Ruby Palomino nació en Huancayo y creció entre huaynos, santiagos y mulizas. Sin embargo, el género que la dio a conocer fue el rock, al ganar ‘La Voz Perú’ 2015 con su versión de ‘Cholo soy’.
Ruby Palomino es hija de dos destacados cantantes huancaínos (Polo Palomino, integrante del ‘Dúo Mixto Huancayo’, y Gloria Ramos, más conocida como ‘La Princesa del Perú’) y está lista para lanzar su primer disco.
“Acabo de sacar mi disco, ‘Chola soy... ¡y qué!’, donde la mayoría son temas peruanos llevados a la fusión rock. En valses está ‘Cuando llora mi guitarra’, ‘Bello durmiente’ de Chabuca Granda, el ‘Cholo soy’. En festejo ‘Toro Mata’, en huayno tengo ‘Valicha’, ‘Adiós pueblo de Ayacucho’ y ‘Caminito de Huancayo’. Después tengo cumbias como ‘Muchachita no seas celosa’ de ‘Los Destellos’, ‘Cervecero’ de Armonía 10 y ‘El Aguajal’”, dice Ruby.
“Hay algunas personas a las que de pronto les sorprende (que cante rock) porque he nacido escuchando folclore, por mis padres, pero en la adolescencia empecé a descubrir todo el mundo del rock”, agrega Ruby Palomino.
No has perdido tus raíces...
No, mira, voy bastante a los colegios por mis presentaciones y me doy cuenta de lo poco que les importa a las autoridades de nuestro país, la juventud, lo que es triste porque es el futuro. Un país que no tiene cultura, que no tiene identidad, no tiene nada. No solo podemos sentirnos orgullosos de nuestro Machu Picchu o de la comida, deberíamos empezar a sentirnos orgullosos de nuestra música y raza. Mis papás nunca me obligaron a escuchar un huayno o me decían ‘ama a tu tierra, ama tus tradiciones’. Nunca me impusieron nada, uno va aprendiendo de lo que ve, del ejemplo y de esa manera es que aprendí a querer nuestra cultura. Yo estudio Psicología y me interesa bastante ligar mi música a la educación.
¿Qué sientes cuando cantas ‘Cholo soy’?
Al cantarla, cada palabra la siento en el alma porque es parte de nuestra historia. Cuando yo tenía más o menos 8 años cantaba huaynitos en el colegio y alguien me dijo: ‘Ahí está la serrana’. Ese día llegué a mi casa llorando y mi mamá me respondió: ‘Si quieres sentirte avergonzada de lo que eres, ese día es como si me estuvieras matando’. Entonces, siempre he relacionado el amor a mi cultura, a mi patria, con el amor a mi madre. Nunca volverá a existir en mí eso de sentirme mal, por eso mi disco se llama: ‘Chola soy... ¡y qué!’.