Robert Muñoz, el líder de ‘Clavito y su Chela’, es el nuevo invitado de ‘Café con la Chevez’. El cantante cuenta detalles inéditos de sus inicios en la música, su paso por la Policía Nacional del Perú y su dura etapa en la pandemia donde tuvo que convertirse en un ‘1000 oficios’ en Estados Unidos, para salir adelante.
En esta conversación íntima, Robert Muñoz detalla que trabajó cortando el cabello y haciendo mantenimiento a casas luego de que se quedara en Estados Unidos cuando cerraron las fronteras de los países por la pandemia.
Asimismo, ‘Clavito’ rompe su silencio sobre la muerte de la bailarina Grace Laura, quien fuera su pareja, y sobre sus planes de boda con Andrea Fonseca, la madre de sus últimas hijas. El café está servido.
¿La pandemia te cambio la vida?
Sí, nosotros fuimos de vacaciones, yo venía de una campaña, estaba postulando para el Congreso y Andreita estaba empujando el coche. Eso satura, Andreita estaba muy estreasada y yo también. Yo siempre le decía ‘amor, terminando esto te prometo que nos vamos de vacaciones’. Terminó la campaña y al margen de ganar o no, teníamos que cumplir la promesa. Me dijo, vámonos a EE.UU. o a Cancún o a Miami y Andreita decidió irnos a Miami, sin contar que la pandemia ya estaba encima. Pero a vez yo tenía presentaciones pactadas en Los Ángeles, que era para el otro lado, para el lado del Pacífico, eso iba ser para abril y mayo. Entonces podíamos hacer coincidir las vacaciones con las presentaciones, además aprovechar que estábamos en Los Ángeles para grabar.
Iban a regresar...
La idea era regresar en mayo mismos artistas internacionales con la producción de Los Ángeles, pero Dios cambió los planes totalmente. Apenas llegué la primera semana de marzo, el 5 de marzo, para la segunda, estaba con mi promoción un oficial de la Policía, que era el que nos recibió en Filadelfia, estábamos tomando unas cervecitas y me dice ‘hay una mala noticia, acaban de cerrar el aeropuerto de Perú, pero creo que lo van a abrir rápido, sabes cuántos millones están invertidos en los aeropuertos y líneas abiertas, Estados Unidos va presionar y seguro lo abren en tres días’. Seguimos tomando porque tenía sentido lo que decía. Pasó una semana, dos, tres, un mes y ya me asusté. Yo cometo dos errores, teníamos una parte de la plata, justo íbamos a renovar el bus de Clavito, igual nuestra camioneta porque en la campaña viajamos mucho, tenían mucho kilometraje recorrido. Lo íbamos vender para renovar para que apenas volvamos tengamos nueva imagen. Dios sabe por qué hace las cosas porque si me hubiese agarrado sin dinero de la venta del bus, de la camioneta, quizá no hubiese durado un mes. Mis ahorros eran para 15 días de vacaciones y gastos por ahí. No trabajamos año y medio, casi se fueron la mitad de todo, más de 100 mil dólares. Aún quedaba pero para racionar porque ya como se iban pasando los gastos, austeridad total. Eso aprendí cuando era chiquito, vivíamos con muchas limitaciones, sin agua, sin luz, pero Andreita no, ella tenía sus comodidades, ella es de Pueblo Libre, era chocante para ella.
Yo ya había viajado allá, sé cuanto vale un cuarto, también sé que cuando estás mucho tiempo de cobijado, pidiéndole favor a la familia, al tercer día te van hacer a un costado y antes que nos hagan a un costado hay que afrontar. A Andreita le tocó vivir una vida austera, se acabó el shopping, vamos a alquilar un cuarto, vivir apretaditos, no como en Perú pero trataremos de acercanos lo más que se pueda.
¿Fue un cuarto?
Sí, un cuartito. Cuando vivimos en Los Ángeles vivíamos en un cuartito con baño y como era una amiga nos cobraba cómodo pero tampoco tanto. En Estados Unidos un cuartito está 800 dólares, y eso sí se siente cuando el dinero es de acá. La amiga nos cobraba 600 dólares y aún así ya estábamos sintiendo la pegada porque igual había que pagar y afrontar, el alimento y otras cosas... Dijimos vamos a mudarnos porque no se sentían bien con nuestra presencia ahí, lo notamos, mi amiga muy sutil, era fan de Clavito, pero había otro entorno que era su pareja y la pareja no estaba bien y para evitar llevarles conflicto, nos fuimos. Y así hemos pasado tipo errantes, nos hemos mudado como 5 veces y siempre con ciertas limitaciones. A donde hemos ido no nos han tratado mal, pero había que afrontar alquiler. Al final llegamos a como una oficina rodante, como como dormitorio rodante, sino una oficina rodante donde no había luz, tenía un motor para adaptarle la energía, no había agua, tuve que adaptar los caños para hacer una ducha portátil, una vida extrema, pero lo bonito que Andreita estaba ahí, sufriendo a la par de las consecuencias de la pandemia pero siempre apoyándome. Llegamos a vivir ahí casi como medio año, eso lo quiso de cariño mi amigo Víctor Quiñones, nos apoyó, nos cobraba algo simbólico, lo hizo con mucho cariño y eso es lo que vale.
¿Has trabajado hasta de barbero?
Nos pasamos a comprar un trailer de vivienda. Ahí sí ya estuvimos un poquito más charlies. Dentro de la tristeza y la pobreza. Había que aprender a ahorrar para distribuir mejor, eso también me enseñó la pandemia. De haber estado en un top... nos habíamos olvidado de ahorrar. Ahí aprendimos otra lección de vida, el dinero lo puedes tener y si no lo sabes cautelar puedes desaparecer, ese era mi miedo porque tenía familia, esposa, hijas y no pueden estar con esa incomodidad. La salud empezó a fallar, el Covid y todo eso, había que cuidar la economía y la salud. Siempre andábamos con nuestra Biblia. Fueron momentos difíciles.
Tú antes habías estado en Estados Unidos de más joven y también la sufriste
Sí, pero no tanto.
También tu salud pasó por un tema duro. Te extirparon un tumor en Estados Unidos en la pandemia
Se junto todo, en cuanto a salud, primero nos dio Covid a los 3, yo el más afectado, quizá por la edad. Una enfermera peruana que está allá y es farmacéutica, Milagritos se llama, la conocí en un restaurante de unas amigas y se ofrece, porque escuchó que estaba mal con Covid, se acercó ella y fue a mi casa. Yo estaba cada vez peor. Llegó a mi casa con medicamentos, inyecciones y comencé a recuperarme, quizá demoré una semana de tratamientos diarios y luego ya estuve mejor. Cuando quise pagarle me dijo ‘no, no te preocupes, no me debes nada’ y me quebró peor, me sentó muy agradecido con ella, a ella le debo la vida. Luego vino la diabetes, el tumor, yo no sé que tenía un tumor, pensé que era joroba, herencia de mi abuelito, pero de pronto mis brazos se empezaron a adormecer fuerte en las noches.
Fui a una clínica en Wayoming y me detectaron el tumor y tenía que operarme. Los gringos son directos, no se andan con rodeos, no le quise decir nada a Andrea y me operaron. Se venía una tras otra con lo de la salud, no me dejaba reaccionar, hacer algo, invertir, pero a la vez yo trataba de trabajar, tenía amigos empresarios que me llamaban para trabajar. No llegué a lavar platos. Cuando llego a Filadelfia, a la casa de promo, él hacía mantenimiento de casas, pero no me quería cobrar ni un sol del arriendo, yo me sentía mal cuando fueron pasando los meses. Le dije que me dejara hacer algo, déjame ir contigo, pero estaba desactualizado. Ahí volví a recordar las labores que hacía de chibolo, de construcción. Él hacía refacciones de paredes, pintado, macillados, roofing, un poco de vidrios, ventanas, jardines. Yo sabía de electricidad, porque estudié electrónica, me adecué a la parte electrónica. La chamba también era de jardinería, allá son casas grandotas. Nunca me sentí oprimido, pero me costaba hacer el trabajo porque no estaba en forma.
¿Cómo fue que empezaste a cortar cabello?
Yo vengo de la escuela de estilistas de ‘te lo digo con el taco’, de Koki Belaúnde. Como era pandemia, todos estaban barbudos y con el cabello largo, los gringos también. Mi promo me dice ‘vamos a cortarnos el cabello, pero nada está abierto’. Así empezó la historia de la peluquería. Un día estábamos tomando una cerveza y mi promo me dijo que tenía una máquina. Y yo dije, ‘a ver si me acuerdo’ porque lo había hecho cuando tenía 18 años, hace treinta años. Empecé a cortarle y él lo publica. Yo pensé que me iba cortar, pero me dejó colgado. Andrea me dice, yo te cortaría, pero quizá te dejo mal, así que yo me autopeluqué. De ahí se pasaron la voz. A donde yo iba, ya de gratitud les cortaba y me daban una propina. Fue en el momento exacto, fue el ‘nuevo bautizo’.
Tú vienes de una vida militar, has sido policías, pero tu orígenes fueron humildes.
Mi papá es cusqueño, de Chumbivilcas, mi mamá es de Apurímac, aún hay familia en ambos lugares. Mis viejitos actualmente radican en Arequipa. La urbanización donde yo crecí en en Arequipa, Nuevo Perú, era un barrio con muchas limitaciones, sin luz, sin agua. No tuvimos televisor hasta que tuve 12 años, en blanco y negro, con tubos. Si la antena fallaba, estaba arriba. Fue una infancia muy feliz, con los amigos del barrio, estudié en un colegio nacional. Somos tres hermanos, dos varones y una mujer. Mis viejitos a pesar de las limitaciones, nos pudieron dar de todo, nos sacaron adelante, todos somos universitarios. Yo terminé dos carreras más de la de policía, una maestría en Gestión Minera en la Universidad Nacional del Centro y un doctorado en Seguridad y Control en Minería, y con todas esas fui jardinero en Estados Unidos.
La carrera de la Policía, por qué termina, por qué te sales
Yo tuve la dicha de pertenecer a la Policía. Postulé luego de terminar mi servicio de dos años en la Fuerza Aérea, a donde entré porque me faltó talla para entrar a la escuela de oficiales. Medía 1:65 con seis rayas creo y en mi primera postulación me bajan por un centímetro con cuatro rayas. La única forma de crecer es hacer ejercicio y me metí al servicio militar voluntario y dio resultado, cuando postulé medía 1.67, lo que necesitaba, crecí un centímetro con cuatro rayas. Cuando postulo a la Policía, lógicamente estábamos de distintas razas, sangres, yo venía de abajo, siempre había una ligera discriminación para la gente que venía de provincia, también estaban los blanco, los hijos de generales, de oficiales. La única forma de salir de esos espacios era caracterizándote de algo, yo practiqué lucha libre y hacía música. Mi relación con la Policía hoy en día, desde mis inicios hasta el día que me retiré, fue después de haber cumplido los 20 años de servicio al Estado, por mi solicitud porque ya había despegado Clavito como orquesta.
He trabajado en varias unidades especiales, estuve en la División Antidrogas, operativos grandes en el Vraem. Participé en una operación de la última pista de aterrizaje clandestina. Yo fui becado para estar en Estados Unidos, por el Army americano. Es una institución que se dedica a preservar la paz en el mundo, de este lado del hemisferio. Como consecuencia de eso, regresas y desarrollas para lo que te han preparado, como trabajar con la gente de la DEA. Yo pertenecí a una unidad de inteligencia de Los Sinchis de Masamari. Fuimos capacitados para combatir el narcotráfico, contrasuversión, paracaidismo, estuve en el área de salvataje, como para ser anfibio, tierra y aire. No he contado esto porque a veces trae anticuerpos, más si estás en el mundo del espectáculo.
¿Estuviste cara a cara con la muerte?
Muchas veces, era parte del trabajo. Yo entré en la época dura, cuando la suversión estaba fuerte, yo entré en el 90. Cuando me despido de la Policía luego de 20 años, ya me sumaron después los de la escuela de oficiales y mis años de servicio militar, entonces me retiro con 26 años de servicio a la Nación. Todavía sigo en contacto con mi promocial, muchos son coroneles, comandantes y hay un general.
¿A ti te extorsionaron?
Sí, fue en 2015. Ha pasado buen rato que debió hacerse algo, pero por mi parte no volvieron a molestarnos, llegamos a un entendimiento, ellos reconsideraron su posición frente a mí y yo dejé de reclamar.
Cuando dejas la Policía, empieza a despegar la orquesta, cómo fue es parte artística
Empezamos en Huancayo, primero fue una orquesta de la Policía, Latin Police, lo hicimos por orden de un general, él decide hacer una orquesta para mandar un saludo a las provincias en sus fiestas importantes. Armamos una orquesta en tres días, fue en el 2004. Al año siguiente, había tal aceptación que ya se estaba volviendo comercial. Yo me retiro, me colocan en otro lado. A mi retorno a Huancayo, en 2007, empezamos a grabar de manera privada y y para 2009 a los que habían parte de la orquesta de la Policía los capto, y por eso el nombre de ‘Chela’, ‘Clavito y los Chicos de la Latin’, era largo, así que pusimos ‘Chela’. Chela no es una persona, hasta ahora parece que una ex dice que es la ‘Chela’. Ella no sé por qué se imagina que la han bautizado así. Otros piensan que es por la cerveza.
Pilar Astucuri fue tu pareja cuando ya tenías la orquesta
Sí. Justo ahora se ha incorporado una cantante, Katy Ramos, que ella era de los inicios de Clavito. Cuando ella se va... te cuento... nosotros hicimos un videclip con Gerardo Zamora y Katy se va porque su esposo le reclamó por las escenas candentes, por respeto a su pareja me dijo que se iba retirar. Yo me quedo un poco dolido porque se habían hecho inversiones, y ahora es donde llega la persona que tú has mencionado.
Ella ha salido a decir que te has llevado sus canciones
Ese es el problema. Yo daría un espacio si fuese así, pero cuando no es así no puedo darle opción a nada. Ella llegó como reemplazo de otra cantante y se atribuyé ser la formadora y forjadora de Clavito, te conté cómo empezamos en 2004, ella llegó en 2014 y antes de ella hubieron otras cantantes, ella fue una cantante más de la agrupación y ahí pasa la peor estupidez de mi vida, fue mi etapa de huevón. Fue lo peor que me pudo haber pasado, no sé por qué permití tanto.
¿Qué permitiste?
No fue una parte bonita de mi vida, quiero dejarlo ahí porque hoy en día soy un hombre feliz, estoy agradecido con Dios por todo lo que me ha dado, pese a las cosas que pasaron, considero que Dios fue muy bueno conmigo al darme no solo la vida que tengo, sino el don de la composición, eso creo que no se lo da a nadie. Aunque no creo que sea buen cantante. Yo nunca he dicho que soy buen cantante, yo soy cantautor, pero trato de generar la interpretación para que pueda entenderme el público. Trato de que mis letras sean de una historia real, con romanticismo, desamor
¿Cuánto desamor ha habido en tu vida? ¿has sido picaflor?
He sufrido mucho por desamor, una vez intenté quitarme la vida, fue en la época que pasé con mi anterior relación. Pasaba un divorcio, tenía que estar solo, se perdió mucho dinero, perdí el bus, todo eso sumado a cómo me sentía como hombre.
¿Comprobaste que te pusieron los cuernos?
Yo tengo evidencia de todo, como buen policía todo está guardado. No quiero hablar de ese pasado, solo para agarrar impulso.
Esa fue una segunda etapa en tu vida, porque en la primera tienes dos hijos, de más de 30 años
Lo de mis hijos casi no lo he comentado con nadie. Muchos piensan que he abandonado a mis hijos, pero justo estuve con mi hijo en Huancayo, tiene casi 30 años, es ingeniero de software, egresado de la UPC, es un gran profesional, ahora es gerente del BCP. El otro está por graduarse de artiquecto de la Universidad de Lima. Son de distintas mamás, cada uno con su mamá para que no se peleen.
En mi camino de la vida de parejas he tratado de no hacer daño a nadie, de portarme dentro de lo justo y después de también, y si todavía quedan resentimientos con alguien, creo que con la pandemia traté de olvidar y de perdonar sobre todo, pero ya cuando me entero que esa persona en la pandemia quiso usar mis obras, ningunear o decir ‘pero ahí va ganar su platita’, ni siquiera un poquito de respeto, ya me hiciste leña una vez, no va pasar de nuevo porque ahora sí tengo familia, tengo esposa, hijas que van a verlo en algún momento. Restétame un poquito y si no, voy a, legalmente, tratar de que me respetes. Me denunción de infiel, de golpeador, de todo, pero hasta ahora nada. Todo fue mediático. No debe chocar con mis obras musicales, hasta mis slogans los había puesto, me sentí violado. Latin Music Record, que está viendo nuestros intereses en las plataformas, vieron la denuncia en YouTube, creo que demoraron un poquito, pero las obras que no tienen autorización han sido bajadas de YouTube, pero no solo de ella, se lo tomó muy a pecho, pero no fue nada personal. También hubieron otros artistas de Bolivia, fue un tema de autoría. Yo no tengo nada en contra de ella, ya pasé esa página.
Me acuerdo que tres años antes de la pandemia, cuando nos conocimos, estabas saliendo con esta niña que falleció, Grace Laura, se te veía muy entusiasmado, cuando sufre este accidente por Acho, se decían muchas cosas, que la niña se iba a una reunión, que no te había avisado, que se habían peleado y por eso se fue...
En esa época no me escuchaba ni la prensa, algunos medios sí pero sobre todas las cosas el público ya se había hecho un concepto de lo que había sucedido y eso era para ellos. Cuando te decía que yo pasaba de depresión en depresión era porque a parte de los problemas económicos, entraba y salía de depresiones.
¿Eres depresivo?
No, pero si estoy en terapia y tengo un médico personal que me ve.
De esa etapa de depresiones, una de esas es el caso de la finadita. El punto más preocupante para mí es cuando empiezan a decir que yo era el asesino de la chica. Cuando me dan la noticia, me da la mamá la noticia, me llama y me cuenta. Yo estaba en la oficina, en la casa-estudio en Barranco. Me pide que vaya, me agarró frío. La señora estaba alterada con la pérdida de su hija pero notaba algo extraño, me decía ‘tienen que averiguar quién la mató’, pero fue un accidenmte. Yo tuve que llamar a la Policía, ir a la comisaría, hablar con el mayor a cargo, me explicó a grandes rasgos, si tenía que pagar investigadores aparte los pagaba. Para eso era el primer o segundo día. Yo traté de hacer lo mejor que pude para que se aclare, lo prometí. Cuando mi hermano, que era el manager, era militar y tenía mucha llegada con los oficiales de la PNP. Ese día del velorio estaba Chacalón Jr. vino a cantar al velorio, yo no sabía por qué, pero luego todo empezó a tener sentido. Resulta que la mamá de Grace había estado en un evento en la tarde del domingo con el primo y productor de Chacalón Jr. Resulta que Grace había sido su pareja y habían convivido, antes y estando conmigo también, porque estaban retomando su relación. Yo me entero de todo esto después.
¿Qué pasó entonces?
El día de su muerte, habían estado en la tarde por SJL y en la noche por el Cono Norte y que esa noche que habían estado en las finales de la fiesta, ella sale de allá y su pareja la había embarcado, después de eso es que pasa el accidente. Por qué la mamá no fue transparente, por qué lo ocultaban tanto y por qué permiten que me digan asesino, la mamá sabía. Yo no voy a hablar de Grace, pero sí de la mamá porque permitió eso. A mí me citaron, yo afronté todos los gastos del sepelio, por el cariño, pero cuando me fui dando cuenta de todo lo que había pasado a mis espaldas, lo consideré injusto. Me hicieron cantar a mí junto a Chacalón, el día del velorio. Después me di cuenta de tremenda falta de respeto. La señora va a un programa de televisión y me dice ‘abusivo’, que yo era responsable, el culpable, dijo de todo. Yo me callé, pensé y dije ‘no me conviene hablar porque está dolida, pero además nadie me va escuchar’. No debí callar, debí decir algo siquiera, el silencio puede otorgar. Recuerdo que a la señora le entregaba un dinero por cada presentación, como si Grace estuviera, siempre ponían los zapatitos de Grace en el escenario como si estuviera, los músicos se acuerdan. Sin embargo, cuando me llegan los resultados de qué pasó, le corté el apoyo, luego me quiso amenazar, me llamó un abogado. Ella se va la prensa a denunciarme y a decir que yo tenía algo que ver. La señora nunca mencionó con quién estuvo con su hija y quién estuvo detrás de eso. Las cámaras de esa discoteca desaparecieron, solo estaban las de línea amarilla. Ahí quedó toda la historia, me tomaron mi manifestación en tres sitios. Con mucha pena, no sé qué habrán determinaron, sé que llegaron a la conclusión que fue un accidente de tránsito.
Andrea es un soporte grande en tu vida
Creo que ella es la causante de esta nueva versión de Clavito como empresa, como persona, como artita, como compositor, no se cansa cuando compongo, es tolerante, me apoya. Siendo menor que yo, ella es la que ha mejorado todo en Clavito, me ha hecho mucho bien su llegada, su energía, su hambre de crecer. Ella es la que está jalando esta nueva historia de la orquesta.
¿Cuánto tiempo tienen?
Cinco años y algo más.
Te va jalar la oreja
Sí me acuerdo de mi aniversario, hasta la hora, porque nos sacaron en los periódicos. Empezamos un 1 de mayo sin que nadie sepa, fue el Día de la Virgen de Chapi y yo soy muy creyente de ella. Fue de besito nomás porque no me dio espacio para más. No hay nada como estar tranquilo, feliz, en paz, con tu esposa, tus hijas, esos desayunos, almuerzos de familia, esos que vi en mi casa, hoy en día los estoy viviendo con Andreita.
¿Cuántos años le llevas?
Tu tengo 53 y ella casi la mitad.
¿Te han vacilado cuando sales con ella?
Un muchacho guapetón se me acerca y pensó que yo era su papá de Andreita y me hace la patería como que yo fuera el suegro, yo intuí que era por Andrea, porque por ahí se le escapa decir ‘qué bonita hija tiene usted’, no sabía qué hacer, no quería ser descortés, sutilmente tuve que darle a entender que no era mi hija, que era mi esposa. También me mandan saludos para mis nietas, que son mis hijas. Algunos también lo hacen a drede y les digo ‘cálmate’
¿Han pensado en casarse?
Sí, por religoso. No lo habíamos pensando antes hasta la pandemia. Siempre nos hemos sentido bendecidos, tiene bien arraigado el matrimonio. Entonces creo que lo mejor que puedo hacer para recibir la bendición de Dios es casarme por religoso y Andreita me dice ‘al menos en eso voy a ser la primera’.
¿Le diste anillo?
No, es que ya estamos casados por civil. Nos vamos a casar en abril, yo estoy muy ilusionado, porque como policía, hay una ceremonia muy bonita, castrense con cruce de espadas, siempre participé y soñaba con casarme así. Queremos que sea en la catedral.
¿Todo bien con Chechito?
A mí me encanta. Lo que pasa es que un día hice un comentario que la gente lo asoció con él. El mundo de la música no es para competir. Cada quien tiene su género y su público.
Andrea es Miss Perú US..
Sí, y nadie supo que era mi esposa. Jessica Newton se enteró después.
¿Ya tiene su vestido?
Ella tiene acceso a mis cuentas, es la encargada de ver la parte de la Sunat. También tiene la clave de mi celular, tiene acceso a todo.
¿Cuál es el momento más bochornoso?
Una vez estaba cantando en Huancayo, en la época de Latin Police, estaba un ministro, viceministros, estaba en plena Plaza Constitución. HAbía pueto un atril porque me olvidaba de la letra. La tarima estaba muy movediza y el atril se va, me quería morir porque no sabía la letra, me quedé medio mundo, queriendo decir algo, y una amiga entró a apoyarme, luego entro otro más, pero el momento ya se había dado. Tuve que decir que era una canción nueva, mentira porque ya la había cantado.
¿A quién te gustaría seducir?
Yo hoy en día vivo pensando en mi hogar. Llegando a los 50 ya casi es como una deuda existencial conmigo mismo, antes de morir, quiero hacer las cosas correctas y cuando me vaya de esta tierra quiero que ellos recuerden a un clavito chévere. Quisiera seducir a un mi esposa.
¿De qué te arrepientes o qué no volverías hacer en tu vida?
De ese matrimonio. Mi mamá me lo decía, la mamá nunca se equivoca, es más, ni quiso estar en el matrimomio, mi papá tampoco. Mi familia no aceptó ese romance, no les cuadraba
¿Con quién no trabajarías?
En la Policía aprendí algo, allá mucho se cultiva la lealtad. La lealtad para una empresa o para un colaborador es muy importante.
¿Cuando te molestas, qué lisura dices más?
Desahuévate.
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