Olivia Newton-John, famosa por interpretar a Sandy en la película de 1978 Grease, está atravesando por un momento complicado. Y es que además de afrontar graves problemas de salud a sus 68 años, tiene que lidiar con las adicciones de su hija.
Según informan varios medios australianos, Olivia Newton-John se vio forzada a cancelar su más reciente gira por un problema con la ciática. Al parecer la cantante no podría caminar o levantarse de la cama por los fuertes dolores.
Por su parte, la propia actriz lo confirmó por medio de su cuenta de Facebook. ‘Lamentamos mucho anunciar que los conciertos de Olivia Newton-John programados para mayo serán postergados debido a un problema grave con la ciática. Una vez que las fechas sean reprogramadas, lo publicaremos lo antes posible’, dice una reciente publicación de su cuenta oficial.
Sin embargo y como si fuera poco, su hija Chloe Lattanzi, fruto de su matrimonio de 11 años con el actor Matt Lattanzi, ha recaído en las adicciones. La también cantante de 31 años tiene un historial de malas costumbres.
Padeció de anorexia, estuvo envuelta en problemas de drogas y se enganchó con las cirugías plásticas. Pero eso no es todo porque según una fuente cercana recientemente ha sumado una nueva adicción: las bebidas energizantes.
‘Justo cuando Olivia piensa que ella está en la recta final de su recuperación, ha comenzado con esta adicción. Esta situación está aumentando el estrés que padece sobre sus problemas de salud’, dijo un allegado a Olivia Newton-John.
TAMBIÉN PUEDES LEER
Si te interesó lo que acabas de leer, puedes seguir nuestras últimas publicaciones por Facebook, Twitter, y puedes suscribirte aquí a nuestro newsletter.