Es un clásico de toda la vida ver esta saga de películas en Navidad. “Mi pobre angelito” o “Home alone” -en inglés- y a pesar de que han pasado varias décadas de su emisión, no deja de tener secretos o datos poco conocidos. A continuación te mostraremos secretos en los que no habías reparado de la cinta que protagonizó de pequeño Macaulay Culkin.
La película, que tuvo dos entregas con el actor original, arrasó en la taquilla estadounidense durante la temporada navideña de 1990 y continuó dominando durante la primera mitad del año siguiente. No obstante, hubo contratiempos que han sido prácticamente desconocidos.
DATOS Y CURIOSIDADES DESCONOCIDAS DE “MI POBRE ANGELITO”
Culkin realizó aportes espontáneos que mejoraron la trama e incluso modificaron escenas que pasaron de la categoría “una más” a la de “inolvidables”.
En la icónica toma de la loción de afeitar, el guion indicaba que debía abofetearse las mejillas, pero al escuchar “acción”, Macaulay se cacheteó -como indicaba el guión- pero mantuvo sus manos pegadas a su cara -como no indicaba el guión- y además emitió un grito que parecía el de la pintura de Edvard Munch.
Asimismo, una vez que la primera cinta se volvió un éxito, los padre del actor buscaron darle mayor “valor” a su hijo. Por la primera película cobraron cien mil dólares, por la segunda, “Mi pobre angelito: Perdido en Nueva York”, se llevaron cinco millones de dólares.
Entre sus compañeros de elenco, Macaulay Culkin forjó una muy linda relación con la que era su mamá en la ficción, Catherine O’Hara. La actriz solía mimarlo llevándole dulces y entretener los tiempos muertos de filmación contándole historias. Tanto es así que cuando se reencontraron en 2012, en una muestra de arte, él le gritó “Mami” y ella le respondió “Bebé” y terminaron sacándose una foto familiar.
En muchas escenas en donde O’Hara parece interactuar con Culkin en realidad lo hizo con una máquina de pelotas de tenis; como la legislación laboral estipulaba cuántas horas debían trabajar los niños, si se excedían, los productores recurrían a un truco. Filmaban los primeros planos de los chicos. Luego, la actriz actuaba ante un soporte con una pelota de tenis puesta a la altura del niño mientras un supervisor de guion leía el diálogo.
Además de respetar su horario de trabajo, la producción tomó otros cuidados con el pequeño protagonista. Cuando “Kevin” descubre la revista Playboy escondida y se la pone a mirar, para evitar que viera las fotos, los productores pegaron con cinta adhesiva las páginas.
Asimismo, en la toma donde Macaulay salta arriba y abajo de la cama comiendo palomitas, varios asistentes se acostaron en el piso para atraparlo en caso de que se cayera; y para muchas de las caídas y acrobacias de Kevin se recurrió a Larry Nicholas, un doble de acción que tenía treinta años.
Otra de las cosas desconocidas es que para la escena en donde uno de los ladrones, interpretado por Daniel Stern, tiene una tarántula que camina sobre su rostro, se utilizó efectivamente un ejemplar de verdad de este animal.
”La gente me preguntaba si la tarántula era real, si acaso no estaba asustado o quizás loco, o ambas cosas. La respuesta a las tres preguntas es sí. Cuando leí el guion por primera vez y hablé con el director, pensé que la tarántula sería una réplica. Les dije que podría hacer la escena más real (con una réplica) pero no los convencí. Trajeron a un tipo con una jaula y dentro había una tarántula llamada Barry”, escribió el actor en sus redes sociales.
“Pregunté si la había entrenado y me dijo que era complicado entrenar tarántulas. Recuerdo a Barry arrastrándose por mi cara. Traté de no hacerla molestar. Luego me acostumbré y creo que la tarántula llegó a ser una gran compañera de trabajo”, detalló.
¿DÓNDE VER “MI POBRE ANGELITO” EN ESTA NAVIDAD?
En estas fechas, puedes verlo en casa y con la familia a través de las plataformas pagas Disney+ y Amazon Prime Video.