Patricia Alquinta reaparece en la farándula. La recordada actriz de ‘Risas y Salsa’ y de varias producciones en Estados Unidos se confiesa en Café con la Chevez y hace un repaso a su trayectoria.

En la charla, Patricia Alquinta recuerda su íntima amistad con Roxana Ávalos, la recordada ‘Guardia Serafina’, con quien estuvo hasta el final de sus días. Además, cuenta cómo fue trabajar en Telemundo con su personaje de ‘La Gata’.

Finalmente, la recordada actriz cómica revela lo duro que fue trabajar en una telenovela en Estados Unidos, su incursión en el programa de Don Francisco y más.

Patty Alquinta en Café con la Chevez: Sus mejores anécdotas (Foto: Trome)
Patty Alquinta en Café con la Chevez: Sus mejores anécdotas (Foto: Trome)

Empezaste en Risas y Salsa...

Voy a reconocer que en ‘Risas’ éramos lo que dábamos el mayor rating, pero éramos el patito feo del canal. Éramos los de comedia, siempre se les ha atribuido que son los que tienen menos cultura, más vulgares, más fáciles. Siempre ha habido esa discriminación contra los que hacen comedida. La comedia es lo más difícil.

Fue el programa más visto...los convirtieron en estrellas, pero te chancaban por tus brazos.

Mi familia es brazona. Es familiar, es un sello de los Valdiviezo. En esa época no me daba cuenta de que era ‘brazona’. Todas éramos naturales, nunca me di cuenta. Cuando empezó ‘Las vecinas de Huaycán , teníamos que ponernos chapas. Roxana era la ‘chibolera’. A mí me buscaban y no sabían que decirme.

¿Qué pasó?

Mis dos primeras chapas que me hizo Manolo fueron ‘Tú o nadie’, tienes la cara de Lucía Méndez y los brazos de Andrés García y me dijeron ‘Mi bella genio’, porque tus brazos no entran en la botella. Hicimos un grupo bien bonito.

Hacían buen rating...

Nosotros llegamos a hacer 60 puntos. Lo máximo que hicimos fue 67 o 68, fue cuando tocamos chicha. Nosotros no tocábamos chicha, pero un día Javier Santagadea dijo que traigamos Pintura Roja, era chicha dura. Santagadea imitaba a Chacalón, vinieron todos al programa. Hicimos 68 de rating, la chicha nos puso ahí. Subimos a dos horas y pasamos a hacer música del pueblo, antes era solo salsa.

Cómo fue cuando pasaron a América...

Lloramos. No nos podíamos quejar, económicamente, profesionalmente, nos trataron muy bien. Panamericana nos trató como una zapatilla. Al margen de eso, habíamos estado como 20 años en Panamericana. Cuando hicimos el contrato, Guille llamó un grupo pequeño para decirles que se iba y si lo seguían. Roxana, Ricky, le dijeron que sí yo dije ‘no sé'. Se llevó hasta el que barría.

Yo he trabajado en Risas y no me di cuenta de que éramos unas personas que la gente miraba todos los sábados, era un privilegio trabajar con ellos, con Chuiman, Ricardo, Jesús Morales, Analhí. Lo debo reconocer.

Hiciste una amistad con Roxana.

Éramos ‘Blanco y negro’, ella en la calle mataperreando y yo en mi casa. Yo creo que la amistad es cuando te complementas con otra persona, pueden no gustarles lo mismo.

Te defendía...

Sí, yo no le tengo miedo a la muerte, tengo miedo a la forma de morir. Cuando nació mi nieta, dije que ahora podía ‘irme tranquila’. Mi hija tiene su familia. Creo en los ángeles y en la reencarnación. Sé que voy a encontrar a Roxana allá. Roxana, Ricky, Guille, de alguna forma se me han presentado.

¿Así?

El día que Roxana fallece, estaba hablando con mi mamá. Le estaba diciendo que ‘se me iba’. Se metió una paloma, contra mí, estaba con el teléfono. Mi mamá me dice ‘tranquilízate, se está despidiendo’. Cuelgo y me llama su hermana, me dijo que Roxana quería hablar conmigo y que recogiera a su mamá. Entramos al hospital, corrí, subí pero no la vi. Nunca la vi muerta. Con Oscar Saldarriaga la cambiamos, pero su rostro no lo vi. Durante los ensayos de la Teletón de ese año me dijeron que ella se había despedido en forma de paloma. Esa paloma se quedó en mi casa hasta el 31 de octubre. El día que su mamá hizo una misa me entregó un dije que ella me había dejado, tenía la forma del espíritu santo.

“Hoy miraba Risas y Salsa… y pensaba Ricky Tosso hoy es tu birthday cuantos años de amistad, cariño, amor, cuantas anécdotas vividas", escribió Patricia Alcántara en su red social. (Instagram: @patriciaalquintaoficial)
“Hoy miraba Risas y Salsa… y pensaba Ricky Tosso hoy es tu birthday cuantos años de amistad, cariño, amor, cuantas anécdotas vividas", escribió Patricia Alcántara en su red social. (Instagram: @patriciaalquintaoficial)

¿Cómo es tu tipo de hombre?

Quiero a alguien emocionalmente estable, económicamente estable, profesionalmente estable, que tenga mi edad y que no tengan hijos chicos. Quiero alguien que me entienda, soy una niña grande, a mí me tienes que engreír. Yo no soy sexy, me gustan mi pijama de peluche, yo no he crecido en ese etapa. El papá de mi hija siempre compraba ropa sexy, cuando me separé fui quien yo quería. Hasta hace siete meses no quería a nadie, ahora sí.

Fuiste instructora de Gym ¿La viste a JLo?

Sí ella iba, pero no podíamos tomar fotos. Una cosa que me enseñó Guille fue que si la Miss Universo se para al lado mío, yo soy más bonita que ella. JLo es un poquito más bajita que yo, con una piel espectacular, se cuida mucho. Pero ha bajado mucho de peso.

¿A qué edad te vas a Estados Unidos?

Edad, no sé. Nunca decidía lo qué tenía que hacer, siempre lo conversaba. Cuando me llamaron de Telemundo para lo de ‘La Gata’, no lo conversé, lo asumí y me fui. Me fui primero yo y, a los meses, él vino con mi hija.

Fuiste espectacular con ‘La Gata’

Llegué un lunes y el miércoles a la alfombra morada a unos premios. Me acuerdo que me tuve que comprar un vestido de 800 dólares. Entrevisté a Ricky Martin, a Emilio Estefan. A lo lejos vi a Gian Marco. Dejé todo y me fui a entrevistar a Gian Marco, él era x, la entrevista nunca salió.

Te fuiste a Telemundo porque te hicieron la oferta ¿A través de quién?

De Luis Sinchez, en esa época había ido al mundial. Me dijo que tenía un programa allá y quería que los entreviste de ‘Gata’. Cuando regresé, le llamó la atención que fuera tan versátil, le gustó. Me ofrecieron un programa en Panamericana pero me fui.

¿Cómo entraste a Don Francisco?

Cuando tuve el problema en Telemundo.

Patricia Alquinta retornó en el 2010 a las pantallas nacionales con el programa ‘Desde Miami’, y participó en la telenovela ‘Perro amor’. Más adelante, en el 2012 fue integrante del elenco de la telenovela ‘Corazón Valiente’ de Telemundo.
Patricia Alquinta retornó en el 2010 a las pantallas nacionales con el programa ‘Desde Miami’, y participó en la telenovela ‘Perro amor’. Más adelante, en el 2012 fue integrante del elenco de la telenovela ‘Corazón Valiente’ de Telemundo.

¿Te sacan?

Me sacan, no me dejan trabajar. Yo tenía un contrato y no podía pisar el set, podía pisar afuera.

¿Quién no te deja trabajar?

Yo era una pulga dentro de un San bernardo.

¿Laura Bozzo?

Sí, pero la vida te enseña a que si tu asimilas las cosas de que si algo mejor viene. Me acuerdo que Mávila Huertas me fue a entrevistar, me esperaba afuera y tuve que salir por la parte de atrás, porque ese día me había pasado eso. No sabía que decirle, que había pasado un escándalo porque lo acaba de escuchar. Amiga, yo lo escuché, a mí no me lo contaron.

¿Tú la escuchaste decir de su boca?

Por supuesto. Yo estaba en una oficina con alguien muy importante y me dijo ¿Tú tienes algún problema con ella? Dije que no, éramos vecinas de barrio. Cuando llegó al canal, Guille, Roxana y yo éramos quienes la llevabamos para que esté con la gente. Yo entiendo, además, que cuando eres la persona más importante de un canal extranjero y estás que no puedes ir y que el mundo se te cae, actuas de mala forma. La llamaron, no dije que estaba ahí ni que era su amiga. Nunca dije nada. Escuché lo que jamás pensé escuchar en mi vida. Me dijeron que no había forma, yo grababa pero no podía entrar al set. Fui muy dificil.

Qué tedioso, feo...

En ese momento entendí que no quería que se me cerraran las puertas, ahora no lo veo igual, hubiera peleado. En ese tiempo, me dijeron siéntate donde don Francisco, háblalo y vas a ser millonaria. No lo quise hacer.

Claro...

Fui a Univisión para trabajar con Don Francisco. Yo tengo un medio hermano ‘El gato’ Alquinta. Don Francisco escuchó y preguntó si era chilena, le dije que no. Me dijo que empezara a grabar. Siento que cuando tú eres correcta la vida te recompensa. Puedo estar de rodillas, pero sé que la vida me va a recompensar.

¿Don Francisco era chévere?

Yo no lo vi mucho porque en ese tiempo había tenido un problema con una de las modelos. Él ya no tenía acceso a la parte de la comedia. Grabamos un montón y los cuatro programas los terminabas en un día.

¿Más que en América TV?

Habían categorías. En un día hacíamos lo de un mes.

¿Más de 30 mil?

Sí, los caps eran repartidos entre Chile y Perú. Era más conocida en Chile, me sacaban poco en Miami. Allí estuve un año. Ya no quería seguir porque nadie me veía, quería crecer allá.

¿En ese tiempo ya estabas con el papá de tu hija? ¿Te separaste?

Fiue lo mejor que me pudo pasar. Lo mejor que te puede pasar es abrir los ojos. La tipa me llamó, me insultó. Antes, le había dicho, la primera que haces no tienes opción a reclamo. Mi familia se enteró al año, mi vida personal no la ventilo.

¿Cómo te enteraste?

Me llegó un recibo y eran como 800 dólares. Revisé el recibo, mi hija me dijo que no era de ella. Yo jamás le reviso el celular a alguien, no le pregunto. Él sabrá lo que hace. Cuando sientas que la vas a fregar, le avisas y todo bien.

¿Esa fue la única vez?

No, mi segunda relación de ocho años, fui a terapia. Fui el amor de su vida. Siento que como me amó ese hombre, no me va a amar nadie más. Conmigo fue algo diferente.

¿No te casaste con él?

Soy reacia a eso, siento que viví tantos años con alguien, ya viví sola que me cuesta mucho. Él se equivocó, permitió todo. 8 años en su casa y yo en la mía, él debió marcar. Devolví el anillo, porque yo terminé el compromiso. Cuando tú terminas el compromiso, lo honesto es que tú devuelvas el anillo.

Hay personas que no devuelven...

Legalmente ye hacen hasta juicios por eso. El compromiso es entre tú y yo. Tú me das un anillo por el compromiso. Si yo rompo el compromiso, yo te lo tengo que dar. Si tú rompes el compromiso, yo me quedo con mi anillo. Sí estamos de mutuo acuerdo, vendemos el anillo. Por lo menos así es allá. Y todo es con abogados porque cuesta de 20 (mil) para arriba.

Se lo devolviste...

Él me regaló un simbólico uno negro de titanio, porque su rodilla era de titanio por una cirugía. Yo siempre usaba ese, lo he usado después de eso. la última vez, lo lancé al mar. Después de que quiso volver, me contó que se iba a comprometer. Él perdió su tiempo conmigo, era mi karma. Lo saqué y lo lancé al mar.

¿Eres de good time?

No, cuando no tengo pareja no lo tengo de ninguna forma, aparte soy alérgica al latex. Me cuido y tengo tantos pretextos. Esa persona tiene que ir al médico y enseñarme. Mis relaciones son largas. Mi mamá de 80 años me regaló algo y lo estoy usando...

Tu juguete...

Mi mamá y mi hermana me regalaron. Yo nunca había usado, a la vejez.

¿Cómo así?

Se lo encontré a mi mamá. Ella tiene 80. En su casa, abrí un cajón y vi unas cosqs ahí, vi varios juguetes. A mis 50 años, la llamé a mi hermana y me pidió que le tome fotos. Mi hermana me dijo ‘Mi mamá está loca’. Mi mamá baila, canta, toma, ella es una niña grande. Mi mamá me regaló una cosa parecida y mi hermana también. Por algo pasan las cosas, soy alérgica al látex y soy muy egoísta conmigo.

¿Los futbolistas te escriben?

Me escriben pero yo puedo ser la mamá, no jodan. Mi hija tiene 35. Me escribe mucha gente pero no miro. Si la gente de trabajo me busca, me van a pedir mi WhatsApp.

Los besos que te robaba Manolo Rojas en Las vecinas...

Me robaba cuando estaba separada, o me peleaba si no, jamás. Una vez me robó porque estaba de pleito y el papá de mi hija se acordó toda su vida de eso. Ahora sí lo beso en el escenario. Estamos en otra etapa.

Patricia Alquinta y Manolo Rojas.
Patricia Alquinta y Manolo Rojas.

¿Te acuerdas de la primera telenovela?

En Telemundo hice ‘El cuerpo del deseo’ con Mario Cimarro. Todos eran técnicos peruanos. Me pusieron de secretaria, nunca me olivar que la prensa me trató lindo. Una vez en la pizarra pusieron todos los recortes de periódicos eran míos. El Cimarro una vez me dijo ‘¡Vaya! Mira tú, la secretaria es la famosa’ No le dije nada, era bello. Me dijeron que no le hable y no le pida foto. Después me pidió una foto porque me estaba tomando fotos con los camarógrafos y él entro y me dijo ‘¿Conmigo no hay foto?’.

Con Ponce también hiciste...

Con Ponce solo fueron 10 capítulos. Después trabajé en ‘Las dos caras de Ana’, estuve desde el inicio hasta el final pero muy duro con Lucero Suárez, todos eran mexicanos. Miguel Durán me dijo que tenía perfiles para dos personajes: la amiga de la antagónica y la empleada. Yo quería la amiga, más linda. No, me dijo. Porque la empleada iba a estar a la final de la novela y en la casa de los galanes. No iba a usar ropa de empleada, iba a usar un jeancito.

Estabas power...

Nunca me voy a olvidar que la protagonista (Ana Layevska), tremenda actriz de Hollywood. Ella toda flaquita, doblada. Yo llegué, error mío, entacada, con mi jean y mi top. La producción de México nunca me había visto. “¿A qué hora llega Elena?“, decían. “Yo soy Elena”, respondí. Lucero Suárez me miró y me acuerdo que llamó a Amaya, y los demás actores. “Quién es ella en la novela”, dijo. “La protagonista, la sexy”, decían. “No, ella es la empleada, ella es la que te va a limpiar”, respondió. Yo dije ya me fregué. Me llamó, me sentó a un lado y sin asco delante de todos me dijo: “Tu cara no me gusta, tu cuerpo no me gusta, tu color de piel no me gusta. Tú no me gustas. Yo no te elegí, para mí la clásica empleada de Méxica es chatita, trigueña, bajita, bonachona. no me gustas. Vamos a hacer un trato, tú te equivocas y te vas”. Yo miraba y dije, ‘Está bien, me equivoco y me voy’. Yo llegaba a las 7 y se sentaba conmigo a repasar toda la letra. Yo no era de México y no tenía su escuela. Todos los días de esa novela de siete meses, iba a antes de la hora. Me enseñó a llorar todos los días. Al final me dijo que le gustaría volver a trabajar conmigo. en todas las escenas me salía con la cara lavada, me pasaba el tisú en la cara. Esas experiencias no me las quita nadie.

MÁS INFORMACIÓN:

Contenido sugerido

Contenido GEC