En las próximas horas, la Policía interrogará a los agentes de seguridad y a los trabajadores de mantenimiento del condominio donde vive la conductora de televisión Ethel Pozo, a fin de esclarecer el hurto que sufrió en su casa, en una zona residencial de Surco, donde delincuentes se llevaron diferentes especies por un valor de 58 mil soles y 26 mil dólares, además de dos mil euros.
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Según las cámaras de vigilancia, el hecho se produjo el último viernes cuando el guardia, de iniciales E.N.F. (46), de una empresa particular, estaba en la caseta de la puerta principal de la urbanización Las Lagunas de Monterrico.
En las imágenes, en poder de los investigadores, se ve que los ladrones ingresaron en una camioneta BMW, negra, modelo X3, a las 5:30 de la tarde, y se habrían retirado a las 8:40 de la noche.
Aquel día, al igual que el jueves 19, la hija de Gisela Valcárcel y su esposo Julián Alexander no se encontraban en el domicilio. Ellos se percataron del hurto a las 4 de la tarde del sábado cuando llegaron.
En dicho condominio existe vigilancia las 24 horas, todos los días, y el acceso es solo para propietarios e invitados debidamente identificados.
CÁMARAS DE VIGILANCIA
Por esos motivos, agentes de la Dirincri sospechan de un ‘soplo’ o reglaje a la conductora de ‘América hoy’, pues se metieron cuando había salido con esposo Julián Alexander.
E.N.F. será citado a declarar, al igual que otros compañeros que cubren servicio en otras horas.
Dentro del predio, que no contaba con cámaras de seguridad, se recogieron huellas que son analizadas por peritos de Criminalística.
TODO LO QUE HURTARON A ETHEL POZO
Según la denuncia policial, a Pozo le hurtaron seis televisores, diez cuadros de plata, cuatro joyeros con aros, aretes y pulseras de oro y plata, diez carteras marca Praga, dos PlayStation, un Nintendo, una cámara fotográfica profesional, tres computadoras.
Además, memorias y portadocumentos con su visa, dos mil euros y mil dólares que estaban en la caja fuerte de su habitación, la cual también fue violentada.
Para el ilícito, los ‘robacasas’ fracturaron las chapas de todas las puertas y removieron los enseres.