Alexandra Hörler: La golpiza de gerente de la U, su padre alcohólico, Pavón, destruye a Pamela López y más

Alexandra Hörler, periodista deportiva y actual conductora de Panamericana Televisión, es la invitada de la semana del Café con la Chevez. La comunicadora se confesó en nuestro exitoso podcast y dio detalles de su dolorosa adoscencia con su padre alcohólico y el episodio de terror que vivió al lado de un ex gerente de Universitario de Deportes, el mismo que le generó un aborto.

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Además, también habló de su nuevo embarazo, los problemas que mantuvo con la familia de su esposo, la suspensión de noticiero de Latina por el pasado ampay con Antonio Pavón y hasta le hizo tremenda crítica a Pamela López, exesposa de Cueva.

Alexandra Hörler se refirió a su comentada entrevista con Jefferson Farfán, donde se popularizó la palabra ‘obviamente’, además del desplante que le hizo alguna vez el Juan Manuel ‘El Loco’ Vargas y mucho más. Póngase cómodo que el café está servido...

Qué bonita noticia la de tu embarazo, yo no había tenido la oportunidad de felicitarte por este hermoso momento que vives

Gracias. De verdad que sí, porque fue prácticamente ya inesperado, ya no calculado. No entró dentro de nuestros cálculos, porque habíamos tratado mucho tiempo con mi esposo y no se podía, no salía. Le dije, bueno ya voy a cumplir 41 años, esto ya fue dije, ya pasó, no hay drama. Tampoco no me voy a deprimir, no, nada. Voy a adoptar un gato y ya no se dio.

Yo me acuerdo cuando te hice la entrevista en enero, que me dijiste que no querías tener hijos…

Es que ahí también ya había dejado la opción de querer tener hijos. Ya habíamos probado y no salía. Y desde antes yo decía, no quiero tener hijos, porque yo quiero seguir trabajando, quiero viajar, quiero conocer el mundo, quiero tener la libertad de poder moverme...

¿Ya habías pasado por el conteo ovárico y esas cosas?

Me habían hecho análisis hormonal, me habían dicho que no había salido muy bien. La doctora me dijo hubieras congelado los óvulos, pero ya fue. Por supuesto que ya no es mi doctora, la mujer prácticamente me desahucio. Mi esposo me compraba las pruebas estas de ovulación y ya, hoy estoy ovulando, tenemos tarea, hay que hacer la tarea y nada. O sea, nos pasábamos meses y meses, un año y medio casi y nada.

EL EMBARAZO DE ALEXANDRA HORLER

No me iba a tirar en mi cama a sufrir y deprimirme y me empecé a sentir mal. Yo dije sabes qué, este ritmo de trabajo que tengo me está matando la verdad. Entre la radio que me tengo que levantar temprano, ir corriendo, no tengo hora de almuerzo, me voy corriendo al canal, recorro todo Lima y en el canal me pasan pautas cuando estoy tratando de comer algo, para poder bajar y normalmente termino de grabar y a veces tengo otras cosas que hacer y llego a mi casa y es como que estoy mareada, con náuseas, me duele la cabeza, pucha qué sueño ya no puedo más. Un día ya empecé con los vómitos mal y dije no, ya está mal, yo creo que estoy enferma, se me ha metido un bicho. Llamé al seguro, que van a tu casa y todo, me dijeron señora le podemos poner una medicina y un gravol para las náuseas. Si vuelve a vomitar nos vuelve a llamar y la trasladamos a la clínica, para que la vean y al día siguiente seguía igual. Ah no, esto está raro y tenía una prueba de embarazo guardada, que me había comprado mi esposo, pero hacía un año y medio. Me levanté en la mañana, vomité y dije voy a hacer la prueba con mi primera pichita del día y voy a ver por si acaso. Mi esposo ya se había ido a trabajar y hago y sale el más…

Me muero…

Pero en 2 segundos ni siquiera tuve que esperar los 3 minutos, a los 2 segundos y yo no, esto está malogrado, porque tiene un año y medio guardado, ya venció. Entonces qué hago, qué hago. A ver mi esposo todavía llega para la hora de almuerzo, me voy acá al consultorio o lo llamo. Qué le digo y yo así, la más fría del mundo le escribo. Ay amor. ¿Qué tal? Tengo que hablar contigo. ¿Te lo digo ahora o te lo digo cuando regreses a la casa? ¿Cómo me vas a decir eso? Si ya me dijiste, dímelo ahorita y le mandé la foto de la prueba. Me llamó, se emocionó, se puso feliz y me cayó mi chiquita, porque me dijo cómo me vas a decir una cosa así por WhatsApp…

Nos fuimos al laboratorio a hacer el análisis de sangre y cuando me hacen el análisis me salen ocho semanas. Tenía dos meses dos meses que me había pasado de juerga en juerga. Yo estaba más asustada decía, Dios mío cómo va a nacer, qué enfermedad va a tener o va a ser alcohólico, va a ser drogadicto…

LOS PRIMEROS MESES DE EMBARAZO DE ALEXANDRA HORLER

Todos los fines de semana mi vino, yo soy vinera, mi vino y mi champán. Así tomando, tomando, tomando todos los fines de semana, fumando también, porque cuando tomo a veces fumo. Yo decía ay Dios mío, qué estoy creando, por qué no me di cuenta antes, por qué no pensé antes, porque ya lo tenía descartado. Es más, me hice una prueba de tamizaje, esa que te sacan la sangre para ver que no tenga síndromes. Yo estaba traumada, pero esa prueba cuesta 900 dólares, pero yo tengo que estar segura que está bien, que está sano o sana, en ese momento no sabíamos que iba a ser, yo tengo que saber que está sano. No me importa lo que cueste, pero tengo que saber. Felizmente salió todo okay. Te salen varias enfermedades, síndromes y salía que todo estaba bien. Ya me quedé tranquila.

Chau vino, chau cigarro, chau todo…

Eso es lo que más me ha costado, el vino. He podido dejar todo. Fumaba. Ya no siento necesidad de fumar, he tenido que dejar el gimnasio, que me encantaba. Y bueno ya pues, no importa, ya lo dejo…

¿Hay que cuidar más la etapa del embarazo en esta edad? ¿Eso es lo que te han dicho?

Lo primero que me hizo fue dejar la radio, uno u otro le dije. Bueno, me quedo en la tele, que es más lo mío y después ya me dijo, deberías pensar si quieres quedarte en la tele. Yo además, esto poca gente sabe, tomo pastillas, estoy medicada para dormir, porque yo he pasado por un par de periodos de depresiones…

ALEXANDRA HORLER Y SU PADRE

Ah, no sabía eso…

Primero hace muchos años, cuando era chibola tenía 18 o 19 años, siempre hubo muchos problemas con mi papá en la casa. Mi papá era alcohólico y no trataba bien a mi mamá, no me trataba bien a mí. Tengo medios hermanos que salieron, fueron saliendo por ahí. La historia fue muy difícil entender…

¿Pero tú eres hija única?

Soy hija única de papá y mamá. Sin embargo, tengo cuatro hermanos más, que los quiero. Bueno, a la menor no la veo para nada, pero a mis otros hermanos sí los veo, los quiero, pero no son hijos de mi mamá, aunque por mucho son casi hijos de mi mamá, porque mi mamá también durante mucho tiempo los crió. Mi mamá se pasó de buena gente. Mi papá siempre fue conmigo muy ofensivo, muy machista, muy castrante también. Mi papá y yo chocábamos y chocábamos todo el tiempo y maltrataba a mi mamá y eso era algo que yo no podía soportar.

Muchos años lo tuve que soportar, porque era menor de edad, pero cuando ya fui mayor de edad me le enfrenté, porque mi mamá me llamaba desesperada diciéndome Alexandra, tienes que regresar a la casa, porque tu papá va a venir y se va a dar cuenta y va a hacer un problema. Y yo estaba feliz en mi juerga, con mis amigos y tenía que salir corriendo para regresar a la casa, para que no haya problemas y para que no le haga nada a mi mamá. Entonces un día dije esto se acabó, no más y empezamos con la pelea. Me pegó, me había pegado muy pocas veces y con la fuerza que tenía mi papá me dejó sangrando. Se armó un escándalo, llamaron a la policía, llamaron a serenazgo y te vas, porque te vas y ahí empezó. Bueno, se quedarán sin nada, porque yo no les paso un sol. Qué importa, ya veré, porque además yo no trabajaba. Ya veré que hago.

18, 19 años y ahí caí en depresión. Ya había sido difícil todos los años tener un papá así y ver cómo era, que llegara de repente borracho a la casa y te levantaba y te sentaba y te hablaba horas, te criticaba, te insultaba, pero te insultaba horrible. Cuando empezaba a insultarme se le cruzaban los chicotes y me insultaba horrible…

Y tú estabas en depresión y aún así te paraste, para sacar adelante a tu mami, para apoyarla…

Tuve un tratamiento y cuando ya más o menos me dieron de alta, empecé a buscar trabajo. Felizmente, no me puedo quejar, he tenido muy buenos amigos que me dieron la mano, que tenían negocios, que trabajaban en discotecas, restaurantes y me contrataron para ayudarlos con el tema de marketing y empecé a hacer fotos comerciales, trabajar de anfitriona. Con todo eso yo sacaba plata para la casa. Empecé a sacar plata también para la universidad, porque hay mucha gente que dice, ay no, esta es una pituca, claro la vida fácil. No voy a negar que tenía una vida acomodada con mi papá. Mi papá sí tenía un buen negocio y todo, pero después, de pronto fue pasar de tener todo, a no tener nada, excepto la casa donde vivíamos.

Y nada, me tuve que poner a trabajar y a trabajar horas y después ya entré a la universidad, a estudiar y dormía literal 4 horas diarias, porque trabajaba en una oficina. Tenía que ir a la universidad y aparte de eso tenía muchísimas fechas con comerciales, con eventos, con fotos, pero había que chambear pues.

ALEXANDRA HORLER Y LA FAMILIA DE SU ESPOSO

Luego pasé por una depresión cuando empecé con mi esposo, porque tuvimos problemas con su familia. Su familia no aceptaba… Los papás, los hermanos, la cuñada, porque no aceptaban que nosotros nos fuéramos a casar tan rápido…

Pero ustedes eran adultos que sabían lo que estaban haciendo…

Es lo mismo que yo pensaba. Yo tenía en ese entonces 37 años, él tenía 42 años. Estamos bien viejos para saber lo que vamos a hacer, como para que la gente se meta.

Pero hubo una falta de aceptación de parte de la familia, que a mí me chocó mucho. Yo no estaba acostumbrada a esas cosas, siempre me había llevado bien con las familias y nosotros nos comprometimos y nadie nos felicitó. O sea, fueron a la casa y nadie nos felicitó, el papá sí, pero nadie nos felicitó y yo lo tomé como una ofensa y preparé un cumpleaños para su hijo y fueron y nadie me hablaba…

Qué fuerte…

Y luego hubo algunos problemas con su papá que ya se solucionaron. Ahora nos llevamos muy bien, yo les tengo mucho cariño. Me gusta, porque son una familia bastante unida. Ellos son lo que yo nunca tuve. Me siento bien, porque siento que mi hija va a nacer en un ambiente bonito, donde va a tener el amor de familia real, una familia sólida, una familia conformada…

¿Tu papi ya no está?

No sé dónde está. Corté toda relación con él…

¿Pero sabes que vive?

Sí, sé cosas básicas por mis hermanos, pero hay cosas que prefiero no saber. Prefiero que se quede así…

¿Y él nunca ha querido acercarse a ti para de repente perdonarse, conversar?

No, no mucho. La verdad que es como alguien bastante soberbio. No creo que le sea tan fácil perdonar lo que pasó en ese momento y que yo me haya achorado de esa manera y haya tomado esa decisión, pero ahora yo estoy bien así. Estoy mejor así. Cuando era chica decía, como mis papás no se separan de una buena vez, porque vivir así es horrible…

¿Y no te gustaría que conozca a su nieta?

No, no creo que mi papá sea una persona que pueda ser una buena influencia o pueda traer algo bueno a mi hija. Prefiero que no. No necesariamente la sangre te obliga a sentir amor, a sentir respeto. La sangre no convierte a una persona en una buena persona. Yo siempre digo el árbol genealógico también se poda y también se le pueden ir agregando ramitas con gente que va apareciendo en tu vida y se convierte en tu familia y que realmente aportan, que te quieren y te traen cosas buenas…

ALEXANDRA HORLER PERDIÓ UN BEBÉ POR GOLPIZA

Tú me has hablado de este momento tan bonito, qué ha sido toda una emoción para tu vida, pero yo tenía entendido que tú habías perdido un bebé…

Sí, ese fue un momento. Tampoco fue planeado, se me chispoteó, es la verdad. Obviamente sabiendo que estaba embarazada quería tenerlo. En ese momento yo estaba con una persona que era sumamente problemática y se volvió agresivo y tuvimos una discusión, ahí me pegó, me sacó la mugre y al día siguiente yo amanecí sangrando. Había perdido al bebé. Siempre lo culpé, le dije tú tienes la culpa. Claro, si vas a agarrar a una mujer embarazada y la vas a empotrar contra la pared, la vas a tirar contra la cama y le vas a tirar cachetadas, la vas a arrastrar por las escaleras…

¿Te arrastró por las escaleras?

Sí y me dijo, todavía mientras me pegaba, me decía no te voy a tocar la carita, para que no te puedan decir nada y que tú no puedas decir nada…

AGRESOR DE ALEXANDRA HORLER ERA GERENTE DE LA U

Qué cobarde…

Y pasé por el médico legista y como no había lesiones graves, no implicaban más de 10 días de descanso médico. Sientes la impotencia de, claro me ha pasado esto, pero además me amenazó. Me dijo, si tú dices que por mi culpa perdiste a tu hijo, yo voy a destruir tu carrera, porque él era gerente deportivo de Universitario de Deportes.

Yo era periodista deportiva iba a cubrir a la U y así nos conocimos. Al principio era un príncipe no una maravilla y luego se transformó en lobo…

¿Y cuánto tiempo duró esa relación?

Estuvimos juntos como 6 meses creo. No mucho, porque ya después de un tiempo empezó él a cambiar. Pasaban cosas que eran bien raras, me decía me voy a ir a hacer la pedicure, un domingo a las 10 de la noche…

¿O sea, infiel te fue?

De todas maneras. Después lo descubrí. Un día que, fue el día que me pegó, porque agarré su celular, entré a los mensajes y dije ya, acá está y ahí fue que empezó el bolondrón y su reacción fue esa, sacarme la mugre. Le dije acá está, yo no había tocado tu celular antes, pero los mensajes han empezado a llegar en mi cara. Si ya los estoy viendo, ya no me voy a hacer la tonta, ya los estoy mirando. En esa época teníamos blackberry y aparecían todos esos mensajes. Entonces ahí me di cuenta de todo y cuando yo empecé a reclamarle, el otro se me fue encima…

Y tú haces la denuncia, vas al médico legista, ¿y qué pasó con el tipo, nada?

Nada. Se fue a vivir fuera. Lo que sí hubo fue que la noticia se corrió en el mundo deportivo y él terminó saliendo y yéndose del país.

Qué feo, qué mal. Pero al menos tú alzaste la voz, dejaste al descubierto a una persona que, no sé cómo decirlo…

Me costó, porque sí puse la denuncia, sí fui al médico legista, pero nunca dije nada. Me costó un tiempo sentirme preparada, fuerte para contarlo. Como no quería contarlo lo escribí. Fue como una forma de botar y cerrar ese ciclo. Entonces dije estoy afuera, esto ya pasó, ya se cerró y que no se repita nunca más…

¿Y con tu esposo? ¿Él sabe todos estos episodios que has tenido en tu vida?

Sí…

¿Y enamorarte de él ha sido fácil o lo tomaste con pinzas?

La verdad que me enamoré de él desde el primer día. Para mí fue mágico lo que pasó con mi esposo, nunca me había pasado algo así. Por eso nos casamos tan rápido. Nos conocimos en abril y nos casamos en diciembre. Hicimos una ceremonia acá también, chiquita. Estábamos en la época de pandemia, también tenía que ser chiquita y como soy la única hija de mi mamá, entonces me daba pena que solamente me viera casarme por zoom. Además como la situación con su familia en ese momento no era buena, yo decía qué hacemos celebrando con gente que realmente no está feliz, con que tú y yo nos casemos en ese momento. Porque ahora la situación es otra. Somos una familia unida, yo los quiero mucho, están siempre preocupados por mí, mi suegro me escribe todo el tiempo para saber si estoy bien, cada vez que me pasa algo va a la casa, mira que esté bien, me toma la presión cuando me he desmayado también.

ALEXANDRA HORLER Y ANTONIO PAVÓN

¿Pavón te pintó pajaritos?

Sí, pero con Pavón, es que por ejemplo he tenido problemas con mi esposo por lo de Pavón. Le decía cómo te puede causar algo lo de Pavón, si es algo que pasó hace 10 años. En verdad, no fue nada importante realmente…

Y aparte él lo dijo ahorita en ‘El valor de la verdad’…

Ya pues para que se sentó en ‘El valor de la verdad’, me trajo problemas con mi marido. Yo le decía, pero por qué te causa problemas, por qué te remueve la cabeza. Eso sí, primero ya lo sabías. Segundo, yo soy una persona pública, yo tengo un pasado, tú tienes un pasado y yo te acepté con tu pasado. Tú vienes con hijos y con una ex, tienes otras ex, pero tienes una ex que está ahí todo el tiempo y no es nada buena gente…

¿Te hace la vida cuadritos?

No me la hace a mí, porque no tengo ningún tipo de comunicación, pero sus actitudes no son buenas. Por ejemplo, él le contó que estaba embarazada y su respuesta fue me reservo mi opinión, en vez de decir que te vaya bien…

O decir mis hijos van a tener otra hermanita…

Pero por último pues, si no te cuadra al menos por cortesía, te deseo lo mejor, te felicito, total qué culpa tiene un bebé como para decir eso. ¿Qué te pasa? O sea, yo tengo que aceptarlo a él con su pasado.

Vienes con hijos, vienes con una ex que está ahí presente y que sí friega y hay problemas y hay cosas. Lo friega a él, porque yo no tengo ningún contacto con ella por teléfono. Nosotras no hablamos en lo más mínimo. Ahora yo no entiendo, por qué ella lo tomó así cuando se enteró que yo estaba con él, porque ella tiene una pareja hace muchísimos años, vive con otro. Entonces tranquilamente podíamos habernos conocido, de repente llevarnos bien.

Tenían como 5 años divorciados, ella tenía otra pareja. Ni siquiera era mi esposo. Cuando lo conocí le digo qué tal te llevas con ella. Me dice hubo periodos que me he llevado mal, pero ahora me llevo bien. Pero bastó que estuviera conmigo y se puso mal la cosa y como que también ella tiene mucho que ver con cosas que han pasado con los hijos. Ahora yo a los hijos les tengo muchísimo cariño…

¿Te llevas bien con sus hijos?

Trato de llevarme lo mejor que puedo, porque los chicos no tienen la culpa de nada…

¿Son adolescentes?

La mayor tiene 17 y el menor 12. Ellos no tienen la culpa de nada ni de lo que piense su mamá ni de lo que haga su mamá ni de lo que hagamos nosotros dos ni de los problemas que tengamos nosotros dos…

Los adultos, son los adultos, los niños son otra cosa…

El problema es que vienen de la otra casa, porque viven en la otra casa, con pensamientos de la otra casa. Esa parte es difícil, porque su mamá es su mamá. Es como que me veas a mí. Mi mamá es mi mamá, para mí mi mamá es todo, solamente que yo ya estoy grande, ya estoy cuajada y yo puedo ver y mirar a mi mamá y decirle estás mal, en esto estás mal. Pero cuando estás más chico lo que dice tu mamá es ley y le crees, todo lo que diga tu mamá y siempre te vas a pegar más a la mamá, sobre todo si vives con ella. Ellos pasan con nosotros, dos fines de semana al mes…

Y entonces a ver, retomando, ¿te hizo escena de celos tu esposo por eso, por lo de Pavón? Qué chistoso…

Sí, yo no lo podía creer le decía, pero esto ha pasado hace más de 10 años y el otro no, pero que pasó esto y se acordaba del otro y del otro y el otro y yo, pero qué tienes, lo que no fue en tu año no te hace daño. Además a mí no me conociste virgen. Todos venimos con una historia, todos tenemos una mochila cargando. Si yo te acepté a ti con tu paquete completo, tú acéptame a mí con mi paquete completo…

SUSPENDIERON DEL NOTICIERO A ALEXANDRA HORLER TRAS AMPAY CON PAVÓN

Él dijo que duró solo unos meses, cuatro o seis meses dijo y él pensaba que iba a ser serio, que no hubo tiempo para que te saque la vuelta. Sin vergüenza dije yo, Pavón…

Pero la verdad que se portó bien conmigo y yo sí sentía que me tenía mucho respeto. O sea, como que me veía diferente a las chicas con las que estaba… Él sabía que conmigo no iba a entrar en vainas como con las otras, conmigo era seriecito nomás. Conmigo no iba a hacer show, conmigo no iba a venir a hacerme la broma. Yo no vengo de hacer farándula, yo soy periodista y estoy conduciendo deportes y conduzco además el noticiero. O sea, acá es serio. Igualito cuando salió el ampay. Oye, Me suspendieron del noticiero…

Anda, no sabía eso…

Me suspendieron como tres días…

¿Por qué?

Porque era imagen del noticiero y tenía que ser seria. Pero cuál es el problema, si yo soy una mujer soltera

Y él ya había terminado también con Sheyla…

Estaba soltero, pero no, me suspendieron…

Tres días, ¿sin goce de haber?

No, sí me pagaron. Ya sería el colmo que no me pagaran, ya los iba a denunciar por qué razón me estaba suspendiendo, por qué salgo con alguien…

Magaly te ampayó, ¿no? Yo creo que si, Magaly fue. Pero no sabía que te habían suspendido y Pavón hablando todas estas cosas…

Yo decía, pero por qué me suspendían, no entiendo que había hecho mal. Había que mantener las formas. Pero ya pues, yo no tengo la culpa que haya alguien con un celular ni que esté haciendo una barbaridad, algo contra el pudor, pero nada que ver…

Ustedes estaban creo en un restaurante…

En una discoteca, pero para qué, fue en su momento. Para mí fue bien chocante. Él era de espectáculos, yo de noticias. Yo siempre he mantenido mi vida privada, bien privada y él hablaba y hablaba de nosotros. Yo terminaba el noticiero y venían las cámaras de los programas que trabajaban en el canal y me seguían, me tenía que ir por el ascensor de carga para que no me persigan. Yo le decía, yo no quiero declarar, yo no quiero hacer de esto un show le decía, tienes que dejar de hablar de lo que hacemos o no hacemos, pero él estaba ahí con Karen y con Tomate y eso fue una de las cosas que yo no aguanté. Yo dije no, a mí no me gustan esas cosas. Fue buena gente sí, se portó muy bien, pero yo no aguanto pulgas así, que dije no, esto no va a ir para más…

¿Y ahí quedó?

Sí, además yo soy una persona mucho más seria que él. Él tenía más juerga, más excesos…

Y Magaly en su momento, como que te dio también un poco duro cuando estabas con él, ¿no?

Sí, porque decía que yo quería buscar protagonismo, como que yo quería entrar a la farándula. Yo decía, pero si yo quisiera entrar a la farándula no sería periodista, me hubiera metido a un programa de espectáculos o me hubiera metido a un reality. En esa época era mucho más joven, yo siempre me he cuidado, he ido al gimnasio. Podía haber elegido entrar a un reality, pero eso no era lo mío. Yo amaba hacer deportes, era mi pasión y de ahí me dieron la oportunidad de hacer un noticiero y luego entró a ‘Yo soy kids’, que era un programa súper sano para la familia, a mí nunca me han visto hacer nada así…

ALEXANDRA HORLER Y EL MAIZ DE LOS FUTBOLISTAS

¿Y en tu trabajo, en el ambiente deportivo, porque tú empezaste haciendo deporte, habían bastantes futbolistas así tirándote maicito, queriéndote caer?

Cuando estaba más chibola sí, pero siempre me tuvieron cierto respeto no sé si, porque yo ponía cara de poto cuando los entrevistaba, muy así como que vamos a lo nuestro y de ahí no salimos. Conozco a varios, se hicieron mis patas, podíamos hablar, podíamos conversar, pero yo siempre puse límites, no pasemos este límite…

¿Pero te invitaban a salir o no?

Me han invitado a salir, pero a todos era no. Una cosa es mi trabajo y otra cosa es lo personal y si lo vamos a mezclar. Imagínate salir con alguien del canal o alguien de farándula era un show, un chongo, imagínate si salía con un futbolista. No. Ya no me iban a dejar vivir, entonces no. Eso sí traté de mantenerlo como que lejano.

¿Y te ha pasado alguna anécdota ahí en los camerinos, entrabas a los camerinos o no?

No, ya no porque cuando yo empecé ya no se podía entrar a los camerinos. Antes sí, antes de los partidos entrabas al camerino y a veces después del partido también. Pero cuando me tocó a mí, en esa época, ya no, ya me tocaba zona mixta, que es cuando salían todos y ahí yo los agarraba. Todos paraban a declarar, pero siempre, como es un ambiente muy machista, después te van a decir ah claro, a ti te dan entrevistas, porque te los gileas.

Eso me pasó cuando entrevisté a Farfán. Yo saqué un programa por YouTube que duró poco, porque la verdad era mucha chamba y ya no quería, pero claro todo el mundo empezó a decir mira se puso nervioso, mira cómo se mueve, que mira cómo repite a cada rato…

ALEXANDRA HORLER Y SU CHIQUITA A PELUCHÍN Y GIGI

¿Cuándo lo entrevistaste te dijeron todo eso en las redes?

Sí, lo sacaron también en el programa de Rodrigo y de Gigi y decía, no me acuerdo qué palabras repetía él, Jefferson, una y otra vez…

¿Obviamente?

Sí, obviamente, no paraba de repetir el obviamente, pero cada uno puede tener una muletilla. Y movía los pies y estaba así. Ah mira se puso nervioso y después seguro se fueron al córner. Si fuera hombre el que le estaba haciendo la entrevista, no estarían hablando así, pero como soy mujer entonces se pierde el respeto y piensan que aquí hay algo más o que me está dando la entrevista, porque él no daba entrevistas, eso sí es verdad, no daba entrevistas…

Son contadas las entrevistas que él ha dado…

Y a mí me ha dado dos exclusivas, como que empezaron por ahí y nada que ver. Era simplemente un tema, que de repente se ponía nervioso, no sé, pero él nunca me ha invitado a salir. Nunca, no, nada, nos veíamos, nos saludábamos, nos llevábamos bien, por ahí oye feliz cumpleaños, porque somos más o menos de la misma fecha, los dos somos de octubre. Pero nada más, nunca me ha invitado a salir…

¿Dónde fueron las entrevistas? No me acuerdo…

En su casa. La primera en el departamento que tenía en Miraflores y la segunda en su casa, en La Molina…

¿La que tiene el búnker abajo?

Sí, pero no lo conocí. Yo no sé dónde está ese búnker ni pregunté por el búnker, porque dije basta que pregunte y me diga vamos a ver el búnker, para qué después la gente diga que me quedé en el búnker. Así que no me interesa saber nada del búnker, ahí nomás…

ALEXANDRA HORLER Y EL LOCO VARGAS

¿Los futbolistas?

Gente que hace su trabaj,o con la que yo hacía mi trabajo. Algunos buena persona, otros joyones, unos complicados, unos alucinados…

¿Quién se alucinaba?

Bueno, la verdad no se han portado muy mal conmigo, pero me acuerdo una vez Juan Manuel Vargas, en la Videna, cuando todavía podías entrar por los camerinos y yo como que le quería hacer una entrevista, me miró, pasó y se fue de largo…

ALEXANDRA HORLER Y CUEVA

¿Y jollón, Cueva?

Bueno, Cueva es un jollón, ya lo sabía. Yo por ejemplo, siempre mantuve una relación muy distante con Cueva, era entrevistarlo y se acabó. En algún momento de repente quiso fregar, pero no había espacio para eso, porque yo siempre estaba en el espacio de trabajo.

Ahora, no te voy a negar que en algún momento he tenido amigos que son futbolistas, no voy a decir los nombres, y hemos salido, hemos ido a parrillas, donde yo he visto muchas cosas. No las puedo contar ni las voy a contar, porque al fin y al cabo eran mis patas, algunos eran personas que yo conocía de antes de entrar al fútbol, por eso eran mis patas, y me decían oye hay está parrilla, hay esto…

Eran famosas esas parrillas…

Sí, a veces eran chéveres, porque eran con amigos que no eran del fútbol y eran con los amigos, las parejas, todo. Pero también había las parrillas que a veces llegaban las malcriadas y ahí yo me iba. Yo decía no se confundan, acá yo no me mezclo, yo me voy. Pero sí he visto un montón de cosas…

Lo de Cueva es una cosa que, Dios mío, a todo el mundo le escribía, ¿no?

Conmigo no se metió…

ALEXANDRA HORLER DESTRUYE A PAMELA LÓPEZ

Qué bueno. Cuevita ahora está en Ecuador, a mí lo que me llama la atención de Cueva es que es un talentazo, nadie lo puede negar…

A mí me da mucha pena que lo haya desperdiciado, pero sabes que ahí también tiene que ver la mujer, porque ella puede decir de todo, todos podemos decir pobrecita le sacaban la vuelta, pero ella lo sabía desde hace muchos años. Ella ha vivido esa vida desordenada, esa vida de excesos con él y ha permitido que él tenga esa vida de excesos. Entonces si yo veo a mi marido que tiene una carrera y tiene una carrera exitosa, porque mi marido tiene una carrera exitosa, yo admiro a mi marido, no tienes idea y creo que si no hubiera esa admiración, no estaría tan enamorada de él, pero si yo veo a mi marido y lo admiro y sé que tiene una carrera exitosa y puede llegar a más, le digo oye un momentito, que estás haciendo con tu vida. Yo no te voy a permitir que estés llegando borracho, que estés de juerga en juerga y yo te voy a acompañar después de juerga y voy a dejar que hagas escándalos en la calle, que estés haciendo la pichi en la calle, cosas así. No te voy a permitir eso, pero ahí se lo han permitido…

Claro. Pamela López decía que eso era un tema de dependencia emocional que ella tenía…

Puede ser. Yo puedo entenderlo, pero cuando tú realmente quieres a alguien, no solo es la dependencia emocional, porque ya me sacó la vuelta, pero como dependo emocionalmente de él lo perdono, sino que ella haya visto que estaba tirando su carrera al tacho y haya sido cómplice prácticamente de eso también.

La mujer que te ama, la mujer que te quiere y que te quiere bien, ve que estás tirando tu carrera por la borda te dice no, eso está mal y ahí ya la dependencia emocional no tiene tanto que ver. Ahí ya es ser tú cómplice. La dependencia emocional la entiendo, en el tema de que si él la gritaba, la trataba mal, le sacaba la vuelta, que si le pegó o no le pegó, ahí entiendo la dependencia emocional.

Pero una mujer o sea cuando son pareja, son equipo. Tú no puedes estar mirando que tu esposo se esté yendo al hoyo y tú dejar que se vaya al hoyo y acompañarlo al hoyo. En algún momento, así como de repente a él le va a tocar tratar de levantarla, estás tú, tienes que tratar de levantarlo y decirle estás haciendo algo incorrecto, porque para tu carrera es incorrecto. Tú no puedes estar tomando donde sea, no puedes dejar de ir a tus entrenamientos, no puedes aparecerte cuando quieras, no puedes tener esos excesos, porque tú vives de tu cuerpo, tienes que cuidar tu físico, tienes que cuidarte…

¿Y tú crees que esta nueva faceta que tiene, en Ecuador, y con esta nueva pareja que tiene, que es Pamela Franco, puede haber un cambio en él?

Yo creo que estar en Ecuador le va a servir. Yo creo que estar acá no le hace bien, porque los problemas que tiene eran siempre que venía acá y se regresaba a Brasil, pero se regresaba tarde, iba cuando quería, llegaba tarde a los entrenamientos y poco a poco vas perdiendo la disciplina y el amor por lo que haces. Yo creo que si uno no ama lo que hace, no se apasiona por lo que hace, no lo vas a hacer bien…

¿Alguna vez Roberto Martínez te quiso caer?

No lo conozco o me lo habré cruzado de repente alguna vez, pero nunca he tenido conversación con él. Qué loco, no lo había escuchado. He escuchado mil rumores sobre mí, el pisa pelota me tenía podrida, pero Roberto Martínez nunca. No lo conozco ni en mi radar estaba…

ALEXANDRA HOLER EN LATINA

¿Hay mucha envidia, de repente celo, en la televisión con las otras colegas, cuando eras conductora de TV?

Mira, siempre me lo dijeron. Nunca le presté atención, porque era como que cada una hace su trabajo y eso de querer apagar a la otra, hablar mal de la gente a mí me chocó mucho. Por ejemplo, cuando empecé en el cable, que era Movistar Deportes, después me fui al canal del Estado que era un poco más cerrado, pero donde había muchas ideas, discriminación también, que a mí me veían como que a la gringuita que viene acá, y no sé qué. Ya luego pasé a Latina y me di cuenta lo que significaba trabajar en señal abierta, ahí los cuchillos volaban. Yo me enteraba de cosas que decían, pero por qué yo, pensé que era mi amigo, mi amiga. Aprendí a convivir con eso

¿Y en el camerino cómo hacían? Porque se encontraban en el camerino muchas veces, maquillándose…

Ah nos tratábamos regio. En algún momento tuve un problema con una, que ella estaba haciendo el noticiero y la sacaron del noticiero y yo anunció que iba a hacer el noticiero y se molestó. Yo pensé que ya le habían dicho. Cómo manejaba las cosas el canal no es mi culpa. Si voy a empezar un programa nuevo lo anuncio por redes sociales, no es mi culpa que no la hayan informado a ella primero, que ya no va a estar en el noticiero y que me hayan dicho a mí que yo voy a estar en el noticiero, no es mi culpa…

¿Qué es lo peor que han dicho en esos rumores de ti?

Lo peor que me han dicho, cuando yo estaba en Latina era que yo me metía con el gerente de Latina y yo había pisado esa oficina tres veces. Cuando me contrataron, cuando fui a pedir un aumento y después una vez no sé por qué, no lo había visto más. Decían por qué me daban tantos programas, porque empecé con un bloquecito deportivo y el bloquecito deportivo pasé a tener el noticiero y tener el bloque deportivo más el noticiero y después, porque pasé a tener ‘Yo soy kids’. Tres programas, entonces escuche rumores que decían que yo me había metido con el gerente…

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