Magaly Medina continúa arremetiendo contra los favoritos de la televisión peruana. Es así que cuestionó la veracidad de El Valor de la Verdad, programa conducido y producido por Beto Ortiz que se basa en la mundialmente conocida prueba del polígrafo.
En la última edición de Magaly TV, La Firme, la periodista lanzó un informe donde entrevista a un experto poligrafista que considera que 'de alguna manera' el uso del detector de mentiras en este tipo de programas atenta contra la verdadera poligrafía, que tiene como objetivo descubrir la verdad.
Según la nota, la prueba del polígrafo tiene un 98% de certeza siempre y cuando sea usada de manera adecuada, siguiendo el protocolo avalado a nivel mundial. "Veintiún preguntas en una prueba de polígrafo, bajo ninguna circunstancia. Si hacemos 10, 15, 20 preguntas, ese resultado es tan igual como lanzar una moneda al aire y esperar qué cosa sale", dijo el experto.
En el informe se mencionó una contradicción entre las presentaciones de Poly Ávila y La Chama, Alexandra Méndez, en El Valor de la Verdad. En el caso de la argentina, contestó que no había estado ebria durante la fiesta del terror en Asia, respuesta que resultó en 'VERDAD' para el polígrafo.
Sábados después, la Chama se presentó en El Valor de la Verdad y le preguntaron si Poly Ávila había estado ebria en la reunión, a lo que la venezolana contestó que sí, respuesta que nuevamente resultó 'VERDAD' para el detector de mentiras. ¿A qué se debió tremenda contradicción?
"Hay un problema grave. Probablemente, la falta de cumplimiento de los protocolos en la ejecución de una prueba de polígrafo está generando eso, que no se guarde concordancia en el resultado de dos personas que se supone que tiene que guardar concordancia", señaló el especialista al mismo tiempo que indicó que una prueba de este tipo solo puede tener un máximo de 7 preguntas para ser fiable.
Asimismo, la nota de Magaly Medina puntualizó que cualquier persona está en la capacidad de someterse al polígrafo menos los niños, los psicópatas, los esquizofrénicos y personas que estén tomando ansiolíticos, como el caso de Nicola Porcella.
"Si lo evalúa (a una persona que esté tomando ansiolíticos), corre el alto riesgo que las reacciones fisiológicas que generen a la hora de la evaluación ya estén contaminadas, y por ende, el resultado deja de ser confiable", explicó el especialista.