Después de denunciar por violencia familiar a su todavía esposo Mauricio Diez Canseco, la cantante Lisandra Lizama contó que está llevando la ‘fiesta en paz’ con el popular ‘pizzero’ e incluso aseguró que guarda buenos recuerdos de su matrimonio.
“Legalmente aún es mi esposo. Sí guardo buenos recuerdos, por alguna razón es que decidí dar el sí. El matrimonio es algo muy serio, él supo cómo enamorarme. Tuvimos una hermosa luna de miel y pasamos lindos momentos, pero los matrimonios terminan por alguna razón. Fue una etapa bonita, ahora estamos en paz y todo tranquilo”, precisó Lizama, quien ayer estuvo de invitada en Radio Panamericana.
Asimismo, contó que ya iniciaron los trámites del divorcio. “Ya estamos en proceso del divorcio. Toda separación es triste, el tema mediático, que si la denuncia y el hecho de que la prensa estuviera afuera de mi casa... fue bastante fuerte. Así que para olvidarme de todo decidí centrarme en la música. Me puse a escribir y grabar temas. La música ha sido mi salvavidas”, mencionó.
Dijo que el pizzero tenía ”problemas con el alcohol y es violento”
QUÉ FUERTE. Mauricio Diez Canseco ve desmoronarse su matrimonio, luego que su esposa Lisandra Lizama saliera a arremeter contra él para acusarlo de alcohólico y violento. La cubana salió al frente para revelar detalles íntimos de la breve relación sentimental que tuvo con el empresario.
“Muchas cosas me desencantaron, y mucho antes de difundir el comunicado donde anunciaba la separación que hice porque necesitaba tener protección. Un mes antes, había hablado con él, y lo sabe, le dije que ya no se podía seguir, hablamos como dos personas maduras. Intenté muchas veces salvar el matrimonio”, reveló.
En entrevista con Ojo, la modelo y parte del team ‘Chica Dorada’ volvió a ratificar que vivió agresión psicológica junto al ‘pizzero’. Según expuso, su amorío se manchó con fuertes discusiones producto de los supuesto arranques de Mauricio.
“La última discusión que tuvimos y le dije, de ninguna manera quiero seguir, no lo aceptó, me dijo: mira, vamos a salvarlo, vamos a solucionarlo, pero ya le había perdonado cosas feas, como seis veces anteriores. Traté de solucionarlo, pero no, sé que la gente no cambia, cuando tienes problemas de carácter, más si tienes problemas con el alcohol que te hace ponerte violento, esas cosas no cambian. Estoy muy clara en eso, yo sabía que lo mejor era separarnos”, acotó.