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Lucila Justina Sarcines Reyes, nació en Lima el 19 de julio de 1936. Su familia fue de condición humilde por ello desde los 5 años comenzó a cantar en las calles para conseguir dinero, su situación empeoró cuando su padre falleció el año 1942 y la nueva pareja de su madre no tenía un buen trato con ella. (Foto GEC Archivo Histórico)
GEC Archivo Histórico
Lucha Reyes

Lucila Justina Sarcines Reyes, nació en Lima el 19 de julio de 1936. Su familia fue de condición humilde por ello desde los 5 años comenzó a cantar en las calles para conseguir dinero, su situación empeoró cuando su padre falleció el año 1942 y la nueva pareja de su madre no tenía un buen trato con ella. (Foto GEC Archivo Histórico)

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Un incendio en su casa hizo que la familia se mudara a Barrios Altos, uno de los barrios donde se cultivaba el criollismo. La difícil situación económica de la familia originó que su madre la enviara al Convento de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor donde estudió hasta el tercer grado de primaria. (Foto GEC Archivo Histórico)
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Un incendio en su casa hizo que la familia se mudara a Barrios Altos, uno de los barrios donde se cultivaba el criollismo. La difícil situación económica de la familia originó que su madre la enviara al Convento de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor donde estudió hasta el tercer grado de primaria. (Foto GEC Archivo Histórico)

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Lucila durante su juventud trabajó en diversos oficios con la finalidad de llevar el sustento económico a su hogar. A mediados de los años 1950 participa en el programa “El Sentir de los Barrios” cantando el vals “Abandonada” generando gran expectativa en los oyentes de radio Victoria. (Foto GEC Archivo Histórico)
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Lucha Reyes

Lucila durante su juventud trabajó en diversos oficios con la finalidad de llevar el sustento económico a su hogar. A mediados de los años 1950 participa en el programa “El Sentir de los Barrios” cantando el vals “Abandonada” generando gran expectativa en los oyentes de radio Victoria. (Foto GEC Archivo Histórico)

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Luego de superar problemas de salud que la llevaron a estar internada en el Hospital, Lucila volvió al canto presentándose con el nombre artístico de Lucha Reyes. Su bella voz fue escuchada por Gonzalo Toledo quien la presentó a Augusto Ferrando y este la integró a su elenco de la “Peña Ferrando”. (Foto GEC Archivo Histórico)
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Lucha Reyes

Luego de superar problemas de salud que la llevaron a estar internada en el Hospital, Lucila volvió al canto presentándose con el nombre artístico de Lucha Reyes. Su bella voz fue escuchada por Gonzalo Toledo quien la presentó a Augusto Ferrando y este la integró a su elenco de la “Peña Ferrando”. (Foto GEC Archivo Histórico)

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Lucha Reyes como integrante de la Peña Ferrando ganó popularidad y se presentó también en las principales Peñas de la capital deleitando a los asistentes con su voz. En 1969 graba un mini long play con 6 canciones y en 1970 es contratada por el sello discográfico RCA con quienes graba su primer larga duración “La Morena de Oro del Perú” donde destacan los valses “Regresa” y “Tu voz”. (Foto GEC Archivo Histórico)
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Lucha Reyes

Lucha Reyes como integrante de la Peña Ferrando ganó popularidad y se presentó también en las principales Peñas de la capital deleitando a los asistentes con su voz. En 1969 graba un mini long play con 6 canciones y en 1970 es contratada por el sello discográfico RCA con quienes graba su primer larga duración “La Morena de Oro del Perú” donde destacan los valses “Regresa” y “Tu voz”. (Foto GEC Archivo Histórico)

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Lucha Reyes durante su fructífera carrera musical también publicó otros grandes éxitos como: Propiedad privada, Déjalos, Una carta al Cielo, Jamás Impedirás, Corazón, Un rosal divino, Por unos ojazos negros, Así lo quieres tú y Qué viva Chiclayo. (Foto GEC Archivo Histórico)
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Lucha Reyes

Lucha Reyes durante su fructífera carrera musical también publicó otros grandes éxitos como: Propiedad privada, Déjalos, Una carta al Cielo, Jamás Impedirás, Corazón, Un rosal divino, Por unos ojazos negros, Así lo quieres tú y Qué viva Chiclayo. (Foto GEC Archivo Histórico)

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Gracias a su talento Lucha Reyes fue ganándose al público nacional e internacional, en Perú tuvo un programa en radio llamado “Primicias Criollas”. En julio de 1972 se presenta en el Waldorf-Astoria de Nueva York y Chicago alcanzando un éxito rotundo”. (Foto GEC Archivo Histórico)
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Lucha Reyes

Gracias a su talento Lucha Reyes fue ganándose al público nacional e internacional, en Perú tuvo un programa en radio llamado “Primicias Criollas”. En julio de 1972 se presenta en el Waldorf-Astoria de Nueva York y Chicago alcanzando un éxito rotundo”. (Foto GEC Archivo Histórico)

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Mientras la fama de Lucha Reyes iba en aumento su estado de salud desmejoraba, por lo que a inicios de 1973 los médicos le prohibieron seguir con sus presentaciones de manera definitiva. Lucha Reyes le pidió a Pedro Pacheco que le compusiera una canción de despedida y Pacheco le escribió “Mi última canción”. (Foto GEC Archivo Histórico)
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Lucha Reyes

Mientras la fama de Lucha Reyes iba en aumento su estado de salud desmejoraba, por lo que a inicios de 1973 los médicos le prohibieron seguir con sus presentaciones de manera definitiva. Lucha Reyes le pidió a Pedro Pacheco que le compusiera una canción de despedida y Pacheco le escribió “Mi última canción”. (Foto GEC Archivo Histórico)

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El 31 de octubre de 1973, cuando iba en su auto camino a la misa de APDAYC, sufrió un infarto falleciendo a la edad de 37 años. El 1 de noviembre sus restos fueron trasladados a la Iglesia San Francisco, donde se celebró la misa de cuerpo presente y luego de ella su féretro fue llevado en hombros al Cementerio El Ángel, el recorrido duró cerca de tres horas y fue acompañado por unas 30,000 personas”. (Foto GEC Archivo Histórico)
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Lucha Reyes

El 31 de octubre de 1973, cuando iba en su auto camino a la misa de APDAYC, sufrió un infarto falleciendo a la edad de 37 años. El 1 de noviembre sus restos fueron trasladados a la Iglesia San Francisco, donde se celebró la misa de cuerpo presente y luego de ella su féretro fue llevado en hombros al Cementerio El Ángel, el recorrido duró cerca de tres horas y fue acompañado por unas 30,000 personas”. (Foto GEC Archivo Histórico)


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