Edson Arantes Do Nascimento, Pelé, “O Rei”, el tricampeón del mundo, llámelo como quiera. Uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol, el más grande para muchos, junto a Diego Armando Maradona, es una de las leyendas vivas del deporte y su salud ha sido fuente de preocupación en noviembre pese al desarrollo del Mundial Qatar 2022. Pero el exfutbolista está acostumbrado a darle la contra a las adversidades, como lo hizo en su niñez, cuando debió trabajar para ayudar a su familia que estaba en la pobreza.
La gloria eterna de su trayectoria -1279 goles, campeón de Suecia 1958, Chile 1962 y México 1970- lo han hecho un personaje que siempre es noticia, sobre todo por su integridad en los últimos años, porque en setiembre de 2021 se le detectó un tumor en el colon.
Por ello, el astro brasileño asiste periódicamente al Hospital Israelita Albert Einstein para recibir un tratamiento de quimioterapia. El martes 29 de noviembre fue internado en el citado centro de recuperación de Sao Paulo, lo que generó rumores de que su salud, a sus 82 años, se encontraba más que deteriorada.
Sin embargo, los médicos responsables de Pelé informaron que su condición era estable y que no había ingresado a cuidados intensivos, como se deslizó en la prensa internacional. Sus hijas también descartaron que “O Rei” haya estado grave. Parece que el goleador seguirá peleando contra las adversidades de la vida, como le pasó a temprana edad.
Pelé trabajó como lustrabotas para ayudar a su familia que se encontraba en la pobreza. El astro brasileño era tan solo un niño cuando, primero, se desenvolvió como canillita y, después, se dedicó a limpiar zapatos para ganar un poco más de dinero durante la década de los 50.
Nacido en Tres Caracoles el 23 de octubre de 1940, “O Rei” vivió en un entorno complejo y, a pesar de su juventud, salió a la calle y no importaban las condiciones climáticas o sus dolencias físicas con tal de llevar algo de dinero a su hogar. Así fue que recibió la ayuda constante de un empleado de un banco que le dejaba comida o monedas a pesar de que no le lustraba el calzado.
Un hombre al que, décadas después, le dio una mano con un cargo en el Ministerio de Deportes, donde fue cabeza durante el gobierno de Fernando Cardoso, al no tener ingresos económicos suficientes para su jubilación y su hijo con discapacidad.
En sus memorias, declaraciones y documentales, siempre se recuerda el origen humilde de Pelé, una realidad que él también trató de cambiar cuando era funcionario en su país, apoyando al desarrollo del deporte en las zonas menos favorecidas.
Por más que parezca algo descabellado, el origen de la palabra “Pelé” para llamar al futbolista brasileño no se conoce a ciencia cierta. Es más, ni el propio exdelantero sabe por qué lo llaman de esa manera, pues siempre consultó con sus amigos de la infancia y no hay versiones que concuerden.
En una entrevista realizada en 1976 en México, uno de los profesores de Pelé, quien se encontraba con él, aseguró que no se sabe de dónde se originó aquel apodo y que en ningún idioma encontró algo similar, aunque reveló que, para los hawaianos, aquella palabra significa Dios. MÁS INFORMACIÓN AQUÍ.
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