa.
¿Estás medicada?
Yo no creo en las pastillas pero sí llegué a un punto en el que ya no puedes manejar la situación. He llevado acompañamiento psicológico, fui al psiquiatra y opté por otro camino porque yo no estoy a favor de la medicación. En algún momento intentaron darme estas pastillas para dormir pero yo no puedo estar dopada porque necesito trabajar, tengo mis hijas, necesito estar lúcida. Tuve que ponerme los pantalones, llorar las veces que tenía que llorar, trabajar y así afrontar. Tuve un médico más naturalista que sí me ayudó un tiempo y todo con el tiempo va pasando.
¿Ya no piensas tener más hijos?
Ya no puedo, no tengo útero, no sé si hubiese decidido tener un tercero. Yo sí lo hubiese tenido.
¿Llegas a perder un bebé?
Sí y pierdo la posibilidad de ser mamá. Fue con Sebastián. Por algo pasan las cosas dicen, estoy bien con mis dos hijas pero sí fue un capítulo duro, ahí estaba en pleno clímax de estrés. En la clínica la gente pensaba que yo me iba matar, me dan ganas de llorar, yo veía las noticias y no podía creer lo que estaba escuchando, las cosas que decían... no podía creer cómo podía salir tanta mierda de la boca de la gente sin saber lo que estaba viviendo. Yo fui por algo y terminé sin útero, terminaron llamando a Sebastián para hacerme transfusiones de sangre. Sebastián fue al nido a recoger a mi segunda hija y me dijo ‘yo estuve ahí donde pasaron ciertas cosas y nada de lo que están diciendo es verdad’. Fue un momento muy duro pero yo me considero una persona bastante fuerte, ese plan de sufrida no me sirve para salir adelante. He tratado de vivir esas cosas solas y al final el Dios en el que creas es la única persona a la que no puedes engañar.
¿Alguna amiga te traicionó con alguna pareja?
No, es que no tengo amigas. Solo tengo una mejor amiga desde hace 18 años y luego no me ves parar con nadie. Tengo círculo social de juerga pero mi vida la hago sola con mis hijas, mi familia.
¿Y las salidas con Elías?
A mí qué me importa, no me vas a ver encerrada en mi casa tratando de mentir que no soy una persona soltera, eso se los dejo a las cucufatas. Nunca me ha importado lo que digan con tal de no estar haciendo algo malo. Elías es de mi grupo de amigos de juerga. Ahí hablaban de temas privados y yo creo que era algo que no veía ni al caso.
¿Ya no lo ves?
No veo a nadie. Desde noviembre del año pasado, empecé a salir con el que es mi pareja ahora, cuando estoy comprometida con alguien, obviamente tengo que cambiar. Antes mi tiempo libre lo pasaba con mis amigos y ahora lo paso con mi novio.
Salió un rumor que habías estado con Fabio, Bruno y Melissa
Si tendría que hablar de cada rumor que ha salido de mí... ya no me inmuto. No es algo que me preocupe.
¿Tu novio es menor?
Le llevo 7 años. Él es totalmente diferente a los chicos de su edad. Cada uno está viviendo su edad, es un chico enfocado, tranquilo, algo que me gusta, al margen que me encanta físicamente, él jaló mi ojo desde el primer día, la seguridad que tiene, es un chico trabajador, me mantiene con los ojos ahí, viéndolo, eso hace que mientras yo me siga sintiendo de esa manera, estoy tranquila. Me da demasiada confianza. Él vive en Trujillo y a pesar de la relación a distancia pero nunca me había sentido tan segura. Él puso las cosas claras, sobre la mesa y jugué todas mis fichas. Vamos a cumplir un año de conocernos y mi relación no ha sido tan expuesta.
Claro...
Los dos trabajamos en redes sociales. Él es un chico inteligente para responder, respetamos las chambas del otro, ponemos nuestros límites. Metí mis fichas con un compromiso grande y espero ganarme la lotería y quedarme con él todo el tiempo.
Uno merece ser feliz, después de tantas cosas.
Cada uno tiene su historia. Creo que los dos merecemos un amor bonito, limpio y transparente. Estamos en la etapa de conocernos, a pesar de que estamos como pareja.
¿Conoce a tus niñas?
Sí, es la única persona que mis hijas han conocido, me tuve que sentar a decirles ‘Es mi novio’. Ellas nunca me han visto con nadie. Yo siempre he hablado las cosas de manera frontal con ellas, nunca las he relacionado con nadie. Siento que él es una persona que valía la pena, venía de vez en cuando, los papás de mis hijas también lo conocen. Si estoy aceptando tener una relación formal con él, tiene un lugar en mi familia, tiene su espacio, no tiene que luchar con nadie.
Las redes sociales no son el reflejo de la realidad...
Las redes sociales las usamos muchos para trabajar. La gente piensa que tu vida real la van a encontrar en redes sociales y es muy malavibrosa, la gente desea verte fracasar, quiere contenido, quiere que te vaya mal, muy poca gente quiere tu bien.
Cuando te pasó lo de la operación del útero, ¿pensaste en ya no querer vivir? ¿Tomaste una decisión así?
No, lo único que siempre digo es que a veces yo me voy de las redes sociales, necesito mi espacio, no quiero saber de nadie. Son días difíciles, no quería escuchar a nadie, no quería peinarme, cambiarme, hacer nada. No voy a negar que, en esos días, si habían momentos que, no es que me quisiera morir, pero quería como dormir, cerrar mis ojos, no tenía fuerzas para nada. No quería hacer absolutamente nada, apagar la luz. Siempre decía ‘cómo no me internan ahorita y me encierran en una clínica por alguna razón. Es lo que mi cerebro pensaba.
¿Estás viendo ‘Tu nombre y el mío’?
No, no tengo cable. Si se trata de chismes o chamba, igual va a llegar a mi teléfono. Igual me van a etiquetar.
Va a salir tu historia ahí...
Yo sé que él ha dicho que es ficción, espero que la gente lo tome como ficción, algo inventado. Se agarran de un personaje que sí existe, pero todo es mentira. Es una ficción, nadie sabe nunca lo que pasó. Lo tomo como ficción. Ahora, si no es aclarado continuamente que no es una ficción o se me pinta de una manera que no es por supuestos y también por cosas que son adrede. ‘Santa María’ creo que se apellida.
Adriana Martínez...
Vamos a ver cómo se conocen.
Tu abogado dice que tiene la carta lista...
No sé de donde sacaron eso. Para empezar no puedo hacer eso, al decir que es ficción y no usar mi nombre como tal, no se puede legalmente hacer nada, legalmente, pero por ficción yo también puedo contar lo mío, o te cuento la realidad. Quiero que la gente entienda que es una ficción, no me interesa renacer la historia de hace cuchumil años con él.
Coincidiste con Deyvis en un evento...
No me saludó. La verdad no me importa cruzármelo, no tengo un problema con él. Y si me toca trabajar con él, yo chambeo, trabajo con quien tenga que trabajar. Si por un lado me llamas por teléfono y por otro lado no te quieres cruzar conmigo, yo no soy la del problema.
¿Hace cuanto te llamó?
También me ha llamado, no sé que quiere. ¿Qué quieres señor Deyvis Orosco? Si usted lo que pretende es tener una conversación conmigo, no hay problema. Lo estamos invitando hace mucho tiempo a que vaya a la radio, a La Karibeña, que vaya y lo ayudamos con la promoción de sus canciones, pero yo por interno no voy a hablar absolutamente nada.
¿Por qué te llamó?
No sé, pero no tengo ningún problema. Mientras se recalque en la serie que es una ficción, y mientras no se genere una malinterpretación, porque yo tengo a mi novio, a mi novio lo respeto, no voy a hacer cosas buenas que parezcan malas. Si tengo públicamente tengo que interactuar con él, profesionalmente lo voy a hacer. Mal no me cae, hay cosas que no me gustan definitivamente. Por ejemplo, si me haces una pregunta, yo soy concreta y concisa en responderte, yo no soy evasiva para dejar que la gente suponga cosas en su mente que puedan dañar la imagen de un tercero.
¿No crees que respete a Cassandra?
En su momento cuando hice ‘Cachudas pero conchudas’ me sacaron el ancho en algunos programas diciendo que ‘por respeto a una familia’ yo no debería hablar de mis exs. Punto uno, si hubiese tocado temas de infidelidad de una persona, hubiese rebotado en todos los medios, no se habla de nadie, ni de un evento en concreto. Me dan un libreto y lo leo, me cago de risa y se acabó. Ahora que se va a hablar en ficción de una persona que involucra a más personas ¿Qué onda? Ahora no está mal, ahora sí no está mal. Si hay algo que a mi me incomoda, ustedes saben que no tengo filtros.
Vas a salir a hablar
Voy a salir y lo voy a decir, pero yo no voy a tratar ningún tema por interno. Eso lo dejo clarísimo, si están pensando que puedo manejar la situación, o algo de intriga, no me interesa hacerle publicidad a a nadie, ni cuidarle el trasero a nadie. Es la pura verdad. A mí las cosas de frente y donde tenga que ser. No me oculto de las personas. Si tu no tienes problemas conmigo y te caigo bien y no estás haciendo nada malo, tómame la mano, me saludad de frente, como hombre o como mujer con ovarios, pero no a escondidas. Para eso no me voy a prestar.
En saunas tampoco...
Cuando estaba conmigo también iba a ese sauna y yo lo defendí. Yo he hecho videollamadas con él ahí y no he visto nada raro. No es por cubrirle el poto a nadie, estoy contando lo que viví. Lo unico que pido es respeto para lo que yo viví. Me río con lo del personaje, puedo joder, pero si eso se presta a mal y va a tener un concepto erróneo de lo que yo viví en esa relación y no lo vana a clarar y van a seguir siendo evasivos en las preguntas, ahí si voy a tener que hablar
¿Es cierto que te dejaban encerrada?
No voy a decirlo así, yo he vivido muchas cosas buenas y no tan buenas. Aprendí muchísimo con él, las experiencias de no vivir en mi casa., También hubieron muchas cosas que no fueron las mejores experiencias peor que hoy en día no me interesan. En ningún momento he sido amiga de él, cuando intenté llevar un tema de amistad con él, m sentí traicionada. No me cae mal. Es una persona de mi pasado, me importa mi presente, si se ve afectado por algo que se diga y no se aclare. Pido respeto. Guerra avisada no mata gente.
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