Mario Irivarren e Ivana Yturbe: ¿Cómo es el romance de estas jóvenes estrellas? [FOTOS]

Mario Irivarren (24) e Ivana Yturbe (19) se han convertido en la pareja del momento y sus seguidores sueñan verlos casados, pero los jovencitos beben su amor de sorbo en sorbo y ven lejano ese proyecto de vida. Por el momento, disfrutan de sus siete meses de relación, tiempo en el que no ha faltado su par de peleítas que jamás hicieron públicas porque aclaran ‘no lucramos con nuestros sentimientos’.

Mario, ¿son novios o enamorados?No hay noviazgo, ni matrimonio, ni hijos, ni convivencia. Ningún plan serio, nuestro plan a futuro ahora es ver qué vamos a hacer por el ‘Día de los enamorados’ y por Semana Santa, ese es nuestro plan más lejano.

¿Es difícil manejar una relación sabiendo que siempre están vigilados por una cámara de televisión?Tenemos siete meses de enamorados y creo que la parte difícil de llevar una relación no es esa, es lo que piensa la gente porque están los que nos tienen cariño y los otros a los que no les agradamos; pero Ivana y yo nunca hemos lucrado con nuestra relación, no nos peleamos a propósito para salir en portadas, ni hacemos escándalos públicos ni nada.

¿Quieres decir que todo lo manejan en perfil bajo?Sí, siempre hemos mantenido perfil bajo. Lo complicado de una relación pública es que la gente se entromete mucho. A veces, entiendes los programas, los periódicos, las revistas, pero si uno sabe cuidarla, como lo hemos sabido hacer nosotros, creo que no vamos a tener problemas.

¿Han tenido sus peleítas?Igual que cualquier relación hemos tenido nuestro par de peleas fuertes, pero nadie se ha enterado porque no ha sido en la vía pública, ni hemos salido a los medios a hablar mal el uno del otro. Tampoco lo hemos publicado en las redes. Es más, también nuestros buenos momentos son nuestros. Esporádicamente lo compartimos en las redes porque la gente que nos sigue también tiene derecho a conocer nuestra felicidad. Si hemos tenido alguna vez un mal momento, ha sido muy íntimo, muy privado, y se ha solucionado entre cuatro paredes.

Se dice que en algunos programas ‘arman peleas’, ¿tú permitirías eso?No, a mí no me ha pasado de que me digan: peléate o expón tu relación, pero muchas veces cuando se comparte un programa, por la propia convivencia y la adrenalina está a tope, suelen darse estas peleas. En nuestro caso no, porque Ivana y yo nunca compartimos programa.

*Ivana, ¿cómo defines a Mario? *Tiene muchas virtudes. Es un chico súper responsable, buena persona, cuida mucho a su familia.Mario: Lavo, plancho, cocino (ríe).Ivana: Su peor defecto es que es un renegón, impaciente a más no poder y es muy impulsivo.

Y tú, ¿cómo eres?Me cuesta mucho más renegar que a él.Mario: Soy un renegón, impaciente y ella es una renegona engreída, Ivana: O sea, cuando le digo ‘estoy molesta’, me mira se ríe y, obviamente, sabe que ni siquiera estoy molesta porque no me puedo molestar.

¿Quién de los dos da el primer paso para la reconciliación?Mario: Solo fluye, fluye.Ivana:Es que a mí me hace reír, entonces se me pasa. En realidad, tratamos de no hacer mucho caso para que no siga aumentando la tensión.Mario: Bueno, pero por lo general, nunca estamos peleados. Hemos aprendido a ignorarnos porque si yo respondo, ella responde y eso desencadena un apocalipsis.

¿Tratan de llevar la fiesta en paz?Mario: Sí, preferimos hablar cuando los dos estamos calmados para luego no decir las cosas de manera fea.

¿Son románticos?Mario: Soy un romántico moderno, para mí dedicar canciones y las rosas ya pasaron de moda, no van conmigo. A ella le gusta como soy. Creo que si fuera el típico enamorado que trae peluches, rosas, ella se aburriría, digamos que le rompí el esquema. Ivana es detallista.

Se complementan…Sí. A mí me gusta divertirme, a ella también, pero a veces quiero descansar y ella lo entiende. Soy renegón y, si tengo a mi lado a alguien que también reniega, vamos a chocar. Ella es muy engreída, entonces si yo accedo a todos sus engreimientos, también estoy mal. Sé hasta dónde engreírla y decirle aquí te estás excediendo. Es una combinación, un poco de todo.

Ivana, ¿Mario te ha cambiado?Un montón. No sé si ha llegado en el mejor momento, pero mis días son más lindos. Él me hace reír, me hace feliz.Mario: ¿Ah, yo soy el payaso? (ríe)Ivana:Ja, ja, ja, es un buen chico. Mario: Sí ha cambiado bastante. Es parte de un proceso de maduración. Ivana solo tiene 19 años y está en una etapa muy especial. Ella es una mujer, porque ya es una mujer, que quiere vivir como niña y ahí hemos trabajado para que asuma que la madurez no la determina la edad y que no se puede excusar en que tiene 19 años cuando ya lleva la vida de una mujer. Es independiente, nadie la mantiene, paga sus cuentas.

De verdad, ¿no han hablado de matrimonio?Mario: Será cuando sienta que ya estoy preparado para formar una familia, cuando tenga 34 o 35 años, ahorita no. Yo tengo 24 años y ella 19, y solo siete meses de relación.

¿Cómo manejan los celos?Ivana: Celosa, lo normal. Él no es nada celoso.Mario: Algo que quería dejar en claro es que tu pareja no es tu propiedad, yo no soy de ella ni ella es mía. Al menos que me traigas el contrato de compra/venta diciendo que yo le pertenezco. Todas las personas somos libres. Si alguna vez el amor se desgasta, cada quien irá por su lado.

¿Se han tatuado sus nombres?Mario: Sí, pero ninguno con nuestros nombres.Ivana: Dicen que es mala suerte.Mario: No soy supersticioso, pero nada te garantiza que vas a pasar con esa persona el resto de tu vida. Uno es dueño de su silencio y esclavo de sus palabras. Creo que así es el refrán.

Ivana, ¿es cierto que quieres postular al Miss Perú?Sí, no sé si este año o el otro.

Estudiar algo, tal vez una carrera.Me metí a educación inicial porque me encantan los niños, pero no me gusta leer mucho y como esto lleva psicología y un motón de cosas, lo dejé.

Mario, ¿algún mensaje para los lectores de Trome?Agradecerles por tomarse un tiempo para leer esta entrevista. Desearles un buen día, éxitos para todos y resaltar que uno tiene que luchar por sus sueños. Que hagan las cosas de corazón y a conciencia, pongan su verdadero esfuerzo y verán que la recompensa siempre será grata.

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Mario Irivarren (24) e Ivana Yturbe (19) se han convertido en la pareja del momento y sus seguidores sueñan verlos casados, pero los jovencitos beben su amor de sorbo en sorbo y ven lejano ese proyecto de vida. Por el momento, disfrutan de sus siete meses de relación, tiempo en el que no ha faltado su par de peleítas que jamás hicieron públicas porque aclaran ‘no lucramos con nuestros sentimientos’.

Mario, ¿son novios o enamorados?No hay noviazgo, ni matrimonio, ni hijos, ni convivencia. Ningún plan serio, nuestro plan a futuro ahora es ver qué vamos a hacer por el ‘Día de los enamorados’ y por Semana Santa, ese es nuestro plan más lejano.

¿Es difícil manejar una relación sabiendo que siempre están vigilados por una cámara de televisión?Tenemos siete meses de enamorados y creo que la parte difícil de llevar una relación no es esa, es lo que piensa la gente porque están los que nos tienen cariño y los otros a los que no les agradamos; pero Ivana y yo nunca hemos lucrado con nuestra relación, no nos peleamos a propósito para salir en portadas, ni hacemos escándalos públicos ni nada.

¿Quieres decir que todo lo manejan en perfil bajo?Sí, siempre hemos mantenido perfil bajo. Lo complicado de una relación pública es que la gente se entromete mucho. A veces, entiendes los programas, los periódicos, las revistas, pero si uno sabe cuidarla, como lo hemos sabido hacer nosotros, creo que no vamos a tener problemas.

¿Han tenido sus peleítas?Igual que cualquier relación hemos tenido nuestro par de peleas fuertes, pero nadie se ha enterado porque no ha sido en la vía pública, ni hemos salido a los medios a hablar mal el uno del otro. Tampoco lo hemos publicado en las redes. Es más, también nuestros buenos momentos son nuestros. Esporádicamente lo compartimos en las redes porque la gente que nos sigue también tiene derecho a conocer nuestra felicidad. Si hemos tenido alguna vez un mal momento, ha sido muy íntimo, muy privado, y se ha solucionado entre cuatro paredes.

Se dice que en algunos programas ‘arman peleas’, ¿tú permitirías eso?No, a mí no me ha pasado de que me digan: peléate o expón tu relación, pero muchas veces cuando se comparte un programa, por la propia convivencia y la adrenalina está a tope, suelen darse estas peleas. En nuestro caso no, porque Ivana y yo nunca compartimos programa.

*Ivana, ¿cómo defines a Mario? *Tiene muchas virtudes. Es un chico súper responsable, buena persona, cuida mucho a su familia.Mario: Lavo, plancho, cocino (ríe).Ivana: Su peor defecto es que es un renegón, impaciente a más no poder y es muy impulsivo.

Y tú, ¿cómo eres?Me cuesta mucho más renegar que a él.Mario: Soy un renegón, impaciente y ella es una renegona engreída, Ivana: O sea, cuando le digo ‘estoy molesta’, me mira se ríe y, obviamente, sabe que ni siquiera estoy molesta porque no me puedo molestar.

¿Quién de los dos da el primer paso para la reconciliación?Mario: Solo fluye, fluye.Ivana:Es que a mí me hace reír, entonces se me pasa. En realidad, tratamos de no hacer mucho caso para que no siga aumentando la tensión.Mario: Bueno, pero por lo general, nunca estamos peleados. Hemos aprendido a ignorarnos porque si yo respondo, ella responde y eso desencadena un apocalipsis.

¿Tratan de llevar la fiesta en paz?Mario: Sí, preferimos hablar cuando los dos estamos calmados para luego no decir las cosas de manera fea.

¿Son románticos?Mario: Soy un romántico moderno, para mí dedicar canciones y las rosas ya pasaron de moda, no van conmigo. A ella le gusta como soy. Creo que si fuera el típico enamorado que trae peluches, rosas, ella se aburriría, digamos que le rompí el esquema. Ivana es detallista.

Se complementan…Sí. A mí me gusta divertirme, a ella también, pero a veces quiero descansar y ella lo entiende. Soy renegón y, si tengo a mi lado a alguien que también reniega, vamos a chocar. Ella es muy engreída, entonces si yo accedo a todos sus engreimientos, también estoy mal. Sé hasta dónde engreírla y decirle aquí te estás excediendo. Es una combinación, un poco de todo.

Ivana, ¿Mario te ha cambiado?Un montón. No sé si ha llegado en el mejor momento, pero mis días son más lindos. Él me hace reír, me hace feliz.Mario: ¿Ah, yo soy el payaso? (ríe)Ivana:Ja, ja, ja, es un buen chico. Mario: Sí ha cambiado bastante. Es parte de un proceso de maduración. Ivana solo tiene 19 años y está en una etapa muy especial. Ella es una mujer, porque ya es una mujer, que quiere vivir como niña y ahí hemos trabajado para que asuma que la madurez no la determina la edad y que no se puede excusar en que tiene 19 años cuando ya lleva la vida de una mujer. Es independiente, nadie la mantiene, paga sus cuentas.

De verdad, ¿no han hablado de matrimonio?Mario: Será cuando sienta que ya estoy preparado para formar una familia, cuando tenga 34 o 35 años, ahorita no. Yo tengo 24 años y ella 19, y solo siete meses de relación.

¿Cómo manejan los celos?Ivana: Celosa, lo normal. Él no es nada celoso.Mario: Algo que quería dejar en claro es que tu pareja no es tu propiedad, yo no soy de ella ni ella es mía. Al menos que me traigas el contrato de compra/venta diciendo que yo le pertenezco. Todas las personas somos libres. Si alguna vez el amor se desgasta, cada quien irá por su lado.

¿Se han tatuado sus nombres?Mario: Sí, pero ninguno con nuestros nombres.Ivana: Dicen que es mala suerte.Mario: No soy supersticioso, pero nada te garantiza que vas a pasar con esa persona el resto de tu vida. Uno es dueño de su silencio y esclavo de sus palabras. Creo que así es el refrán.

Ivana, ¿es cierto que quieres postular al Miss Perú?Sí, no sé si este año o el otro.

Estudiar algo, tal vez una carrera.Me metí a educación inicial porque me encantan los niños, pero no me gusta leer mucho y como esto lleva psicología y un motón de cosas, lo dejé.

Mario, ¿algún mensaje para los lectores de Trome?Agradecerles por tomarse un tiempo para leer esta entrevista. Desearles un buen día, éxitos para todos y resaltar que uno tiene que luchar por sus sueños. Que hagan las cosas de corazón y a conciencia, pongan su verdadero esfuerzo y verán que la recompensa siempre será grata.

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