Por estos tiempos aún se habla mucho de lo que fue la exitosa serie norteamericana “La familia Ingalls” (“Little House on the Prairie” en su idioma original). Además, hay muchos quienes recuerdan a los protagonistas de esta producción, como lo fue Michael Landon, quien era reconocido en su ambiente por lo bien que llevaba su cabello. Aquí te contamos un poco más de lo que pensaba el artista sobre este peculiar aspecto de su físico.
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Michael Landon sabía que en cada entrevista los curiosos preguntarían siempre por su cabello. Es por ello que el actor siempre se encargó de que se viera casi perfecto. ‘Charles Ingalls’ en “La familia Ingalls” sabía que sus cabellos le daban un valor agregado a su espectacular trabajo realizado en la serie.
Fue tanta la atracción que generaba su cabello que en alguna oportunidad Landon manifestó que cuando el muera lo único que quedaría sería “un cabello en un ataúd”.
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Al mismísimo estilo de aquel personaje que leíamos en la biblia, Sansón, el actor de “La familia Ingalls” reveló que cuando era joven y empezaba a lograr algo de notoriedad por su labor como artista, pensó que era su cabello el que le daba la fuerza.
Era 1983 y Landon confesaba más cosas sobre su cabello en el Washington Post: “Pesaba 125 libras en la escuela secundaria y era el mejor lanzador de jabalina en los Estados Unidos con diferencia. Bueno, eso simplemente no tiene sentido. Pero a mí me lo hace porque dejaba que mi cabello creciera más y más y más y más”.
En otro momento de la entrevista, Landon agregaba que cuando aún era un estudiante de la Universidad del Sur de California, tuvo que pasar por un hecho bochornoso; un grupo de jóvenes le afeitaron la cabeza en contra de su voluntad. Desde ese momento, el actor sentía que ya no tenía tanta fuerza y le costaba lanzar la jabalina. Posteriormente tuvo que dejar su centro de estudios por una lesión en el brazo.
Para Tim Ito, autor del libro ‘Conversaciones con Michael Landon’, el cabello del actor es ‘inolvidable’. Cabe precisar que los cabellos del intérprete de la serie estadounidense empezaron a convertirse en canas a una edad temprana, por lo que tuvo que recurrir a tintes para poder tapar los puntos grises.
Fue de pronto que Michael Landon habló sobre su futura muerte. El entrevistador del Washington Post le consultó sobre la posibilidad de tener un hijo más aparte de los 8 que ya tenía. A esta confesión el actor de “Little House on the Prairie” agregó que cuando él muera solo se vería “su cabello en un ataúd”.
En la que sería su última entrevista, con el presentador de televisión Johnny Carson, el actor norteamericano bromeó sobre el último arreglo que le había hecho a su cabello antes de acudir al espacio. “Ayer me hice las raíces”, dijo entre risas.
Aparentemente todo marchaba bien en la vida del actor, ya que había alcanzado el éxito tras su participación en “La familia Ingalls” y otras producciones, pero su adicción al alcohol y exageración al uso de tranquilizantes, hicieron que su salud se deteriore.
El 21 de mayo de 1991, Landon fue operado con éxito de un coágulo de sangre que casi le costó la pierna izquierda, pero falleció en Malibú el 1 de julio de ese mismo año, casi tres meses después de ser diagnosticado con cáncer al páncreas.
Landon dejó de existir cuando preparaba su cuarta serie. A su entierro asistieron el expresidente de los Estados Unidos Ronald Reagan y su esposa.
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