Two Digital Boys, el dúo de música electrónica nacional, regresa a escena con “Eres todo lo que mata”, su más reciente canción, donde ha vuelto a trabajar con Jhovan Tomasevich, líder de la banda local ZEN. Como ya se había comprobado en su anterior sencillo, la química entre los enmascarados y el rockero es redonda, algo que se nota con mayor amplitud en este nuevo lanzamiento, que ya se puede escuchar en plataformas digitales y ver en YouTube.
“Volvimos a grabar con Jhovan porque la química musical en nuestra colaboración anterior fue increíble. Su voz tiene una energía única que complementa perfectamente nuestro estilo. Además, aporta una fuerza interpretativa que eleva nuestras composiciones a otro nivel. Queríamos capturar esa magia nuevamente en esta nueva canción y sentimos que él era ideal para transmitir lo que buscábamos”, comentaron Redmon y Jota, también conocidos como Two Digital Boys.
“Eres todo lo que mata” fue compuesta en menos de 30 minutos por Jhovan Tomasevich sobre una pista musical ya grabada por el dúo, mientras iba camino a su casa. Y aunque inicialmente iba a ser destinada para otro cantante invitado, el líder de ZEN decidió grabarla porque sintió que iba a seguir saliéndose de su zona de confort para abrazar géneros como el funk y el R&B, experimentar como artista y rendirle tributo a Prince, uno de sus más grandes referentes.
“Esta experiencia fue más interesante que la anterior, porque es una canción que la trabajamos en conjunto, hecha en minutos, mientras Redmon y Jota me llevaban a mi casa en su auto. Me gusta mucho porque me permite explorar partes vocales y armonías dentro de un género que está fuera de mi zona de confort. Este tema también me ha permitido explorar mis influencias funky como las de Prince, por eso les sugerí mantener mi voz bien aguda y arriba”, comentó el cantante.
“Eres todo lo que mata” es una canción que habla sobre la intensidad y el magnetismo de una relación que es tan apasionante como peligrosa. La letra refleja la atracción irresistible hacia alguien que tiene el poder de controlarte, casi como una trampa dulce de la que no puedes escapar. A través de imágenes poderosas y metáforas, se explora el concepto de un amor que es “todo en esta vida” pero también es “todo lo que mata”, simbolizando esa mezcla de euforia, deseo y autodestrucción.
El video de la canción fue dirigido por Rodrigo Cabrera. La historia se construyó a partir de la letra escrita por Jhovan, y presenta a un chico que alucina buscando a una mujer durante un día lleno de actividades divertidas, como juegos de video, bowling y paseos en auto. A medida que el día avanza, disfruta de estos momentos como si fueran una experiencia perfecta de amor. Sin embargo, al final, cuando llega a la casa de la chica, ella ha desaparecido, sugiriendo que todo podría haber sido solo un sueño. Esta historia visualiza la intensidad y la fugacidad del amor descrito en la canción.